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Sábado 13 de octubre de 2001 | |
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Distrajeron a la policía para cometer dos asaltos |
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Los atracos a una inmobiliaria y una mensajería de Cipolletti les reportaron unos 12.500 pesos. |
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| CIPOLLETTI (AC)- Después de distraer a la policía con una falsa amenaza de bomba en una universidad privada, se cometieron dos asaltos, uno de ellos en una inmobiliaria ubicada a sólo media cuadra. Los atracos les reportaron unos 12.500 pesos. Unos siete mil pesos se llevaron tres sujetos armados tras reducir a la propietaria, los empleados y los clientes, entre los que se encontraba un chiquito de tres años. "Matala, matala", se decían entre ellos para amedrentar a la dueña. Por las características, se supone que eran los mismos que minutos después, robaron 5.500 pesos en una mensajería, ubicada a la vuelta de ese lugar. "Me pusieron la Itaka en el estómago", reveló el propietario. El movimiento de patrulleros comenzó poco después de las 9,40, con un llamado anónimo en la Universidad de Flores, que daba cuenta de la existencia de una bomba. Policías y bomberos comenzaron a recorrer las distintas dependencias de la institución, hasta que comprobaron que se trataba de una falsa alarma. Mientras esto sucedía, a pocos metros del lugar, en la inmobiliaria "Sison" ubicada en Avenida Alem 871, dos personas muy bien vestidas y con maletines, aguardaban sentadas, como clientes, a que la dueña y los dos empleados atendieran a quienes ingresaban a pagar. Había cuatro clientes, entre ellos una mujer con un nene de tres años. En un momento, uno de los individuos se dirigió a la dueña y le advirtió: "Te quedás quieta, esto es un asalto". El otro individuo también extrajo un arma corta, y luego le abrieron la puerta a una tercera persona, que ingresó con el rostro tapado con un pañuelo y una escopeta recortada. Se supone que este sujeto era de Cipolletti y por eso se ocultaba. Bajo la contínua amenaza de las armas, condujeron a todos hasta el baño para comenzar a revisar el local en busca de dinero. También le extrajeron las billeteras a los clientes. Evidentemente tenían muy buenos datos e información de los movimientos del lugar. Era justo el momento de pago de los alquileres. Además, sabían perfectamente que la casa de la dueña, Elsa Guarnaccia, se comunica con el local. Y allí también fueron. "Revolvieron todo", contó la mujer. Lo único que querían era dinero en efectivo. Guarnaccia mencionó que cuando estaban en su casa uno de los delincuentes le dijo al otro "matala, matala", como una for-ma de presionar para que les revelara dónde tenía dinero. Una vez que sustrajeron unos siete mil pesos condujeron a todos hasta el domicilio de la dueña de la inmobiliaria y se marcharon. Una hora después, con camperas amarillas y aparentando ser diarieros, dos personas que se movilizaban en una moto asaltaron la mensajería "Service Express", ubicada en Sáenz Peña 410. También llevaban un arma corta y otra larga. El dueño del comercio, Angel Castilla, contó que lo redujeron junto a dos cadetes y se llevaron 5.500 pesos. "Fue muy rápido", contó el damnificado. Dijo que los delincuentes estaban armados con "una 45 y una Itaka. A mi me pusieron la Itaka en el estómago, me hicieron tirar al piso y me ataron", comentó el hombre. Por las características, la policía sospecha que se trataba de los mismos autores. Poco después, demoraron a tres personas pero no se sabe aún si tienen relación o no con los dos asaltos. |
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