Jueves 22 de noviembre de 2001

 

El plantel llegó cansado y con atraso, pero optimista

 

Los jugadores salieron a caminar para estirar un poco las piernas.

  BUENOS AIRES (DyN) - Luego de 36 extenuantes horas de viaje, el plantel de Boca Juniors llegó ayer a la madrugada a Tokio, Japón, donde ya comenzó a prepararse para la final Intercontinental del próximo martes ante el poderoso Bayern Munich de Alemania.
La delegación del bicampeón de América está hospedada en el Hotel Intercontinental, cercano al estadio Nacional de Tokio y lejos del Keio Plaza, el hotel donde se alojaron el año pasado, cuando le ganaron al Real Madrid.
Al llegar a Tokio, el entrenador Carlos Bianchi ordenó que los jugadores salieran a caminar unos tres kilómetros para distenderse un poco y evitar que los músculos se entumezcan tras el agotador derrotero.
En su arribo, Bianchi mantuvo contacto con la prensa y no dudó en comentar que Boca llega con "la misma intención" que el año pasado, cuando alzó la Copa tras vencer a Real Madrid.
"La intención es la misma, ganar la Copa, pero cualquiera que sea el resultado no quiero que se desdibuje nada de lo que hizo este plantel", afirmó Bianchi.
Los entrenamientos formales comenzarán a partir de hoy y Bianchi empezará a darle forma a la formación que el martes a las 7 enfrentará al conjunto alemán.
La delegación salió del aeropuerto internacional de Ezeiza el lunes a las 18.00 y la primera escala fue en San Pablo, Brasil, donde sufrieron una demora de seis horas que hizo que perdieran el vuelo que tenían programado en Frankfurt, Alemania.
Sin embargo, los dirigentes realizaron rápidas gestiones que les permitió conseguir un nuevo vuelo, el que finalmente los depositó en Japón.
En declaraciones periodísticas, el delantero Guillermo Barros Schelotto comentó que la demora en Brasil se debió a un problema técnico y dijo que en el aeropuerto de Frankfurt debieron soportar una minuciosa revisión de los equipajes y pertenencias.
"Ese día se había recibido una amenaza de bomba y se extremaron las medidas de seguridad", explicó el mellizo sobre los controles en Alemania.
Por otra parte, Barros Schelotto indicó que están "tratando de aguantar hasta tarde para cambiar el sueño rápido y habituarnos a los horarios de Japón".
Sobre la final ante el Bayern Munich, expresó su deseo de que Boca "demuestre, como el año pasado, estar a la altura de la expectativa de la gente para poder volver a Buenos Aires con la copa".

Bianchi reclama

Carlos Bianchi reclamó ayer la entrega de las medallas ganadas en la edición 2000 de la Copa Intercontinental, cuando los "xeneizes" vencieron a Real Madrid.
Boca llegó ayer a Tokio para disputar, el martes, el partido ante Bayern Munich, y en su primer contacto con la prensa Bianchi aprovechó para reclamar las medallas.
"Si vamos a estar una semanita acá tal vez puedan tener el tiempo de entregarnos la medalla del año pasado", comentó irónicamente el DT.

"Fueron un desastre"

Ramón Díaz afirmó que el desempeño de Boca en el segundo semestre del año "fue desastroso" y agregó que el clásico rival "hizo lo más fácil" cuando sólo le dedicó atención a la final Intercontinetal del próximo martes en Tokio.
"Fue una decisión de ellos tirarse a la Copa..., la Mercosur. Después que les haya ido mal es otra cosa. Boca hizo un campeonato desastroso, una Mercosur desastrosa y pensar en un solo partido era lo más fácil", expresó Díaz.

   
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