Martes 4 de setiembre de 2001
 

Río Negro transfiere anualmente seis millones a sus empresas públicas
 

Sefepa se lleva el mayor desembolso. Gran parte de este dinero va para los sueldos. No hay control sobre los gastos de estos fondos.
  VIEDMA (AV).- El Estado rionegrino transfiere medio millón de pesos por mes a empresas públicas.
El mayor desembolso corresponde a Sefepa, con casi 165.000 pesos mensuales, pero comprende otras empresas inexistentes, como Edhipsa, SAPSE, Aeronor y Codepo. Las cuatro recibieron casi 700.000 pesos. Desde Economía se explicó que esos giros se destinaron a cancelar obligaciones pendientes.
Igualmente, los mecanismos de control siguen sin implementarse. Pese a que ya pasaron 50 días desde el anuncio del gobernador Pablo Verani, todavía no se firmó la norma que centraría en un representante gubernamental de los directorios de las empresas públicas con el objetivo de mejor control y política estatal, incluso se promocionó que aquellas con ganancias derivarían sus fondos a las áreas sociales.
Otra posibilidad de monitoreo también se diluyó anteriormente. En mayo del año pasado, Economía elevó el proyecto y la Legislatura creó la Sindicatura General de Empresas Públicas. Ese instrumento nunca se implementó ya que quedó en el análisis a partir de que se advirtió que el Tribunal de Cuentas ya dispone de un esquema que persigue igual objetivo de revisión empresarial.
Los boletines de Economía consignan que el año pasado -en los 11 primeros meses- se enviaron a las empresas más de seis millones de pesos . Se aseguran que los aportes están destinados a gastos corrientes, esencialmente a sueldos. La discriminación de los desembolsos alcanza a diez firmas. Sefepa lidera esos aportes con 1,7 millón, seguido por DPA con 1,2 y por Altec con 1,1 millón. Esta firma de informática acusa resultados positivos y su desembolso se explica -curiosamente- como aporte estatal pero que, en realidad, responde a la cancelación de obligaciones por servicios de Altec, que no facturaría así porque "no existirían contratos para no abonar impuestos", según comentó una fuente de Economía.
Así de difuso aparece el cuadro de remisiones a las empresas estatales. ARSE -otra empresa con aparente superávit- registra fondos por 175.000 pesos y Río Negro Fiduciaria consigna 197.000 pesos.
Mientras tanto, Hiparsa contabiliza algo más de 920.000 pesos. El secretario de Hacienda, Pablo Verani manifestó que la mayor parte de esas transferencias se relaciona a las desvinculaciones.
Menos defensas existen en los envíos registrados para la Corporación de Desarrollo Portuario (Codepo), SAPSE, Aeronor y la petrolera Edhipsa. Las cuatro sumaron 692.000 pesos recibidos por el Estado provincial. Estas empresas son inexistentes. Algunas todavía registran personal en sus estructuras, incluso se reconoce que esos agentes -como en la Codepo- son un elemento de análisis para su disolución.
Por otra parte, el contador Verani explicó que los principales desembolsos a Aeronor y SAPSE son por compromisos pendientes y judiciales. Pero el funcionario igualmente admitió que algunos de esos costos empresarios son para pagos de honorarios.
El control de las erogaciones y las prioridades empresariales se plantearon siempre como objetivo central en el monitoreo de Economía. Así se generó la legislación de la Sindicatura General de Empresas Públicas. Luego, el 27 de julio, el gobernador anunció que se decretará un único representante en los directorios de cada empresa.
De ese modo se pretende ahora controlar los gastos.
Aquel anuncio de Verani aún está en debate en la oficina jurídica de Economía.

Intervenciones históricas

A poco de asumir en 1995, el gobernador Pablo Verani decretó la intervención de la mayoría de las empresas rionegrinas para su regularización y control de gastos. Después de cinco años, esa situación formal se mantiene.
En diciembre del año pasado, el último decreto ratificó intervenciones a Hiparsa, EDHIPSA y Aeropuertos Norpatagónicos Sociedad Anónima (AERONOR SA).
Ya anteriormente, en abril del 2000, Verani había disuelto a SAPSE y se establecía un período de liquidación de 120 días.
Mientras tanto, el gobierno normalizó Altec y Casa Rionegrina porque "registran utilidades" de la provincia. Lo llamativo es que Altec recibió el año pasado más de 1,1 millón de aportes del Estado.
Fuentes de Economía se mostraron sorprendidas cuando "Río Negro" lo consultó sobre esa situación y ofrecieron una respuesta insólita: las empresas hacen figurar aportes provinciales porque no realiza contratos con el Estado rionegrino para evitar el pago de impuestos. (AV)
   
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