Los más chicos quieren una banca

En Río Negro, el MPP y ARI van a las elecciones de octubre esperando que una pirueta de la política los coloque en el Parlamento Nacional. Prometen luchar por mejorar la calidad de la política, arremeter contra la corrupción y sancionar duramente a los que prometen y cuando son gobierno no cumplen.

Saben que tienen muy acotadas sus posibilidades de ganar.
Pero también que en momentos de incertidumbre política, como diría Clemenceau, "no hay que eludir el infierno de las urnas para saber qué es uno o qué queda de uno".
Esta es en el fondo la razón por la cual el Movimiento Popular Patagónico y Argentinos por una República de Iguales, que a escala nacional lidera Elisa Carrió, participarán de las elecciones parlamentarias de octubre.
Ayer, en Bariloche, el MPP y sus candidatos se propusieron como la alternativa "realmente opositora y con un proyecto federal".
ARI, por su parte, comenzó hace una semana a vertebrar su campaña a partir de la candidatura a senador del roquense Guillermo Urdínez.
Y en Bariloche, el presidente del MPP Julio Salto no ahorró críticas al "régimen del gobernador Pablo Verani y a su aliado Julio Arriaga, intendente de Cipolletti", pero se mostró dispuesto a captar a los desencantados del PJ, el radicalismo y el Frente Grande. Aclaró a ese respecto que sigue intacta la intención de edificar una confluencia "transversal".
Junto al dirigente cipoleño se sentaron los primeros candidatos a senador, Guillermo Grosvald, a diputado, Jorge Temporetti, y también quienes los secundan en la nómina: respectivamente Flavia Melni y Mónica Arcángelo.
Salto trató de posicionar su partido como referente de la "política sana" y aseguró que buscarán representar a "quienes tienen principios y no se han rendido a ningún régimen".
Grosvald, por su parte, dijo que desde la banca propiciará "un nuevo Senado, eliminando todos los privilegios, todo el gasto político". Otro de sus postulados es "el trabajo contra la impunidad" y el establecimiento de "penas y castigos", para que las empresas "que dan trabajo no reciban el mismo trato que las que toman privilegios y se retiran".
El dirigente local Jorge Temporetti explicó que el eje de la campaña será el perfil "federal" del MPP y la defensa de los intereses y necesidades de las economías regionales "como factor de reactivación".
Mientras tanto, ARI llega a las elecciones con mucha improvisación. Tanta que su candidato a senador Guillermo Urdínez, un hombre que viene de la ortodoxia del peronismo, tiene que esforzarse para recordar nombre y apellido de quien será su segundo para el Senado. "El que salió en el diario", acota.
Urdínez está entusiasmado con el modo en que se va conformando ARI en la provincia.
-Aun admitiendo que recién arrancamos, notamos que vamos a nutrirnos de gente proveniente de distintos puntos de la política y la sociedad. Llegan radicales desencantados con su partido, peronistas que no se sienten representados con el suyo y muchos sectores independientes que, lejos de sumarse al desencanto existente con la dirigencia, quieren militar -dijo Urdínez a este diario.
Y ya tiene un proyecto de ley a poner en marcha si llega al Senado.
-Voy a luchar por reivindicar la política. Para ello promoveré un proyecto de ley que castigue la hipocresía a la que apelan los políticos en sus discursos, o sea, y para dar un ejemplo, aquella gestión de gobierno que se contradiga con el discurso de campaña será castigada. No se puede permitir que que el político rompa el contrato social que lo liga con el votante -señaló el candidato a senador por ARI.

Foto: Ayer en Bariloche, Salto, Grosvald y Temporetti: Somos la oposición.