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Domingo 9 de setiembre de 2001 | |
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En Neuquén sólo pueden aterrizar los pájaros |
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Desde ayer, el principal aeropuerto del sur del país está inoperable.Las aves se adueñaron del lugar y ponen en riesgo a los aviones.Los vuelos quedaron suspendidos por lo menos hasta mañana. |
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| NEUQUEN (AN).- Desde ayer a la mañana, los únicos aterrizajes y despegues que se producen en el aeropuerto internacional de Neuquén son los que ensayan en perfecto desorden las gaviotas, teros, tordos y hasta algunos patos overos que -en bandada- se adueñaron de la pista y los alrededores de la terminal Presidente Juan Domingo Perón. La insólita invasión de plumíferos obligó a la Fuerza Aérea a advertirle a las empresas que operan en la base sobre los peligros a los que se exponen en caso de que alguna de las aves ingrese en los reactores de las turbinas de los aviones. Por eso, ayer las empresas aéreas suspendieron todos los vuelos previstos desde y hacia Neuquén, y lo mismo pasará mañana. Es que, lanzado el alerta de la Fuerza Aérea, de haber algún accidente la responsabilidad corre por cuenta de las empresas que -automáticamente- quedan sin la cobertura de sus respectivos seguros. Un riesgo que nadie quiere asumir. La única alternativa para que los aviones bajen en Neuquén es que el movimiento se haga de noche, cuando las aves se van a dormir. Para los especialistas, los pájaros dejan de ser un problema a partir de las 19. Luego de ese horario, ayer había un sólo vuelo programado. Y fue suspendido. En un trabajo conjunto, la Fuerza Aérea y la dirección de Guardafaunas, multiplican esfuerzos y técnicas para ahuyentar a las aves que, porfiadas, demuestran una increíble capacidad de adaptación a situaciones tales como bombas de estruendo o los propaladores de ultrasonido. El objetivo es que mañana el problema esté solucionado definitivamente, aunque entrada la tarde no estaba muy clara qué metodología se iba a seguir. El aeropuerto neuquino es el tercero más importante del país después de Aeroparque Jorge Newbery y de la terminal área de Córdoba, y en promedio se mueven un millar de pasajeros. "Por supuesto que no se trata de una broma... señor, a mí no me causa ninguna gracia esta situación. Yo soy el máximo responsable de la seguridad del aeropuerto y por ende soy el que definió que operar en estas condiciones es demasiado peligroso para las vidas humanas", se le escuchó decir por teléfono al mayor Santiago Ramero, el jefe del aeropuerto neuquino. Del otro lado de la línea estaba uno de los tantos pasajeros que ayer se quedó sin volar. Además de los quejosos y de los escépticos, Ramero tuvo que atender a los salvadores que, entre otras cosas, propusieron colgar tiras de naylon negro a lo largo de los casi tres kilómetros que tiene la pista principal de la aeroestación. Desde hace siete días, cuando empezó el problema, fracasaron todos los intentos por poner en fuga a las aves. Incluso en laboratorios de la Capital Federal se analiza con qué se están alimentando las aves, para tratar de determinar cuál es la causa que mantiene a los pájaros en el predio, sobre y debajo de la pista. Hoy por la mañana se fumigará toda la zona. El problema es tal que incluso se pensó colocar aves muertas sobre el asfalto, para meterle miedo al resto. La posible proliferación de aves de rapiña desvaneció la alternativa. El jefe de los Guardafaunas, Román Van de Genachte, estimó ayer que disminuyó la cantidad de aves. "Cuando empezamos el lunes había unas 5.000, creo que ahora estamos en 3.000", dijo el especialista en diálogo con "Río Negro". Con todo, para sumar sorpresas, la avifauna del aeropuerto es cada vez más variada (ver aparte). Ayer a la tarde, el gobierno de la provincia, a través de la subsecretaria de Obras y Servicios Públicos, instaló cuatro nuevos cañones de estampidos: todos los que había en el Alto Valle. Se trata de los cañones que los chacareros usan para proteger su producción. Por caso, es muy común para espantar a los pájaros de los cerezos.Con los cañones y la fumigación -para que la que es estaban adoptando todos los recaudos- las autoridades esperan terminar con el problema que, hasta el momento, no tiene ninguna explicación científica. Franca competencia con las aeronaves NEUQUEN (AN).- Los guardafaunas de la provincia están virtualmente instalados en el aeropuerto neuquino. Y a pesar de que llevan cinco días en el lugar no salen de su asombro. Es que a pesar de que hay menos aves, las variedades se multiplicaron. |
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