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Crece el brote racista contra musulmanes
Ante el incremento de actos violentos de tipo xenófobo en EE. UU., Bush visita un centro islámico
WASHINGTON- Los actos de violencia contra las mezquitas y los centros islámicos de Estados Unidos se multiplicaron en las últimas hora, pese a que el presidente George W. Bush le recordó a la ciudadanía que los fieles de esas religiones "también son americanos".En medio de una ola que por momentos roza la xenofobia y que ya se cobró dos víctimas mortales (un indio en Arizona y un paquistaní en Texas), el secretario de Justicia, John Ashcroft, anunció ayer que el FBI investiga al menos 40 episodios de violencia contra ciudadanos árabes-americanos.
Ashcroft advirtió que el gobierno "perseguirá agresivamente" cada acto de racismo que sea denunciado. El presidente Bush lanzó reiteradas exhortaciones a los estadounidenses para que no descarguen sobre los musulmanes que viven en el país la responsabilidad por los ataques del martes pasado en Nueva York y Washington.
Tales son los esfuerzos de Bush por evitar una nueva "caza de brujas" contra los musulmanes, que ayer visitó un centro islámico en Washington para mostrar su solidaridad con las víctimas de los ataques y actitudes hostiles por parte de un sector de la población vernácula.
"El rostro del terror no es la verdadera fe del Islam", dijo Bush en una breve visita al Centro Islámico de Washington.
Bush dijo que no se podía permitir que los musulmanes se sintieran amenazados en Estados Unidos y que ese tipo de cosas no podían suceder en el país.
El presidente manifestó que aquellos que amenazaban a los extranjeros deberían sentirse avergonzados. Además, destacó que el Islam es una religión pacífica y que son los terroristas quienes no quieren la paz.
"El presidente considera muy importante que también los líderes locales hagan llegar el mensaje: como americanos, los musulmanes aman nuestra bandera como cualquier otro ciudadano", señaló el vocero de la presidencia, Ari Fleischer.
Los ciudadanos de origen árabe denunciaron cientos de ataques entre el martes pasado -cuando fueron perpetrados los atentados y hoy: ataques a mezquitas, bombas incendiarias, amenazas de muerte, agresiones verbales e insultos de toda laya. Nihad Awad, presidente del Consejo para las relaciones islámico-estadounidenses, subrayó que "no hay lugar para el terrorismo en la religión musulmana" y señaló que va contra todos los principios norteamericanos "acusar a siete millones de musulmanes por su religión".
Los brotes de furia de los ciudadanos estadounidenses alcanzaron también ayer a la diputada demócrata por California Barbara Lee, quien la semana pasada fue la única en votar en contra del uso de la fuerza militar en represalia por los atentados terroristas.
Una escolta policial fue asignada ayer a la custodia de la oficina de la representante californiana, quien desde el sábado último es víctima de constantes agresiones verbales y amenazas.
"La gente está de luto. Enfurecida, frustrada... Entiendo que hay un alto nivel de emotividad", justificó la propia Lee, una diputada morena que el sábado rompió la unanimidad del Congreso rechazando la apelación a la fuerza para tomar represalias por los ataques del martes pasado. (ANSA, DPA)
Doce preguntas sin respuesta
NUEVA YORK (DPA) - Al cumplirse una semana de los atentados terroristas más espectaculares de todos los tiempos, doce preguntas permanecen sin respuesta:
1) ¿Contra qué objetivo pretendía atentar realmente el vuelo 93 de United Airlines que se estrelló en las cercanías ?
2) ¿Se estrelló ese vuelo por una rebelión de los pasajeros o fue derribado por la Fuerza Aérea estadounidense?
3) ¿Estuvo realmente en peligro la seguridad del presidente George Bush a bordo del Air Force One, como sugirió el gobierno al filtrar la recepción de un mensaje en el que los terroristas habrían utilizando la misma clave de los servicios secretos y advertido que "el Air Force One es el próximo"?
4) ¿Es cierta la denuncia del periodista de WNBC.COM Tim Minton de que hubo un quinto intento de vuelo suicida, el número 23 de United Airlines que despegó del aeropuerto JFK de Nueva York rumbo a Los Angeles, tras un incidente en el que tres pasajeros de aspecto árabe fueron obligados a abandonar la aeronave y se esfumaron antes de que llegaran las fuerzas de seguridad?
5) ¿Quiso realmente el presidente Bush ir a la Casa Blanca inmediatamente después del atentado?
