Un alumno de escuela primaria llevaba un revólver

Fue en Bariloche y el arma estaba en la mochila .

SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- Luego de ser advertida por una alumna, una maestra de quinto grado le revisó la mochila a un menor y descubrió que efectivamente en el interior había un revólver calibre 32, considerada arma de fuego de uso condicionado.
Las autoridades de la Escuela 295 todavía no pudieron entrevistar a los padres del alumno, pero la policía ya inició una causa penal y puso en conocimiento del hecho al juez de turno, por infracción al artículo 189 del Código Penal, que reprime con penas de seis meses a tres años la simple portación de un arma de ese tipo sin la debida autorización.
El menor se disculpó asegurando que el revólver que guardaba era de un compañero, pero esa circunstancia todavía no había sido acreditada por la docente, que entregó el arma de inmediato en la comisaría 28. Desde la ocurrencia del hecho el chico no concurre a clases y tampoco se presentó ningún adulto responsable para aclarar la situación, pese a que fueron citados por la dirección de la Escuela.
La delegada del Consejo Provincial de Educación, Cristina Balest, reconoció que había sido informada del incidente pero no quiso hacer declaraciones al respecto porque aseguró que todavía no tenía las actuaciones en su poder.
La directora, Alicia Pérez, hace menos de dos meses que se hizo cargo del establecimiento y ya debió enfrentar varios contratiempos, porque estrenó el cargo con las clases suspendidas debido a los actos vandálicos que dañaron el sistema de calefacción. La docente no quiso explayarse sobre el hallazgo del revólver, porque la causa está en la etapa de instrucción. Sólo aclaró que si los padres del alumno involucrado no se presentaban tenía previsto realizar una visita domiciliaria, y que era la primera vez que encontraban en poder de un alumno un arma de fuego. Sin embargo, reconoció que hubo otros alumnos que concurrieron a la escuela con armas blancas.
A principios de agosto los alumnos de la escuela, ubicada en Dos de Agosto y Gin Gin, en el Alto de la ciudad, no pudieron regresar a clases después de las vacaciones de invierno porque en sucesivas incursiones un grupo de vándalos provocó daños a la caldera y al sistema de distribución de aire caliente.
En la primera incursión descargaron los matafuegos en las tuberías de distribución de aire, y al poner en funcionamiento la caldera el contenido químico de los matafuegos se volatilizó y distribuyó por las aulas y áreas de espacio común del edificio. En los días sucesivos volvieron a ingresar a la sala de calderas a través de un boquete y arrojaron una docena de piedras de gran tamaño y un bloque de cemento dentro de la caldera, ocasionando la destrucción de la turbina que impulsa el aire caliente que se distribuye en los ambientes.

Foto: La escuela primaria 295 sufre periódicos ataques de vándalos y ahora un alumno concurrió a clases con un revólver.