Lunes 8 de octubre de 2001 | ||
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"Todo Europa cree estar en peligro" |
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Antes de viajar a Neuquén, un periodista de la región conversó con el escritor Osvaldo Bayer. |
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ALEMANIA - Osvaldo Bayer sigue con preocupación la escalada bélica que Estados Unidos prepara a lanzar contra el régimen afgano del Talibán.
Pocos días antes de su visita a Neuquén, donde asistirá a la apertura de la Exposolidaria el 20 de este mes, dialogó con un periodista de LU5, en una entrevista donde asegura que el clima dominante entre los europeos tras el atentado es el "desconcierto y hasta cierto temor". La posibilidad de un atentado está siempre latente. La gente ha dejado de ir a actos culturales, fiestas y en general "evita las grandes concentraciones", asegura el escritor. Como intelectual, rechaza la división entre "buenos y malos" que pretenden realizar ciertos medios occidentales. Asegura que son malos tanto los talibanes, "un grupo de criminales que ha sometido a su pueblo a la intolerable de las pobrezas" y violado los derechos humanos, como Estados Unidos, que "no admite disenso ni enfrentamientos, directamente hace lo que quieren y emplean la fuerza". A pocas horas de que la OTAN aprobara el respaldo logístico a la represalia estadounidense, también muestra su preocupación porque la persecución de los terroristas derive en una ola de racismo y xenofobia y apuntó a las organizaciones humanitarias como "el principal baluarte de la paz" en estos tiempos violentos. -¿Cómo ha reaccionado Europa a las pruebas aportadas desde Whashington? -Con sorpresa y mucho desconcierto. Aquí en Alemania hay realmente muchas dudas, por ejemplo, el partido verde que forma parte de la alianza de gobierno con la socialdemocracia dijo a través de una de sus representantes que han dejado de ser un partido pacifista, cosa que realmente es muy duro escucharlo pues hace ya treinta años que este partido está luchando contra toda clase de belicismos. La resolución de la OTAN ha puesto los puntos sobre las ies, han resuelto actuar todos en connivencia, EE.UU. todavía no ha dicho la táctica ni la estrategia que va a llevar a cabo, pero los anuncios de Tony Blair son casi definitivos al afirmar que el Talibán debe entregar a Ben Laden o entregar el poder. Definitivamente no va a haber pactos con los Talibán. Tanto, que hasta los intelectuales aquí están diciendo que EE.UU. está preparando muy bien las cosas para no cometer errores, con servicios de informaciones y con grupos que atacarían tipo comando, de manera de no poner en peligro a la población civil. Roguemos, ojalá que esto ocurra, que no sea la población civil como siempre la que pague el pato de todo esto. Aunque la población civil ya lo está pagando, desde hace muchísimos años. -¿Cuál es la actitud del pueblo europeo en este tema ? - Para mí fueron muy interesantes las asambleas de base del Partido Verde, aunque los dirigentes hagan después otra cosa con tal de permanecer en el gobierno. Los debates que se dan sobre todo en las universidades y allí se puede ver que los europeos realmente tienen mucho miedo. Pongamos el caso de la fiesta de la cerveza en Munich, que convoca tradicionalmente a multitudes de germanos, un clásico donde van miles y miles de personas que bailan, van al teatro, a recitales, etc., pero que este año ha sido un fracaso, un desastre total. El pueblo tiene miedo que esos atentados en Nueva York y Whashington no sean los únicos y que ante el primer ataque de Estados Unidos se responda con otros ataques. Entonces allí donde hay concentración de gente se tiene miedo y no se va. Toda Europa cree estar en peligro y la cercanía geográfica acentúa ese temor. -¿ Es posible juzgar este conflicto dividiéndolo en dos bandos, uno bueno y otro malo? -De Estados Unidos ya conocemos su historia política, es decir, no admite disensos ni enfrentamientos, ellos directamente hacen lo que quieren y emplean su fuerza. Desgraciadamente tampoco esta lucha de los Talibán puede tomarse como una lucha libertaria sino que realmente es un grupo de extrema derecha que ningún ser civilizado puede defender. Estamos ante un grupo de criminales que ha sometido a su pueblo a la más intolerable de las pobrezas mientras un reducido círculo se ha enriquecido a niveles internacionales. Nadie puede defender la situación a la que son expuestas las mujeres, ni a las constantes violaciones a los derechos fundamentales. No podemos admitir eso. Sería deseable que el pueblo afgano se rebelara contra esta dictadura tan terrible y no que la desarme Estados Unidos. -¿Y usted, personalmente, qué cree que puede pasar? -Todo es una especie de espera hasta que ocurra. EE.UU. es muy poderoso, está muy bien organizado, van a hacer golpes comando para ver si logran capturar a los jefes militares del talibán o hacerlos renunciar. Creo que harán bombardeos en lugares tipo bélicos, como aeropuertos o formaciones del ejército, pero no creo que bombardeen poblaciones abiertas. Se van a cuidar mucho de una posible mala imagen internacional. Creo que el tiempo será fundamental y Estados Unidos tiene ahí todas las de ganar. Tanto así que es muy curioso que mientras Whashington arma las operaciones militares, los organismos internacionales que ellos mismos integran en la ONU proveen de comida a los refugiados. Quieren dejar una imagen de humanismo mientras llaman a la guerra que difícilmente se pueda explicar con palabras. Están haciendo todo de tal forma de liberar de culpas a Occidente por la eventual muerte de la sociedad civil afgana. De todos modos, dentro de toda la vergüenza y el horror que esta situación me causa, debo ponerme contento de que, al menos, la ayuda humanitaria continúe llegando. -¿Esta situación se ha convertido en caldo de cultivo del racismo? -Por supuesto, ha sido casi espontáneo el crecimiento del racismo contra los musulmanes, principalmente en Inglaterra, donde ha tenido mucho más eco. Los musulmanes aquí en Alemania se sienten muy inseguros, hasta ahora no ha ocurrido ningún hecho grave, pero se nota en la policía que cualquier persona con algún tipo de antecedente va preso. Tan es así que decidieron abrir todas las mezquitas para que el pueblo alemán las visite y compruebe que no germinan allí organizaciones terroristas. -¿Quienes cree que puedan ser las organizaciones que medien con éxito a favor de la paz? -En la Argentina le sigo teniendo mucha fe a los organismos de derechos humanos que por suerte siguen muy bien organizados, y a lo que la CTA pueda producir junto al Frente contra la Pobreza. No veo a otra organización que cumpla ese papel en la Argentina, no creo que los partidos políticos se conviertan en garantía de la paz. Aquí en Europa, son las organizaciones humanitarias las que lanzan las voces de alerta y las únicas que son escuchadas. Los movimientos como Amnesty Internacional tienen una gran importancia y su voz es muy clara con respecto a las violaciones a los derechos humanos. En Alemania, por ejemplo es muy importante todo lo que diga el Movimiento AntiGlobalización, el Primer Ministro alemán se cuida mucho en sus decisiones, a tal punto que no ha dicho nada todavía al respecto de enviar tropas. -¿Cómo esta de salud? -Muy bien, a punto de realizarme los últimos estudios y esperando llegar a Neuquén la última semana de octubre, a reencontrarme con la Universidad y defenderla de los brutales ataques a los que la ha sometido el gobierno nacional a través de los recortes. Carlos Marcel |
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