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BUENOS AIRES (ABA) - La elección de la vicepresidencia segunda del Senado Nacional, recayó ayer en Pedro Salvatori del MPN. Con amplia sonrisa, Salvatori subió al estrado a prestar juramento al nuevo cargo.
El rol que asumirá dentro de menos de dos semanas, era una meta perseguida con ansias por el ex gobernador de Neuquén. Significa tener el rango más importante dentro del "interbloque", es decir del agrupamiento integrado por los partidos federales excluyendo a la Alianza y al PJ.
Además, fortalece la idea de que dicho conglomerado de centroderecha -como tercera fuerza del país-, pueda ser liderado por el titular de su partido y gobernador de la provincia, Jorge Sobisch.
En la práctica, Salvatori ocupará la cuarta posición en jerarquía detrás del presidente del cuerpo Ramón Puerta, del cordobés del PJ Juan Carlos Maqueda (vicepresidente), y de quien designe el partido de gobierno para la vicepresidencia primera.
El presidente conduce las sesiones y desempata en caso de igualdad de votos, y esa posición (en caso de ausencia) es ocupada por quienes le continúan en jerarquía.
"Es un legítimo derecho"
El Gobierno nacional reconoció anoche como "un legítimo derecho" que el Senado haya elegido titular al peronista Ramón Puerta, aunque no consideró a esa designación como una derrota política.
Luego de asegurar que la relación futura entre el oficialismo y la oposición será "normal" con la Cámara alta presidida por un peronista, el jefe de Gabinete, Chrystian Colombo, no descartó que el presidente De la Rúa reciba a Puerta "en los próximos días".
"Vamos a seguir teniendo la relación normal que hemos tenido con el Parlamento y esperemos que realmente el ofrecimiento de cooperación por parte de las autoridades del PJ se verifique en la sanción de las leyes que necesita el país", pidió el jefe de Gabinete.
Horas antes, el presidente Fernando de la Rúa había afirmado que de acuerdo a la tradición parlamentaria, "lo correcto sería" que la Presidencia Provisional del Senado sea ocupada por un dirigente del "mismo signo" político que el oficialismo, aunque se distanció de la postura adoptada por el titular de la UCR, el gobernador Angel Rozas, quien calificó de "golpe institucional" la movida del PJ de querer imponer a Ramón Puerta como titular de ese cuerpo legislativo.
"No hay que calificar de esa manera", dijo De la Rúa, respecto de los dichos de Rozas, en un intento por quitarle dramatismo a la cuestión.
La UCR, con Rozas a la cabeza acusó al PJ de "arrebatar" ese cargo al oficialismo, tener "avidez por el poder" expresada en "grado patológico" y provocar un "grave golpe institucional".
Rápido de reflejos, el Consejo Nacional Justicialista contestó más tarde que "el verdadero golpe institucional se produjo cuando huyó del gobierno el entonces vicepresidente, Carlos Alvarez, sembrando sospechas sobre la figura del actual presidente".
En respuesta a las acusaciones de "golpe institucional" el PJ respondió que "la única solución propuesta por este gobierno fue el ajuste sobre ajuste, para desencanto de todos los argentinos que querían escuchar un mensaje de futuro y esperanza y sólo oyeron el desánimo y el cinismo del que propuso "dejen de ahorrar y consuman"", destacó un documento. (DYN)
Tironeo por los despachos
Buenos Aires (ABA).- Detrás de la denuncia de la senadora electa por Río Negro, Amanda Isidori, contra parte del bloque Justicialista, al que acusó de promover un "golpe institucional", se esconde un hecho anecdótico y conflictivo que se registra en cada renovación parlamentaria: la lucha por los despachos.
Miguel Pichetto (PJ) acordó con Horacio Massaccesi para que el senador saliente (expulsado de la UCR por inconducta partidaria) le cediera sus oficinas, en tanto que Edgardo Gagliardi entregó las suyas a Luis Falcó.
Ante esta circunstancia, Isidori convino amablemente con Remo Costanzo, del PJ y de hecho ocupó provisoriamente parte de sus dependencias desde el 1 de noviembre. Sin embargo, días más tarde, otros funcionarios peronistas comenzaron a hostilizarla, escudándose en directivas del sanjuanino José Luis Gioja, titular de la bancada peronista, e Isidori se quedó deambulando sin ningún escritorio.
Ayer, la legisladora se quejó por "el desplazamiento y golpe institucional del que son objeto la UCR y los partidos con menor representatividad por parte del PJ, que pretende ocupar la presidencia provisional, las comisiones parlamentarias y el manejo político y administrativo del Senado". Lamentó al mismo tiempo iniciar su actividad en el Congreso "siendo objeto de conductas lesivas a los principios constitucionales, el diálogo, la convivencia democrática y la honorabilidad que merece este cuerpo". |