El "banco para pobres" sondea ideas en Río Negro

Directivos de Grameen tuvieron contactos con organizaciones. Los proyectos aprobados recién comenzarían en marzo.

VIEDMA (AV).- El "banco para pobres" inició un sondeo exploratorio entre distintas organizaciones de Río Negro para fomentar microcréditos que permitan a personas de escasos recursos ganarse el sustento diario dignamente. El nuevo desembarco de directivos de la fundación Grameen tuvo por objeto consolidar lazos con la Asociación Génesis de Viedma, que previamente expresó su intención de reinsertar laboralmente a familias de los humildes barrios Lavalle y Mi Bandera.
También en la misma categoría de contactos se encuentran la fundación Paideia de General Roca y la organización Colmegna de Cipolletti que inicialmente tiene previsto trabajar en un barrio de la ciudad de Neuquén.
Como primera medida, los enviados Norberto Kleimann y Gabriela Bukstein iniciaron una evaluación previa de la organización local en cuanto a si reúnen las condiciones para llevar adelante un emprendimiento de esta naturaleza, tomar la metodología, y de confirmarse con el apoyo y supervisión de la fundación podrán empezar. Antes habrá capacitación para todos.
Los enviados recorrieron las calles de esas humildes barriadas, donde las carencias están al orden del día, y tomaron contacto con referentes urbanos .
La presentación estuvo a cargo de Norberto Kleimann y Gabriela Bukstein por parte de la fundación, y Noemí Richmond de la entidad local que ya contribuyó con otros emprendimientos solidarios, como la formación del hogar Zatti, destinado a atender indigentes.
Los dos primeros aclararon que "antes de aprobar los proyectos que funcionarán bajo la responsabilidad de entidades locales, nosotros queremos ver cómo se logra la organización porque resulta fundamental no generar falsas expectativas, esto lleva tiempo, y probablemente no comience a funcionar hasta marzo del año próximo".
Richmond expresó que la intención es crear varios proyectos distintos pero rehusó dar mayores precisiones porque "estamos en los comienzos, aún no tenemos un perfil productivo, y no queremos profundizar mucho hasta que no tengamos todo supervisado y charladas la posibilidades con las personas".
No obstante existe optimismo en la organización. La representante precisó que la pretensión inicial es comenzar con tres grupos de cinco personas y durante el primer año perdura la expectativa de llegar a 10 grupos y completar con 40 durante el segundo período.
En cuanto a si el "clientelismo político" puede hacer naufragar las expectativas en la gente, advirtieron que "quienes llegan a Grameen es por propia voluntad y necesidad, no forzamos situaciones ni necesitamos convencer a nadie".

La idea que nació en India ya se aplica en 60 países

El "banco para pobres" o Programa Grameen nació en la India en 1974 por iniciativa de Muhamad Yunus, y ya se aplica en 60 países cubriendo más de tres millones de familias. En la Argentina varias provincias lo pusieron en marcha desde hace un año.
El programa está orientado a la asistencia financiera para emprendimientos laborales y productivos, y destinado a personas de muy bajos recursos y escasa capacidad de endeudamiento. En Argentina la representación está a cargo de la fundación Grameen que efectuó el primer lanzamiento en Río Negro.
Grameen (aldeas) facilita el acceso al programa a través de un sistema autosustentable de microcréditos sin garantías (fondos reintegrables que no sean un subsidio) destinados a interesados en progresar mediante el esfuerzo propio. Su instrumentación requiere de la participación exclusiva de organizaciones no gubernamentales y "personas interesadas y dispuestas a comprometerse con una experiencia local".
El banco promueve créditos mediante la generación de fondos locales y luego se puede integrar una red para conseguir créditos "blandos" en entidades financieras internacionales.
El sistema prevé préstamos a personas que integren un grupo de hasta cinco integrantes. Cuanto más bajo sea el monto a distribuir, mayor ayuda se le brindará a los aspirantes.
El ejemplo más concreto es de 200 pesos como para adquirir materiales para una actividad, y que debe devolverse en cuotas muy bajas. El método ideal serían 50 cuotas con un monto semanal de 4,80 pesos y un monto final de 240 pesos, ya que se recargaría un 20% para solventar costos operativos de las organizaciones que deberán sostener al promotor que deja su tiempo para asistir a beneficiarios. (AV)

Foto: Norberto Kleimann y Gabriela Bukstein iniciaron una evaluación previa de Asociación Génesis de Viedma para ver si reúnen las condiciones .