Martes 4 de setiembre de 2001

 

Llegó a la Defensoría el caso de una alumna cipoleña agredida

 

La niña, que cursa 7ยบ grado, tuvo que irse a otra escuela.

  CIPOLLETTI (AC).- La denuncia de una madre, Marta Aguilera, sobre amenazas y malos tratos que a su juicio sufrió su hija de 12 años en una escuela cipoleña, llegó hasta la Defensoría del Pueblo.
El organismo con sede en Viedma la recibió y la respondió el 22 de agosto, por medio del entonces Defensor del Pueblo interino, Daniel Ayala, y ahora se halla en la órbita de la recién electa titular, Nilda Fulvi de Belloso, quien inicia su gestión con este candente tema. "Oportunamente le serán comunicados los avances de significación que se realicen en la investigación", le notificó Ayala a la atribulada mamá.
Marta Elizondo también denunció el caso en la fiscalía de comisaría de esta ciudad. La señora involucra como autora de los malos tratos a otra alumna, afuera y en el interior de la escuela 33 "Juan XXIII" del barrio San Pablo, y también pone en tela de juicio a las autoridades de ese establecimiento, por su "pasividad" y dado que en más de una ocasión la que sufrió "recriminaciones y gritos fue mi hija, y no la que la trataba mal".
Esta situación -comentó Marta Aguilera- viene sucediendo desde principios de año pero en los últimos tiempos se tornó insostenible, y por ello cambió a su hija de escuela. "Lloró al tener que dejar a los compañeros con los que había compartido siete años, máxime cuando estamos a dos meses de su promoción al nivel secundario. Pero también lloraba, y no podía dormir de angustia, por el miedo que tenía de ir a la 33 y sufrir humillaciones", relató la mamá.
De acuerdo con la mujer su hija era amenazada y golpeada por una compañera, también de séptimo grado. El último incidente ocurrió hace unos 20 días, porque la nena fue objeto de "puñetazos" en el rostro.
Una de las responsables de la escuela 33 -siempre de acuerdo con la mamá- retuvo a la nena en su despacho por unas cuatro horas, mientras le advertía que "no me traigan cuestiones de chismes".
"Mi hija estaba golpeada, pedía llorando que me llamaran, y no lo hicieron. Decían que no tenían teléfono. Las maestras plantearon que se haga el llamado desde un teléfono cercano, pero no las dejaron", contó Marta Aguilera.
En el contacto con la Defensoría del Pueblo "me dijeron que no me quede con los brazos caídos. Que vaya a los medios. Que no me calle. Y prometieron que me iban a ayudar",.
Por este asunto la Defensoría abrió el expediente 540/01, y además, corrió traslado de las actuaciones a la dirección de Nivel Primario del CPE sede Cipolletti para que conteste la denuncia de la mamá.

Foto. Nilda Belloso inicia su gestión con una grave denuncia en Cipolletti.

   
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