Políticos preocupados por el voto en blanco
Sobisch, Massei y Villar rechazan la metodología. ¿Sirve para distribuir fondos a los partidos?
En Neuquén, al igual que en el resto del país, se ha instalado un debate sobre el voto en blanco y aquí, en la capital, dos grupos de ciudadanos se reúnen y hacen campaña para convencer a otros a depositar un sobre vacío en las urnas el próximo 14 de octubre.
El gobernador Sobisch habló ayer brevemente de las elecciones. Dijo que no hacía proyecciones sobre los resultados, pero destacó que en la Argentina "hay muchos sectores interesados en que se vote poco". Expresó que "esa es la libertad" y cada uno "tiene derecho a expresarse en un país democrático como el nuestro".
Massei, en una de sus publicidades emitidas por radio, convoca a votar por algún candidato, mientras que Villar, candidato a diputado nacional de la Alianza dijo, en un documento que lleva su firma, que los que promocionan el voto en blanco "debilitan la democracia tanto como aquellos malos dirigentes o funcionarios que ellos dicen combatir".
El Estado paga a los partidos políticos un peso por cada voto obtenido en la última elección. Es la forma reconocida de financiamiento de las fuerzas políticas.
Pero a partir del voto en blanco se ha disparado otro debate con una pregunta que tiene respuesta incierta: ¿Los partidos reciben dinero proporcionalmente por los votos blancos emitidos?
Alejandro Tullio, director nacional electoral, un organismo que depende del ministerio del Interior de la Nación, dijo a "Río Negro" que el voto en blanco no se computa para la distribución de los fondos partidarios. Sin embargo, la subsecretaria de Interior, una dependencia de la misma cartera, Cristina Ascueta, dijo, en declaraciones que fueron publicadas por el diario "La Nación" el domingo último, que el voto en blanco sí se toma en cuenta para distribuir los fondos y explicó que los mismos se distribuyen proporcionalmente a los votos obtenidos por cada fuerza política.
El fondo partidario permanente está regulado por el decreto 2089/92. El artículo cuarto de esta norma dice que los fondos se distribuirán a partir de la suma de los votos válidos emitidos. El voto en blanco es un voto válido emitido.
Pero ocurre que ese mismo decreto, en los considerandos establece que se computan "los votos válidos emitidos en favor de los partidos con derecho a subsidio".
Para Tullio, este tema quedó saldado con la reforma de 1994 de la Constitución Nacional. El artículo 97 habla de "votos afirmativos válidamente emitidos" y según dijo el director nacional Electoral "voto emitido es lo contrario a la abstención, válido contrario a impugnado y afirmativo contrario a blanco". De esto se deduce que el blanco es voto valido emitido pero negativo y por tanto no se toma en cuenta para la distribución de los fondos partidarios.
En Neuquén el voto en blanco no tiene una tradición arraigada. En las elecciones de 1999, el porcentaje de voto en blanco fue del 7,22%, en 1995 alcanzó el 9% pero entre 1983 y 1991 osciló entre el 3 y el 5%.
Cuándo es blanco, nulo o recurrido
NEUQUEN (AN).- El voto en blanco consiste en depositar el sobre vacío en la urna o con un papel de cualquier color, sin inscripciones ni imagen alguna, según la definición del Código Electoral Nacional.
El voto es considerado nulo por varios motivos: cuando se introduce una boleta no oficializada o con papel de cualquier color con inscripciones o imágenes de cualquier naturaleza, cuando la boleta oficializada contiene inscripciones o leyendas de cualquier tipo, cuando se colocan dos o más boletas de distintos partidos, cuando la boleta no contempla el nombre del partido y la categoría del candidato a elegir producto de una rotura o tachadura y cuando en el sobre, juntamente con la boleta electoral, se hayan introducido objetos extraños.
El voto recurrido es aquel cuya validez es cuestionada por algún fiscal de mesa. La observación de este voto tiene un procedimiento administrativo establecido cuya resolución resuelve en última instancia la junta electoral.
Estrategias para sumar adhesiones
NEUQUEN (AN)- "Vení a votar", dice Oscar Massei desde la tanda publicitaria. Aunque no menciona el voto en blanco ni la abstención, el candidato a senador por la Alianza es el único que llama a concurrir a las urnas el domingo 14.
Recién en los últimos días las campañas políticas empezaron a copar las tandas de los medios audiovisuales. Todas ignoran los movimientos espontáneos que surgieron aquí y allá convocando a aplicar de distintas formas una suerte de "voto castigo"; en cambio parecen apuntar al elevado porcentaje de indecisos que muestran las encuestas. Y lo hacen con distintos estilos.
El peronismo trató de aportarle algo de creatividad a sus mensajes. Primero estructuró un mensaje basado en títulos de películas, después adaptó como jingle una conocida canción. Intercalado con esto, comparó promesas incumplidas de sus adversarios con la gestión de Sergio Gallia en el municipio de Plottier.
La Alianza eligió como fondo para sus mensajes la emblemática "Quimey Neuquén", y ARI machaca que Elisa Carrió "no está sola".
El Movimiento Popular Neuquino, por su parte, muestra a sus candidatos en plena actividad, y como fondo se escucha una melodía emotiva, casi épica, que recuerda ligeramente a la cortina musical que recibe a los expulsados de la casa de Gran Hermano.
Mejor cara a cara
Pero en general los mensajes son poco elaborados y se destacan por su sencillez. Acaso porque todos los partidos políticos apuestan más al contacto cara a cara con los votantes, algo posible en esta provincia de dimensiones aún manejables para los candidatos.
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