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Lunes 17 de diciembre de 2001 | |
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Morales y Ojeda superaron un "Infierno" |
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Mostrando un gran estado físico, vencieron en un triatlón que mostró una marcada exigencia. |
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 Fue un verdadero infierno. Más de 35 grados, metidos en las bardas, en el río Negro, en la ruta. Sin más ropa que una pechera, pantalones cortos y zapatillas. Así, medio centenar de atletas le ganaron al calor y le dieron color al primer triatlón "Desafío al Infierno" que se desarrolló ayer como cierre de temporada de pruebas combinadas en la región.Una vez más, demostrando que es el mejor en este tipo de disciplinas, el roquense Maximiliano Morales se quedó con la victoria, esta vez en compañía de Nelson Ojeda, quien lo siguió de cerca durante los 80 kilómetros. Poco después de las 11.30, cuando el sol ya estaba encima de todos en Paso Córdoba, comenzó la exigente prueba, quizá la más agotadora después del "Tretratlón de la Manzana", y las veinticinco parejas enfilaron hacia las bardas. Morales y Ojeda sabían que en la primera etapa estaba la clave de la carrera para ellos. Ahí tenían que hacer la diferencia. Los casi cincuenta kilómetros de mountain bike podrían ser de vital importancia y después sería el tiempo de mantener el ritmo. Los primeros treinta minutos encontraron a Morales y Ojeda adelante de todos con una diferencia que orillaba los dos minutos sobre sus escoltas, Andrés Valenzuela-Mariano Bustos, y a casi tres de Pablo Sfeir-Fernando Helling, otro de los equipos que se perfilaba para estar arriba. Más atrás aparecían José Robles-Fabián Fernández, Pablo Tosoni-Martín Mancilla, Luis Sánchez-José Fuentes, Diego Bu- diño-Gustavo Merlo y el resto. En el trayecto camino a la zona denominada "Balsa vieja", donde estaban dispuestas las canoas para comenzar la segunda etapa del "Desafío", Ojeda pinchó y la incertidumbre se apoderó de los líderes. Ahí apareció el empuje de Morales, quien esperó a su compañero y lo fue guiando hasta el final de este agotador primer parcial. Su llegada a la "Balsa Vieja" fue esperada por una importante cantidad de público y enseguida emprendieron el trayecto sobre el río Negro. Con Morales y Ojeda marchando cómodamente en punta, el mayor interés pasaba por conocer los movimientos en el clasificador del segundo puesto hacia atrás, donde no había mucha diferencia. La etapa de canoaje pasó sin novedades para los líderes, quienes en el sector conocido como "Playa Palmieri" se encontraron con algunas embarcaciones de la categoría mixtos -el trayecto era más corto para ellos-, cuyos participantes ya estaban en la ruta 6 cumpliendo con los últimos 18 kilómetros de pedestrismo. Con un ritmo arrollador, el binomio Morales-Ojeda sobrepasó a Roberto Bustos-Graciela Rubio y Paredes-Irízar y comenzaba a palpitar el final. A todo esto, el público comenzaba a juntarse en Tucumán y Misiones, siguiendo el desenlace por radio, esperando a "Maxi" y a Nelson, los grandes protagonistas de la historia. Una vecina regaba la llegada, como dándoles la bendición por tanto esfuerzo. Merecido, tremendo. Al límite. La clasificación fue la siguiente: 1º) M. Morales-N. Ojeda, 3h 48m 25s; 2º) M. Paredes-Irízar, 3.51.50.; 3º) R. Bustos-G. Rubio, 3.56.01.; 4º) P. Sfeir-F. Helling, 4.02.21.; 5º) A. Valenzuela-M. Bustos, 4.12.51., y 6º) J. Robles-F. Fernández, 4.15.23. |
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