Domingo 7 de octubre de 2001

 

Junta estampillas por una silla de ruedas

 

Stella Capristo tiene un solo objetivo: ayudar a Beatriz Bogari.

  NEUQUEN (AN).- Stella Capristo tiene poco pero da todo. Busca y pide para ayudar a otros. Y como estos tiempos no son como para andar pidiendo demasiado, ahora junta estampillas fiscales de los atados de cigarrillos para conseguir una silla de ruedas para Beatriz Bogari, una joven cipoleña que lucha por despertar luego de un accidente que la dejó cuadripléjica. De a poco la chica está volviendo, pero necesita ayuda, mucha ayuda.
Stella es conocida de la familia de Bogari y desde Neuquén busca darle una mano. Necesita mil estampillas para conseguir que la Liga Argentina de Lucha Contra el Cáncer (LALCEC) le done una silla de ruedas que sea más acorde con el estado que presenta Beatriz actualmente.
"Tiene una silla que es para discapacitados totales, pero ella puede mover la cabeza y un poquito los brazos, es decir una silla que ayude a que se empiece a mover, porque la que tiene de alguna manera le "facilita" todo", explica Stella Maris.
La mujer, los sábados y domingos trabaja atendiendo un locutorio y en la semana lo hace como empleada doméstica. Es madre por dos veces, "mis nenas tienen casi 18 y casi 12" , explica Stella Maris, que sabe de padeceres: Su marido trabaja en cerámica Zanon, una firma que desde hace tiempo anda a los tumbos y con serios problemas para pagar los sueldos.
"Ellos me ayudan y me dan apoyo, ellos entienden que hay mucha gente que necesita más que uno. Por más que me digan que en estos tiempos no se puede pedir porque la gente está cansada, yo creo que hay mucha gente buena y bien dispuesta a colaborar", destaca la mujer, de 37 años años, que hace 20 llegó a la región proveniente de Tandil.
"La familia de Beatriz está sin plata para la medicación y sin plata para alquiler: apenas tienen para comer. Todo el tratamiento que hizo en Cuba se está viniendo abajo, las manos y los pies se le van endureciendo", describe Stella Maris.
La mujer, que vive en el barrio Río Grande II, no siente vergüenza de pedir "el no ya lo tenés, sabiendo eso no hay problemas", explica.
Si bien es consciente de que será difícil llegar a los 40.000 pesos que hacen falta para que Beatriz necesita para terminar el tratamiento en Cuba, Stella Maris confía en llegar a los 160 pesos que se requieren para comprar un andador-caminador.
El teléfono de Stella es el 4489888, y los de la familia Bogari 155-831905 (Angela) y 155-831905 (Leonardo)
"Siempre he recibido mucha ayuda de la Universidad pero ahora ellos están con sus problemas, lo mismo que la gente de la cerámica (que está de paro desde el martes)...qué le vamos a hacer, hay mucha gente que necesita pero también mucha con ganas de ayudar en serio", cerró la mujer que prefiere que la identifiquen como consciente y no como solidaria.
   
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