Martes 4 de setiembre de 2001

 

Implementan un duro ajuste en Anses

 

Las medidas anunciadas procuran bajar el presupuesto en 657 millones de pesos

  BUENOS AIRES- El gobierno anunció la puesta en marcha de un programa de ajuste en la Administración Nacional de la Seguridad Social que prevé un recorte presupuestario de 657 millones de pesos a través de una reestructuración administrativa y la reducción del fraude en cajas jubilatorias provinciales y asignaciones familiares.
Las modificaciones en el organismo que paga las jubilaciones, pensiones y asignaciones familiares se pondrán en práctica a partir del acuerdo que firmaron el Ministerio de Trabajo y la Jefatura de Gabinete y tienen su mayor oposición en el jefe del radicalismo, Raúl Alfonsín, que en todo momento resistió una intervención del cavallismo en la Anses.
Aunque en el convenio no figura la previsión de cesantías, los funcionarios del área se encargaron de aclarar que habrá despidos entre el personal que no logre justificar su sueldo. Esos despidos podrían afectar a militantes radicales que trabajan en la Anses y, de allí, las preocupaciones de Alfonsín.
El acuerdo-programa se firmó en un encuentro que contó con la participación de la ministra de Trabajo, Patricia Bullrich, del jefe de Gabinete, Chrystian Colombo, el gerente general de Anses, Douglas Lyall, el secretario pa-ra la Modernización del Estado, el frepasista Marcos Makón, y el secretario de Seguridad Social, Jorge Sanmartino.
Los alcances del convenio llegan al 31 de diciembre de 2002 -con una primera etapa que culminará el último día de este año- y apunta a lograr "una mayor eficiencia, eficacia y calidad en la gestión".
En la presentación del acuerdo, en la cartera laboral, Bullrich dijo que la iniciativa forma parte de "una transformación imparable de la administración de los servicios de seguridad social" y apunta "a la democratización del organismo".
También hizo una indirecta mención a las fuertes críticas de Alfonsín por el manejo del organismo al reclamar que se deje a la Anses "afuera de batallas políticas".
La funcionaria llamó a la dirigencia empresaria a tomar "fuerte conciencia social y responsabilidad social para la limpieza" de sus padrones de empleados, donde la cartera detectó casos de fraude en asignaciones familiares.
En ese sentido, explicó que se puede practicar un ahorro de "364 millones de pesos" en ese tipo de beneficios.
Entre los ejes de la reestructuración, mencionó la "bancarización total del sistema con un ahorro de 78 millones de pesos en lo que se paga por transferencias bancarias", la implementación de un sistema de "premios y castigos" para garantizar el cumplimiento de las obligaciones previsionales por parte de los empresarios y una "lucha frontal contra la litigiosidad".
"Algunos estudios jurídicos se llenan los bolsillos con la plata de los jubilados", se quejó. (Infosic/AR)
   
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