Miércoles 10 de octubre de 2001

 

Habrá más flúor en el agua para evitar las caries

 

Se firmó un convenio en Roca para elevar la dosis de 0,2 a 1 mg./litro. Un estudio reveló que el 80% de los chicos tiene este problema.

  ROCA (AR).- Salvo los que habitan la Línea Sur, el 80 % de chicos rionegrinos tienen caries. La alarmante estadística surge de un estudio realizado por el Círculo de Odontólogos de Roca en esta ciudad y se cree que en las zonas atlántica y cordillerana las cifras son similares. Y como una de las alternativas para combatir las patologías bucales es incrementar el flúor en el agua potable, ayer se firmó un convenio para llevar la dosis de 0,2 a 1 miligramo por litro.
A pesar de que Río Negro es una de las provincias del país con mayor porcentaje de población con el servicio de agua potable, los caudales que abastecen casi la totalidad de las redes provienen de los deshielos y no contienen el nivel de flúor recomendado por la Organización Mundial de la Salud, estimado en 1 miligramo por litro. Esta característica, sumada a los efectos ocasionados a partir de la ingesta de dulces y otros alimentos perjudiciales, hace que chicos rionegrinos padezcan hoy enfermedades bucales.
Ante las elevadas cifras, los odontólogos propusieron al gobierno rionegrino, a través de Arsa, incrementar el flúor en el agua potable de Viedma, Roca, Cipolletti y Bariloche. En la capital provincial, la composición del líquido ya fue variada, mientras que ayer se firmó en Roca el primero de los restantes convenios.
"El objetivo es reducir al 50% las caries en cinco años. Es un proyecto de larga duración, incluye diferentes etapas y se diagramó luego de un relevamiento que determinó que el 80 % de la población sufre algún tipo de enfermedad bucal", comentó el presidente del Círculo de Odontólogos, Roberto Bernal. El profesional detalló que la actividad de prevención comenzó este año con el programa Sonríe Argentina II, donde participaron docentes y alumnos de escuelas estatales y privadas.
"Consideramos que hacía falta más y por eso le pedimos a la provincia el convenio para aumentar el flúor al agua potable en las ciudades del Alto Valle y las zonas atlántica y cordillerana. Además elevamos en Roca un proyecto que ya fue declarado de interés municipal para el tratamiento de las patologías bucales en los barrios carenciados, que estaría en marcha el año próximo", agregó.
La ingesta del flúor por el agua hace que se absorba y por vía sanguínea llegue a la pieza dentaria. Esto hace que se fortalezcan los cristales del esmalte y haya un posterior "endurecimiento", evitando que la acción ácida de la placa bacteriana afecte la pieza dentaria. Cabe destacar que el aumento en la dosis no varía las propiedades incoloras, inodoras e insípidas del líquido.
El primer convenio del Alto Valle se firmó ayer en la planta potabilizadora que Arsa posee en Stefenelli, con la presencia del titular de la firma, Fernando Erica, el intendente Ricardo Sarandría, el secretario de Salud provincial, Claudio Di Tella y el representante de los odontólogos.
En el acto se destacaron las diferencias entre el nivel de flúor en el agua potable de la Línea Sur y el resto de la provincia.
"Nuestra provincia tiene dos zonas definidas, porque en la Línea Sur hay un exceso de flúor y lo tenemos que sacar a través de plantas de desalinización por ósmosis inversa, haciendo un agua mineralizada artificialmente que se entrega a la población gratuitamente", explicó Erica.
En tanto, Bernal agregó que en localidades como Sierra Colorada y Maquinchao las patologías bucales casi no existen, pero por el flúor excesivo se producen las conocidas manchas en los dientes.
   
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