El tiempo mejora, pero hay miles de evacuados

Las inundaciones, que son consecuencia de una inusual temporada de lluvias en la región centro del país, mantienen en jaque a pobladores urbanos y rurales. Un productor se suicidó.

Mientras el clima comenzaba a mejorar lentamente en las zonas inundadas y el gobierno nacional anunció que enviará ayuda económica a los municipios afectados, miles de personas continuaban evacuadas en Buenos Aires, aunque en La Pampa algunos habitantes de los pueblos anegados comenzaron a regresar a sus casas.
En tanto, el suicidio de un productor del partido bonaerense de Carlos Tejedor, quebrado económicamente por las inundaciones, generó un enorme malestar entre los pobladores de la región, que se movilizarán mañana en señal de duelo y para reclamar ayuda.
Por su parte, el presidente Fernando de la Rúa, quien ayer recibió a intendentes de localidades bonaerenses inundadas, sostuvo ayer que "he habilitado recursos para anticipar fondos del tesoro nacional, y hablé con el secretario de Hacienda (Jorge Baldrich) para que prevea en el presupuesto fondos para atender este tipo de emergencias".
Asimismo, indicó, instruyó al ministro de Desarrollo Social, Daniel Sartor, que "vaya a los lugares donde haya problemas".
En tanto, la situación más grave continuaba siendo la de Buenos Aires, donde hasta ayer había más de 6.100 personas evacuadas o autoevacuadas.En La Pampa, el mejoramiento de las condiciones meteorológicas había permitido que decenas de personas de los pueblos más afectados del noreste, como Monte Nievas y Colonia Barón, pudieran retornar a sus hogares.
De todas formas, las comunicaciones terrestres continuaban siendo muy complicadas debido a la inundación y destrucción de numerosos sectores de rutas.
En tanto, el Servicio Meteorológico Nacional preveía un lento mejoramiento de las condiciones climáticas, lo que permitiría iniciar lentamente el regreso de los inundados a sus casas y la recuperación de algunos caminos.
El director de Defensa Civil bonaerense, Jorge Svendsen, señaló que en esa provincia "las localidades más afectadas son las del bajo Salado, como Monte, General Belgrano y Chascomús", donde las defensas ya estaban al borde de colapsar.
Asimismo, destacó que "se están enviando raciones de comida preparadas, leche, agua potable y chapas de cartón para los damnificados", remarcó.
Por otra parte, el suicidio del productor agropecuario Gustavo Tondo, de 42 años, generó un enorme malestar entre los afectados por las inundaciones en la región, ya que el hombre habría tomado esa decisión a raíz de la depresión que le produjo haber perdido toda posibilidad de utilizar sus campos, que se encuentran totalmente inundados.
En tanto, en Santa Fe permanecían evacuadas cien personas en Rosario, a raíz de la crecida del arroyo Ibarlucea, generada por la gran cantidad de agua caída el pasado fin de semana.
Estas lluvias habían provocado también el agravamiento de la situación de los pueblos del extremo sur santafesino, anegados por el desborde de la laguna La Picasa, que no cesa de crecer desde hace dos años.

Foto: La provincia de Buenos Aires sigue siendo la más afectada por las inundaciones: mantiene más de 6.000 evacuados.