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Domingo 7 de octubre de 2001 | |
Padres que les roban porros a sus hijos |
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| No son pocos los docentes que escuchan a sus alumnos protestar porque sus padres "tienen esa maldita costumbre de afanarme los porros". "Es decir que además avalan el consumo", aclara indignada una profesora del secundario sobre las patéticas conversaciones que denotan la ausencia de valores y contención familiar. La mayoría de los maestros y profesores dan muchas vueltas antes de hablar con los padres de los chicos consumidores. Tienen miedo, dudas. "Porque los padres se ofenden siempre, primero. "Mi hijo no", dicen todos. Hasta que el problema revienta y no queda otra que reconocer lo evidente", dice una ex rectora de secundaria. "Claro: es duro hacerse cargo de semejante problema", agrega. "Pero uno le empieza a dar nombres de amigos, bandas, los síntomas que uno ve en clase....En fin...la escuela detecta, pero la solución terapéutica la tiene que buscar la familia, no queda otra", sostiene. "Cuando te alertan y uno abre los ojos, enseguida ves los síntomas del consumo", coinciden todos los docentes al referirse a la detección de alumnos drogados. Y detallan: "están desganados, en otro mundo, como dormidos, se caen de la silla. Tienen bajas calificaciones, en general. Suelen tener ataques de agresividad terribles". |
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