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Martes 27 de noviembre de 2001 | |
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Plantean opciones al aumento del boleto |
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El secretario de Gobierno neuquino, Oscar Massei, presentó un informe del que se desprende que la alternativa para frenar el aumento del pasaje de colectivos en la capital provincial es mantener el subsidio del municipio a Indalo. Los concejales deberán definir a partir del 31 de diciembre si varían las condiciones de la concesión del sistema público de transporte. |
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| NEUQUEN (AN).- El negocio del transporte de colectivos está en franca decadencia y condiciona las posibilidades de aumento del boleto. Así surge de un informe oficial de Neuquén, del que se desprende que la alternativa para frenar la suba de la tarifa es manteniendo el subsidio a Indalo. Sólo en el último año se redujo en más de 800.000 la cifra de pasajeros que dejaron de usar el colectivo como medio habitual. Como el subsidio por si mismo no sirve si al poco tiempo el sistema vuelve a caer por el tobogán, en la misma balanza se ponderan los ingresos y los costos así como la incidencia particular de variables como el canon, la licencia, la patente, los recorridos y el impacto que puede tener el acuerdo de competitividad si finalmente adhiere de Neuquén. El jefe de gabinete Oscar Massei entregó ayer personalmente copias del informe preliminar sobre la situación del transporte urbano a los integrantes de la comisión de Servicios Públicos del Concejo Deliberante. Antes se entrevistó con los concejales del Movimiento Popular Neuquino (MPN), a solas y por primera vez desde que ingresó al gobierno local. El documento, de 50 páginas, evalúa diferentes variables de porcentajes de suba del precio de la tarifa que se encuentra congelada desde hace dos años. La decisión política es mantenerla por otro período similar para no castigar a la población en momentos de una importante recesión económica. La fecha tope para resolver el camino es el 31 de diciembre, de acuerdo a la ordenanza que regula el servicio de colectivo en Neuquén capital. El jefe de gabinete concurrió a la sede legislativa acompañado por el director general de Transporte, Vicente Barrado. En la reunión no se habló del subsidio, sino se dio un pantallazo general del panorama que atraviesa el transporte. El frepasista David Lugones, presidente de la comisión, lo mismo que Massei, se mostró partidario en lo personal de buscar la forma de "no meter la mano al bolsillo de la gente". La meta es "no aumentar la tarifa y mantener el boleto estudiantil, que tiene el valor más bajo del país como derecho esencial a la educación de los chicos de primaria y secundaria". Del mismo modo se pronunció por mantener la franquicia a las personas discapacitadas. El boleto estudiantil en el resto del país equivale al 50% del precio del pasaje de segunda sección. Oscila entre 40 y 45 centavos contra los 13 y 19 centavos -primario y secundario- que cuesta en la capital. La caída de pasajeros es un fenómeno que se da en todo el territorio nacional y en latinoamérica, producto de la recesión y el desempleo creciente. En Argentina la baja promedio se sitúa en un 35%. En el conglomerado Buenos Aires pasó de 1.700 a 1.300 millones entre 1995 y 1999. En Rosario, Santa Fe, la cifra pasó de 210 a 100 mil pasajeros, lo que decidió a las autoridades a crear un fondo compensatorio para subsidiar al transporte. En Bahía Blanca, provincia de Buenos Aires, de nueve empresas dos están en quiebra. La convocatoria de acreedores y concursos de quiebra jaquea a las transportistas: de 130 empresas sólo quedan 80 en el país. En Neuquén, en los últimos años bajó un 5% la carga de pasajeros y los ingresos un 7% mientras que el boleto de segunda sección -el más usado- sufrió una baja de 1.240.000 pasajes. |
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