La Alianza persiste con su discurso vehemente
Conducción y postulantes de la Alianza se trasladaron a Allen. Verani reconoce que al candidato a senador Falcó lo conoce poca gente. Una vez más el mandatario cargó contra Pichetto. Los candidatos ratificaron que no votarán nuevas medidas de ajuste.
El gobernador rionegrino Pablo Verani fue el único que apuntó directo y volvió a cargar las tintas contra el candidato a senador justicialista, Miguel Pichetto. "Lo mejor que hizo en el Congreso nacional fue defenderlo a Yabrán", disparó en primer término.
"¿Alguien lo vio recorrer la provincia para que en estos ocho años que estuvo en el Congreso como diputado viniese a preguntarle a Río Negro qué necesitaba su provincia? No, no lo vieron porque vino a Río Negro de casualidad", agregó sin pausa.
Luego, y una vez más tratando de levantar el bajo perfil que naturalmente imprime la figura de Luis Falcó, candidato a senador, Verani reconoció que es posible que mucha gente no lo conozca. Aunque consideró que "a Pichetto lo conocen, pero no por lo bueno. Pichetto le suena a la gente porque no hizo las cosas bien, pero ahora lo vamos a hacer sonar el 14".
Sin perder el hilo conductor de la "charla" que propuso a los asistentes, prosiguió: "en segundo lugar la Alianza propone a Isidori, pero a quién tiene frente es al fantasma Benito. Por qué no sale a la palestra, parece que no se exhibieran los otros candidatos por temor, o no se exhibe al segundo porque ya se da por perdedor", apuntó Verani.
Finalmente en su discurso tampoco dejó afuera al sector productor, para el cual los distintos sectores vienen repartiendo su propio cúmulo de promesas. En medio de la crisis de la fruticultura "pareciera que hoy se fuera terminando el Alto Valle de Río Negro, el pequeño y mediano productor, porque se produce la concentración de riquezas. Ahí es donde queremos mantener a nuestro productor, a través de créditos de reconversión que sean factibles de pago", señaló el viernes, cerca de las 23, rodeado por las autoridades provinciales del Frente Grande y los intendentes de Cipolletti, Julio Arriaga, y de Allen Carlos Sánchez.
Minutos antes la palabra la tuvo el barilochense Julio Acavallo, quien pretende lograr un lugar en la cámara baja. Planteó, al igual que Isidori, su rechazo a nuevas medidas de ajuste.
"Tenemos que decir basta a las propuestas económicas que lo único que nos plantean como futuro es más ajuste. Porque no es un proyecto de país solamente el déficit cero, tenemos que construir un nuevo proyecto que contemple a productores y trabajadores y privilegie las economías regionales", dijo Falcó.
"Hay que exigir que en esta crisis , paguen los que han vivido muy bien en estos últimos diez años: las empresas públicas privatizadas y el sector financiero", sentenció Isidori.
Finalmente todos los candidatos coincidieron con la necesidad de una mejor relación federal con el gobierno central. "Queremos un trato más relevante de la Nación para esta provincia. No queremos ser más los parientes pobres de Buenos Aires", sintetizó Falcó.
Y luego, todos a comer.
El olor a comida fue muy seductor
ALLEN (AA).- Los candidatos aliancistas y su comitiva de aliados del Frente Grande llegaron un poco tarde, sobre el filo de las 22.
A esas alturas el salón de la asociación de Bomberos Voluntarios de Allen estaba casi colmado.
Habían previsto la asistencia de unas 600 personas, pero el final de la noche se cerró con alrededor de un millar de concurrentes.
El importante gentío que comenzaba a tomar sus puestos en las largas mesas causó un extraño asombro en los organizadores, comprometidos a ofrecer una cena.
Rápidamente tablones y sillas comenzaron a marchar de un lado a otro a fin de improvisar nuevas mesas para los comensales.
Sin embargo, la mayor preocupación fue la provisión de comida, que a todas luces parecía insuficiente.