6) La ausencia de cadáveres y sangre en las imágenes de televisión, ¿obedece a una autocensura de ribetes éticos por parte de las cadenas o a una orden del gobierno?
7) ¿Hubo descordinación entre la autoridad aeroportuaria y la defensa militar del país?
En otras palabras, ¿pudo haberse derribado alguno de los aviones antes de que alcanzaran sus objetivos?
8) ¿Era la Casa Blanca el destino real del avión que se estrelló contra el Pentágono?
9) ¿Es Osama bin Laden el cerebro de la trama terrorista, y, si lo es, es el único?
10) ¿Podrían haberse evitado los atentados de haber funcionado mejor los servicios secretos?
11) ¿Es la política de la administración Bush hacia Cercano Oriente responsable de que los servicios secretos estadounidenses no tuvieran indicios de los atentados que se estaban fraguando?
12) ¿Cuántas personas murieron en los tres atentados?
Buscan leyes antiterroristas
Mientras la sociedad americana acopia víveres y gasta en libros sobre Nueva York, ben Laden y Nostredamus, el fiscal general de EEUU, John Ashcroft, a quien acusan de ser un "fundamentalista católico" propuso ayer intensificar las penas por terrorismo y aplicarle los mismos instrumentos ya en vigor contra otros crímenes como los relacionados con las drogas, el espionaje o el lavado de dinero.
Ashcroft, en una conferencia de prensa junto al director del FBI, Robert Mueller, anunció que, "en uno o dos días", el Departamento de Justicia habrá terminado su propuesta legislativa y la enviará al Congreso para su aprobación. Además, el Departamento de Justicia ha ordenado que otros 300 policías federales ("marshalls") se incorporen a la investigación, además de informar de que a partir de ahora numerosos agentes de ese cuerpo empezarán a volar en aviones comerciales para reforzar su seguridad.
Al tiempo que reforzaron migraciones el fiscal aseveró "para la lucha contra el terrorismo debemos disponer de los mismos instrumentos, y hacerlo con la misma intensidad que ya se utiliza para combatir otros delitos como los relacionados con las drogas o con el espionaje", dijo el fiscal general (ministro de Justicia) de EEUU". (DPA)
Ilegales latinos bajo los escombros
Indocumentados e inmigrantes ilegales de origen latinoamericano podrían estar entre las víctimas del atentado contra el World Trade Center (WTC) de Nueva York, que hasta ahora contabiliza más de 5.422 desaparecidos, según fuentes diplomáticas.
El primer peruano encontrado entre las ruinas, Julio Fernández Ramírez, que trabajaba en una empresa de pinturas industriales del piso 92 de una de las torres, recibió sepultura ayer en Nueva York, informó el consulado.
"No podemos descartar la posibilidad de que entre los desaparecidos haya indocumentados o inmigrantes ilegales ", dijo a la Agencia Alemana de Prensa (dpa) la cónsul de El Salvador en Nueva York, Elisa Herrera.
La diplomática recordó que tanto su país como otros países de América Central y México tienen una población flotante de trabajadores ilegales en muchas ciudades de Estados Unidos, especialmente en Nueva York, donde hay normalmente más trabajo.
Tampoco descartaron esta posibilidad el consulado argentino y el peruano, entre otras sedes diplomáticas. El representante diplomático de Perú, por otra parte, aclaró que, de ser así, la identificación se transformaría en una tarea muy difícil, porque las víctimas usaban nombres falsos o números de Seguridad Social de otras personas para poder trabajar.
(DPA)
Apuran planes para frenar bioterrorismo
Las autoridades estadounidenses están acelerando los planes para frenar la amenaza del bioterrorismo, convencidos de que el próximo ataque contra EEUU no se hará con aviones, sino con armas químicas o biológicas.
"Esto no es el fin", declaró el ex senador Gary Hart, al referirse a los atentados en Nueva York y Washington. "Es sólo el principio y habrá otros ataques en este país.El próximo no se hará mediante aviones comerciales. Será químico, biológico o nuclear, contra ciudades como Denver, Seattle o Nashville", advirtió Hart, quien consideró que EE.UU "no está suficientemente preparado" para hacerlo frente.
Numerosos estudios del Centro para el Control de Enfermedades, con base en Atlanta, han advertido de que la amenaza del bioterrorismo es una de las más peligrosas para EEUU y este país no está preparado para hacerle frente. En 1984, 751 personas resultaron afectadas en EEUU por una intoxicación alimenticia provocada por el grupo "Bhagwan Shree Rajneesh", que utilizó la bacteria de la salmonella. (EFE)
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