Jueves 29 de noviembre de 2001

 

Una rebelión de talibanes que terminó en una masacre

 

Habría más de 600 muertos en la prisión de Mazar i Sharif. EE. UU. admitió que un agente de la CIA murió en la revuelta.

  Decenas y decenas de cuerpos humanos desmembrados, esqueletos de caballos despanzurrados y escombros aún humeantes fueron hallados ayer por los periodistas y el enviado de la Cruz Roja que entraron en la fortaleza de Qala-I-Jangi, donde el domingo se rebelaron cientos de prisioneros talibán no afganos.
La insurrección terminó en una masacre sobre la cual ayer Amnesty Internacional ordenó la apertura de una investigación.
La represión dejó un saldo de 600 muertos, según la emisora británica BBC. La mayoría de las víctimas eran prisioneros, aunque un portavoz de la coalición antiterrorista liderada por Washington negó que la Alianza del Norte haya aplicado una violencia desproporcionada en los combates.
Un corresponsal de la BBC que entró ayer por primera vez en la fortaleza en el norte de Afganistán dijo haber visto en el lugar centenares de cadáveres en medio de un escenario de "destrucción total".
Amnistía Internacional, exigió una investigación de lo sucedido en la fortaleza de Qila-i-Jhangi, a las afueras de Mazar-i-Sharif. La organización humanitaria dijo que es necesario verificar lo antes posible si la Alianza del Norte y Estados Unidos actuaron con una dureza desproporcionada.
Tropas de la Alianza del Norte, apoyadas por unidades de élite británicas y estadounidenses, reprimieron la revuelta, que duraba ya tres días, con tanques, granadas y un masivo apoyo aéreo norteamericano, confirmó el portavoz de la coalición antiterrorista liderada por Washington, Kenton Keith.
La revuelta habría comenzado por la imprudencia de dos agentes de la CIA, cuenta el enviado de The Times, Oliver August, en un artículo llamado "Un error de la CIA encendió la revuelta talibán que se convirtió en un suicidio masivo".

"Estamos aquí para matarte"

Según esta reconstrucción todo habría comenzado el domingo por a mañana, cuando dos agentes de la CIA -identificados como Michael y David- fueron superados mientras, solos, interrogaban a algunos prisioneros.
Michael le preguntó a un talibán por qué había ido a Afganistán, y éste le respondió: "Estamos aquí para matarte". Luego le saltó encima.
Con su pistola, el agente de la CIA consiguió matarlo, junto a otros tres talibán. Pero finalmente él también fue derribado y muerto a patadas y golpes.
También David mató a un prisionero antes de huir. Luego contó: "No había manera de detenerlos. Venían directamente contra nuestras pistolas".
David llamó de inmediato con el teléfono satelital a la embajada norteamericana en Uzbekistán. "Creo que Michael fue asesinado. Perdimos el control de la situación. Envíen helicópteros y tropas", dijo.
Mientras tanto, los prisioneros doblegaron y mataron a los 20 guardias de la Alianza del Norte que estaban en el edificio de los interrogatorios, les quitaron las armas y asaltaron el arsenal.

"No hubo prisioneros"

La revuelta había comenzado, y terminó -escribe The Times- "con una masacre de extranjeros realizada por afganos y dirigida por británicos y norteamericanos".
"Se considera -sigue el relato del diario- que los insurgentes estaban encabezados por Tahir Uldosh, un comandante del movimiento revolucionario islámico uzbeko. Pero en realidad no había necesidad de un líder, porque los objetivos y las órdenes de los talibán no podían ser más simples: mata hasta que te maten".
Después de tres días de cruentos combates y masivos bombardeos norteamericanos, las últimas resistencias terminaron el martes en torno a mediodía.
Una columna de la Alianza del Norte retomó también el control de la parte oriental de la fortaleza.
"No tomaron prisioneros, ni corrieron riesgos. Un soldado disparó una granada contra un talibán muerto. Un combatiente talibán, probablemente un checheno, aún respiraba. Los soldados de la Alianza lo terminaron a pedradas", contó el periodista.

Omar se salvó y Ben Laden sigue oculto

Londres (Télam-SNI).- El jefe supremo de los talibanes, el "mullah" Mohamed Omar, eludió una vez más los ataques del ejército estadounidense y escapó sano y salvo a los feroces bombardeos contra un cuartel de la milicia en su bastión sureño de Kandahar, según un portavoz integrista.
El cuartel, que había servido de base a los talibanes y a los miembros de Al Qaeda -la organización terrorista que lidera Osama Ben Laden-, quedó reducido a escombros en una lluvia de bombas lanzadas por EEUU.
Pero según declaró el antiguo embajador talibán en Pakistán, Abdul Salam Zaeef, ni el "mullah" Omar ni ningún otro alto cargo de la milicia se encontraban en el complejo de edificios al sureste de Kandahar cuando fue atacado
Ayer se informó que Ben Laden estaría escondido con centenares de seguidores en una base subterránea en Tora Bora, este de Afganistán, cerca de la ciudad de Jalalabad, afirmó hoy el diario Daily Telegraph.
El diario británico obtuvo su información de un periodista afgano que a su vez las recogió de los habitantes de una aldea próxima al refugio y particularmente de una persona que proveía de comida a los hombres de Ben Laden.
"Ji al jeque Ben Laden" dijo el testigo quien agregó que " Tora Bora albergaría "la mayor cantidad de combatientes extranjeros de todo Afganistán".

