Miércoles 21 de noviembre de 2001
 

Parra no se quiere ir de la intendencia

 

Los ediles de la localidad recurrirán al Tribunal Superior de Justicia de Neuquén porque consideran que se está ante una "confrontación de poderes". Un presunto error de confección en la ordenanza que suspendió a Parra es el argumento del titular del Ejecutivo para no abandonar su puesto en el municipio.

  LONCOPUE (AZ).- El intendente de Loncopué, Raúl Parra, hizo caso omiso a la suspensión de 90 días que le aplicó el Concejo Deliberante y se mantiene al frente de la comuna.
Los ediles recurrirán hoy al Tribunal Superior de Justicia de Neuquén porque consideran que existe una "confrontación de poderes".
Lejos de amedrentarse por la expulsión temporaria que le aplicaron los concejales, Raúl Parra, se afirmó en su despacho y no tiene intenciones de abandonar la intendencia.
Al parecer, un presunto error en la confección de la ordenanza que determinó la suspensión sería el argumento legal que el intendente utilizaría para frenar la investigación. Según trascendió, el secretario del Concejo se habría equivocado en la fecha de la resolución 014/01 y esto originó el pedido de nulidad por parte de Parra.
"Vamos a ir al TSJ porque entendemos que estamos ante un evidente caso de confrontación de poderes", aseguró ayer la presidenta del Concejo Deliberante, Susana Llambí.
Mientras, se ventilaron detalles de las acusaciones de administración fraudulenta que se levantan contra Parra. Según consta en la ordenanza, el municipio recibió el año pasado 38.500 pesos en concepto de un aporte no reintegrable que debía ser destinado a distintas instituciones de la ciudad.
Sin embargo, los ediles destacaron que "el dinero llegó demasiado tarde a los beneficiarios, en algunos casos después de los 20 meses, en un hecho de retención indebida". Además subrayaron que muchas entidades recibieron servicios que luego fueron descontados de los montos que debían percibir originalmente.
También le critican al jefe comunal la situación planteada en torno a un convenio rubricado con Gendarmería Nacional por la cesión de instalaciones en la zona de Chenque Pehuén.
Allí, "pese a la toma del lugar y la realización de inversiones, el Concejo desconoce el plazo y las condiciones de cesión y el destino final de las mejoras construidas con fondos públicos".
Por otro lado, se cuestiona la cantidad de funcionarios políticos que el intendente Parra habría contratado.
En ese sentido se destaca que se enviaron numerosos pedidos de informes pero "no se recepcionó ninguna información en una evidente intención de ocultar datos".
Otro de los ejes de la suspensión se sustenta en los manejos de los fondos que los ediles consideraron "desprolijos".
En este sentido, destacaron que en numerosas oportunidades "se transfirieron montos de una cuenta a otra y viceversa sin razón alguna que lo justifique y en manifiesta violación a toda norma contable pública".
Al mismo tiempo calificaron de "dispendioso" el accionar de la administración municipal a partir de la abultada deuda que mantiene con proveedores y personal. El pasivo con los proveedores "asciende a 150.000 pesos y si le sumamos falta de pago de sueldos y descubiertos bancarios trepa a alrededor de los 500.000 pesos".
   
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