Domingo 23 de setiembre de 2001 | ||
Roca tendrá parque vial para aprender a manejar |
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También servirá como espacio de recreación. |
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ROCA (AR).- Lo que hasta unos meses atrás fue un cementerio de autos chocados en Roca se transformará en un gran parque para aprender a conducir y enseñar a los chicos sobre las normas de tránsito. Un ambicioso proyecto se ejecuta por estos días detrás de la sede de Policía Caminera. Con más de 120.000 pesos de inversión, el objetivo es aportarle a la ciudad un pulmón verde más e iniciar el camino hacia una generación de conductores responsables. Además, cuando funcione a pleno los roquenses tendrán la posibilidad de poner fin a las largas esperas y trámites para renovar el registro, porque allí se podrá rendir los exámenes teórico y práctico, habrá consultorios para la revisión médica y los antecedentes llegarán en forma instantánea desde Jefatura de Policía vía e-mail (ver aparte). La idea de cambiarle la cara al lugar en el que "dormían" 170 vehículos siniestrados comenzó a rondar por la cabeza de las autoridades de Tránsito y la Cooperadora de Policía Caminera el año pasado. Y a principios de este año, cuando el subcomisario Félix Pérez y un miembro de la Cooperadora viajaron a Buenos Aires para observar dos pistas e incorporar modelos, tomó forma la pista de educación vial y conducción de Roca. El mismo Pérez y el arquitecto Guillermo Aquistapace diseñaron la obra, que hoy aparece impecable en una maqueta, mientras que el terreno de 116 metros por 60 se va asemejando al ideal poco a poco. En el costo total del parque vial están incluidos 57.000 pesos para la construcción del edificio, 40.000 para la pista y más de 20.000 en luminarias, cartelería, césped, riego y rejas. El edificio está diseñado para tres etapas. La primera consta de una administración, un privado y un sanitario; la segunda sería una recepción, con la sala de reunión de Cooperadora; mientras que la tercera etapa prevé dos consultorios, dos sanitarios y un aula para 30 personas. Además tendrá garage para el auto doble comando con el que se enseñará a conducir, las bicicletas y kárting a pedal. Por su parte, la pista tendrá cordón cuneta, señalización vertical y horizontal, semáforos e iluminación. "Esto no sólo será una obra importante para la educación sino que aportará belleza y una opción recreativa a la ciudad, ya que los padres podrán visitarla con sus hijos los fines de semana y disfrutar del parque mientras los chicos andan en bicicleta y aprenden", comentó Carlos Avaca, tesorero de la Cooperadora. En este sentido, el subcomisario Pérez destacó la importancia de inculcar la importancia de respetar las normas de tránsito a los alumnos de jardín de infantes y escuelas primarias, pero sostuvo que "los más interesados en recibir clases de educación vial deberían ser los colegios secundarios, ya que estos estudiantes son los que más cerca están de sacar el carnet de conductor". Ante esto, reiteró la predisposición de Policía Caminera para brindar charlas gratuitas a los establecimientos que lo soliciten. En tanto, la instalación de la escuela de conducción servirá para solventar el mantenimiento de la pista. Según comentaron los responsables del proyecto, el costo de los cursos de manejo ronda los 200 pesos en Buenos Aires, aunque aquí todavía no se definió la tarifa. Sobre el tiempo de ejecución, el tesorero de la Cooperadora informó que "depende de la llegada del asfalto". "En este momento se están realizando gestiones con una empresa para que aporte el material y abarate costos. Si llega en los próximos días, antes de fin de año la pista estaría lista y se podría comenzar con los cursos". Cervantes da cinco veces más carnets que Roca Para el subcomisario Félix Pérez, la importancia de la construcción de la pista de educación vial y conducción en Roca pasa por "la posibilidad de definir qué tipo de tránsito queremos". "La idea es utilizar nuestra estructura para cumplimentar en un solo día todas las exigencias para sacar el carnet. Esto podría elevar el precio del carnet en uno o dos pesos y sabemos que puede derivar en un incremento de entrega de registros en otras ciudades que tienen menos exigencias", advirtió Pérez. Es sabido que la mayoría de los argentinos son reticentes a cumplir las normas y siempre se busca el motivo para no acatar las reglas. Hace poco tiempo, una encuesta reveló que la población tiene un alto conocimiento de las señales y sus significados, pero no las respetan. Para encontrar un ejemplo de esto no hay que ir muy lejos. Mientras que Roca realiza anualmente alrededor de 4.000 trámites entre renovaciones y nuevos registros, en Cervantes la cifra supera los 20.000, según informaron fuentes de la Policía. "Si nosotros encontramos un carnet de una ciudad y el DNI del conductor tiene dirección en otro lugar tenemos la facultad de secuestrarlo", informó Pérez. Sin embargo, esto choca con la ausencia de una decisión política que controle y haga respetar las reglas. (AR) |
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