Bush y Aznar acordaron mecanismos de lucha antiterrorista

Washington (Télam-SNI).- El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, y el jefe de gobierno español, José María Aznar, sellaron hoy un acuerdo de cooperación conjunta contra el terrorismo, tras la polémica por la posible extradición de presuntos terroristas de Al Qaeda detenidos en España.
"Estados Unidos ayudará a España a combatir el terrorismo de cualquier forma que sea posible", dijo Bush a Aznar en una conferencia de prensa conjunta tras la reunión celebrada en el salón Oval de la Casa Blanca.
Por su parte, Aznar recalcó que "la cooperación política de España con Estados Unidos es completa en la lucha contra el terrorismo, y también lo es la cooperación de Estados Unidos con España en la lucha contra el terrorismo que padecemos".
El jefe del gobierno español se refirió implícitamente al grupo separatista vasco ETA, al que consideró en reiteradas oportunidades como terrorista.
En tanto, Bush agradeció la colaboración española tras los atentados del 11 de septiembre, con la detención de 14 sospechosos, la entrega de información policial y el ofrecimiento de ayuda militar y humanitaria. "España ofreció una increíble ayuda", señaló Bush y aseguró que Aznar "es un presidente que ha respondido", en referencia a la petición que Washington hizo a todo el mundo para combatir el terrorismo internacional.
El presidente estadounidense, quien llamó a Aznar por su nombre de pila y lo definió como "mi amigo personal", dijo que cuando hablaron por teléfono tras los atentados "me aseguró de que cooperaría de cualquier forma posible para luchar contra el terrorismo, y cumplió su palabra". Por su parte, Aznar destacó que "España mantendrá, y si es necesario reforzará, sus compromisos políticos, de cooperación e inteligencia, de seguridad e información; y, si es necesario, de cooperación de fuerzas militares".

Evitan hablar de extradición

Sin embargo, la reunión estuvo precedida por la polémica que generó el hecho de que España no puede extraditar a Estados Unidos un grupo de presuntos terroristas de la red terrorista Al Qaeda detenidos a no ser que Washington renuncie a pedir la pena de muerte y a juzgarlos en un tribunal militar especial.
Bush evitó hablar sobre el asunto, en tanto que Aznar recordó que Estados Unidos "no solicitó la extradición de ningún miembro de la organización Al Qaeda detenido en España". "Cuando Estados Unidos la solicite, si es que solicita su extradición, nosotros naturalmente la estudiaremos y decidiremos al respecto", indicó el presidente del gobierno español.

Temor de los civiles

Con un cuerpo de tropas de asalto estadounidenses en el ingreso de Kandahar, la ciudad afgana vive la angustia de la población civil "Somos víctimas inocentes en la línea de combate; seremos sacrificados", afirma un comerciante . "Cuando ingresen, los norteamericanos no sabrán a quien atacar. ¿Cómo podrán ver las diferencias entre nosotros y un talibán?", se pregunta . Informes hablan de miles de civiles huyendo de la zona como pueden

Principio de acuerdo entre afganos

BONN (Reuters) - La Alianza del Norte, que controla casi todo el territorio de Afganistán, acordó en principio un mecanismo que permitirá compartir el poder con la monarquía afgana, informaron ayer funcionarios de ambas partes.
El acuerdo, que sería el primer paso concreto hacia un pacto para la formación de un gobierno de base amplia en Afganistán, fue dado a conocer en las conversaciones auspiciadas por la ONU en la ciudad alemana de Bonn.
Horas antes, funcionarios de las Naciones Unidas habían expresado pocas esperanzas de un rápido avance en las conversaciones, que se desarrollan varios grupos afganos desde el martes en la ciudad alemana.
Esto, porque también se produjeron discrepancias. Por ejemplo, La Alianza del Norte desestimó la necesidad del despliegue de una fuerza internacional en Afganistán, si bien sostuvo que lo aceptaría en la medida en que formara parte de un "paquete global de paz".
"No creemos que haya necesidad de una presencia en Afganistán de tropas extranjeras porque la seguridad del país está garantizada", sostuvo hoy Yunis Qanuni, máximo representante de la Alianza del Norte en la conferencia afgana de Bonn.
Qanuni, quien revista además como ministro de Interior de la Alianza del Norte y jefe de Seguridad de Kabul, aceptó sin embargo que el despliegue "podría formar parte de un paquete global de paz".
La Alianza del Norte está sosteniendo intensas conversaciones con representantes del ex rey afgano Zahir Shah y de dos grupos de exiliados con el objetivo de acordar una estructura de poder para un gobierno post-Talibán en el empobrecido país musulmán.
"Ellos acordaron establecer un consejo temporal de gobierno, pero el mecanismo para su creación será discutido mañana (jueves)", dijo a el asistente principal del jefe de la delegación de la Alianza del Norte, Yunis Qanuni.
"Lo que será discutido es cuántas personas integrarán el consejo", explicó Qanuni, quien es ministro del Interior de la Alianza del Norte.
El enviado de la ONU a Afganistán, Francesc Vendrell, durante el segundo día de conversaciones, dijo que "los participantes están debatiendo el futuro de Afganistán por primera vez en 28 años y por lo tanto uno no puede esperar que todo se resuelva en cuatro o cinco días", expresó.
La ONU anticipa que los delegados afganos acordarán para el fin de semana un plan que permitirá dar paso a la democracia en Afganistán, comenzando con un pequeño consejo ejecutivo, seguido de una legislatura en la próxima primavera (boreal) y elecciones libres en unos tres años.

Foto: Un grupo de marines norteamericanos junto a combatientes pashtunes cavan refugios nocturnos en las arenas cercanas al aeropuerto de Kandahar.

     
     
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