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Martes 20 de noviembre de 2001 | |
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El PJ no quiere avalar los Lecop y la Alianza no se decidió |
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La coalición definirá hoy sobre el acuerdo federal. Romero no quiere que se usen para pagar sueldos. |
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| NEUQUEN (AN).- El intento del gobierno de captar la voluntad de la oposición para aprobar las Letras de cancelación de obligaciones provinciales, Lecop, se estrelló ayer con dos murallas: la primera de los justicialistas capitaneados por Gabriel Tom Romero, que anticipó la negativa de su bloque a aprobar cualquier cláusula que habilitara a esos papeles como medio de pago de sueldos de empleados públicos. La segunda fue la indecisión en la bancada de la Alianza -que difundirá hoy su posición- donde se discutían la aprobación -y el alineamiento con el gobierno nacional- o el rechazo. El oficialismo simplificó la cuestión y dijo que "es la última oportunidad que tiene el país de reactivar la economía", con la inyección del equivalente al 13% de la masa monetaria sin tocar la convertibilidad. La falta de aprobación de la ley "nos pondría directamente en la vereda de enfrente y se le daría una pésima señal a la sociedad", dijo una alta fuente del ministerio de Hacienda. Para el gobierno, continuó el vocero, "hubiera sido mucho más fácil sumarse a la montonera federal cuando se estaba negociando y hacer fracasar el acuerdo" pero en cambio, se optó por "darle una mano al gobierno nacional cuando hace algo consistente". La jornada de ayer tuvo dos escenarios y prácticamente los mismos protagonistas: al mediodía, una reunión de diputados de todos los bloques -la segunda- con el ministro de Hacienda, Alfredo Pujante, sirvió para explicar los dos proyectos de ley enviados por el Ejecutivo: el primero para aprobar el compromiso firmado hace dos semanas y el segundo para autorizar la emisión de los Lecop, un proceso en el que intervendrán los bancos Nación -como fiduciario del fondo- y Provincia -agente financiero de Neuquén-. Pujante les explicó que la emisión será por 117 millones de pesos, una cifra que totaliza la deuda de Nación por coparticipación federal de impuestos y otros renglones que reclama la provincia. Contra esos bonos, la Nación otorgará un certificado de deuda que se cancelará ante el Fondo fiduciario. El diputado oficialista Oscar Cacho Gutiérrez explicó que no aceptar las Lecop equivale a permitir el recorte del 13% en la coparticipación "sin nada a cambio". En la provincia se distribuirán "todas las letras que no canjeen" Repsol YPF y Telefónica, entre otras empresas, y el resto "será socializado" entre los proveedores, municipios y empleados. Habrá dos tramos, el primero tal como explicó Pujante, y el segundo se recibirá mensualmente en un monto equivalente hasta el 40% de las remesas por coparticipación, que ronda los 20 millones de pesos mensuales. El gobierno neuquino las "cambiará, las negociará por fuera de los sueldos -con proveedores e intendentes- y el remanente será para pagar salarios". Funcionarán "si entran en el mercado y se utilizan como un bien de cambio", concluyó. Los justicialistas anticiparon, por boca de su jefe Gabriel Romero, que no aprobarán los bonos "si se usan para pagar sueldos", aunque Carlos Asaad opinó que aún no estaba todo dicho. En cambio, en la Alianza no se había definido ninguna postura "porque hay muchos diputados en el interior y los convocamos para mañana (por hoy)", dijo Raúl Radonich. Sin embargo, Ricardo Villar -vicepresidente segundo de la cámara-, dijo que estaba a favor de la aprobación de los acuerdos e indicó la necesidad de "distribuir en forma proporcional las letras entre los acreedores del Estado y los tres poderes". Entre las obligaciones, "se incluyen los sueldos", dijo. Mientras transcurría el plenario de comisiones que aprobó el despacho para reconvertir el EPEN, luego de la explicación del acuerdo logrado entre ATE y el gobierno, un grupo de sindicalistas recorrió los despachos para convencer a los diputados de no aprobar los proyectos tal cual los envió el gobierno. Horacio Fernández, de CTA, dijo que "no aceptaremos moneda sucia que en dos o tres meses hará que se quiebre la cadena de pagos". Amenaza de legislativos NEUQUEN (AN).- Como cuando el oficialismo de Felipe Sapag sancionó el ajuste salarial a finales de agosto de 1997, los empleados legislativos advirtieron que paralizarán las actividades de la cámara si no se incluye expresamente una cláusula que indique que las Lecop no serán utilizadas para pagar sueldos. Según el jefe de ANEL, Héctor Stagnaro, el paro alcanzará al sector de encargados de audio en el recinto, taquígrafos y el resto de los trabajadores de apoyo a la sesión. |
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