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Miércoles 5 de setiembre de 2001 | |
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El Concejo desairó otra vez a Costanzo |
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El cuerpo dejó sin efecto la poda de bonificaciones a municipales de Viedma. La sesión fue seguida por los empleados, que aplaudieron la decisión de los ediles. |
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| VIEDMA (AV).- El Concejo Deliberante volvió ayer a la carga con una nueva eliminación de las reducciones salariales a los empleados dispuestas por el intendente Gustavo Costanzo, profundizando aún más el conflicto de poderes ya que dejó abierta la puerta para que todo termine en la Justicia. La insistencia en rechazar el veto a la ordenanza por la que se derogó el decreto 762, en torno a la poda de un tercio de las bonificaciones a 182 agentes de los 470 que posee el municipio, se produjo durante una tensa sesión que se extendió por siete horas. Junto con los cinco concejales de la oposición -Alianza y Democracia Cristiana- votó afirmativamente el presidente del cuerpo, Pedro Pesatti, de extracción peronista y enfrentado con el jefe comunal a raíz de los permanentes desacuerdos en el tratamiento de la crisis que se desató por el desfinanciamiento de las cuentas. Los ediles peronistas María Migone y Julio Alvarez votaron en contra del rechazo al veto, mientras que Miguel Knecht de la misma bancada se abstuvo solidarizándose con Pesatti ante las presiones que ejerció el Ejecutivo mediante el envío de una nota criticando la posición del titular del cuerpo. Las deliberaciones, seguidas permanentemente por enardecidos empleados, había sido convocada para las nueve de la mañana, pero se vio demorada por un cuarto intermedio, ya que Costanzo llamó a los concejales para realizar una nueva oferta. En ese marco, propuso la puesta en vigencia del sistema de pago de haberes con vales alimentarios desde el uno de setiembre, a cambio de borrar el decreto, la implementación de los vales desde octubre y vigencia del decreto por setiembre, o bien la imposición de los tickets desde octubre con un régimen de reducción del 50% en las bonificaciones sólo para aquellas de "dedicación exclusiva" y "dedicación especial". En todos los casos la vigencia de los vales alimentarios será por 180 días. Esto no conformó al centenar de empleados presentes en el concejo, quienes desestimaron ese sistema de pago tachándola de rebaja salarial. A su vez, denunciaron que el Ejecutivo había defendido como solución el nuevo cobro de tasas municipales por medio de la distribuidora energética Edersa. Con este panorama, los ediles improvisaron una nueva reunión interna para definir el rumbo a tomar antes de continuar con la sesión. Al abrirse el debate, Carlos Pérez (DC) criticó a Costanzo por su "capricho infantil" de insistir con el decreto y "salir a acusarnos de golpistas y demagogos". Jacobo Abrameto (Alianza) sostuvo que no fue valorada la oposición por el apoyo que brindó ante la crisis y encima Costanzo "mal vendió bonos (provinciales) perdiendo 313.000 pesos, que representan casi una masa salarial". En tanto, Knecht advirtió que si existen intromisiones de poderes, que "lo diga la Justicia", y al hacer uso de la palabra Pesatti afirmó que "yo no soy el Moyano de Viedma (por el dirigente cegetista), pero pienso que la gente vale más que las máquinas". La sesión se levantó entre aplausos y vítores por parte de los empleados. |
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