Por lo cual a último momento, según se supo, los encargados del evento debieron correr a comprar más carne para el asado.
Incluso el propio mandatario provincial, Pablo Verani, se encargó de proponer a sus candidatos la improvisación de discursos cortos, para no impacientar los ánimos de los asistentes.
Muchos de ellos llegados en colectivos desde los barrios y la zona costera de Allen.
Grosvald, duro con los partidos nacionales
ROCA (AR).- Para el Movimiento Popular Patagónico (MPP) que los legisladores de los partidos nacionales apliquen el principio de "disciplina partidaria" lesiona los intereses provinciales en el Senado.
Esta es una de las consignas de campaña que el partido que lidera Julio Salto va a tener en cuenta si logra obtener una banca en el Congreso Nacional.
Después de casi cinco años, el MPP se presentará solo. Atrás queda la historia de alianzas que nada le aportaron para acumular y reproducir poder.
De cara a los comicios, el diputado provincial y candidato rionegrino a senador nacional Guillermo Grosvald cree que la misma actitud "disciplinada y contradictoria" de los parlamentarios se repite también en el seno del gobierno provincial.
Tal caso fue cuando Grosvald había anticipado en la Legislatura lo que después sería una investigación publicada por "Río Negro": la relación directa entre la empresa Rocafé y el Ejecutivo provincial, donde el Estado rionegrino privilegió el pago de los servicios de esa empresa -muchas veces en efectivo- antes que cualquier otra en Río Negro.
La misma disciplina partidaria llevó a los legisladores de la Alianza, según palabras de Grosvald, a aprobar una ley "tal cual había sido remitida desde el el gobierno, sin espíritu crítico".
Y denunció: "La discrecionalidad con que los funcionarios que no fueron elegidos por el pueblo, hacen oscuros manejos con los dineros públicos, beneficiando a amigos del poder mientras los jubilados cobran las acreencias con los bonos".
En este sentido, volver al federalismo representativo de las provincias en el Senado se perfila como la propuesta más fuerte del MPP teniendo en cuenta los antecedentes de la direccionalidad en las acciones políticas que se implementan en Río Negro, según dijo. De la misma forma se articula otra de las propuestas tendientes a preservar la "seguridad jurídica" de los ciudadanos. Vale decir que se trata de fiscalizar los contratos que el Estado realiza con empresas privadas, de manera que no se lesionen los intereses de los usuarios.
De ahí que Grosvald explicó que "aquel concesionario que haya cumplido con los contratos y tenga una tarifa razonable, y ajustada a su derecho, continuará con su concesión, el que así no lo haya hecho perderá su contrato".
Las economías regionales también serán uno de los temas de agenda del MPP, que defenderá a ultranza los subsidios al gas y a los combustibles que Nación está analizando quitar. "No es posible que los rionegrinos paguemos más caro el gasoil que utilizamos para producir y transportar nuestros productos cuando tenemos una sola cabina de peaje en toda la provincia en el puente de Cipolletti y Neuquén", concluyó Grosvald.
(AR)
Ahora, solo
La campaña electoral del 14 de octubre se presenta para el MPP como un escenario de reflexión sobre su identidad política. Puede decirse que estos comicios le servirán para saber "quién es" a la hora de las urnas.
El partido no viene de tiempos positivos.
Este hoy implica el desafío de reconstruir poder. Poder que se le fue mellando durante años vía decisiones que le hicieron perder incluso mucho de su identidad.
Pérdida a la que por supuesto no es ajena la determinación de asociarse al muy polémico PJ rionegrino para conformar el Frente para el Cambio y marchar juntos a sucesivas derrotas electorales.
Sin querer reconocer el equívoco al que se iba deslizando, el MPP siguió accionando en forma zigzagueante según la situación política que estuviera en juego. Finalmente, el alejamiento de sus filas del intendente de Cipolletti Julio Arriaga hizo el resto en lo que a debilitamiento se refiere.
Ahora, solo, el MPP procura nuevos aires.
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