Viernes 31 de agosto de 2001

 

Piensan cambiar el plan de manejo de Paso Córdoba

 

Un proyecto, que todavía está en estudio, privilegia la sectorización del uso de esa zona del ejido roquense con el objeto de preservar el ecosistema y dirigir el uso recreativo y productivo.

  ROCA (AR).- A partir del año que viene, el área protegida de Paso Córdoba no será la misma de ahora si prospera un proyecto de reformulación y uso de la zona pautado entre el municipio, grupos ecologistas y otras instituciones de Roca. Concretamente la iniciativa está destinada a potenciar el uso del área como un espacio de esparcimiento que tenga en cuenta la preservación de ese patrimonio ecológico y cultural. La inversión -según indicaron fuentes- se financiará con la contraprestación de servicios incluida en la licitación de la bodega Escorihuela, en caso de que llegue a instalarse en las 300 hectáreas de Paso Córdoba.
Para ello, se establecieron una serie de condiciones que deberán respetar los diferentes sectores para equilibrar el uso del espacio -sin alterar el ecosistema- con las actividades recreativas y deportivas que usualmente se hacen en el área protegida, específicamente en el lote 11 y 10 del ejido municipal.
El plan de manejo comprende un trabajo de inversión en nueve zonas como la del Valle de la Luna Rojo; Cañadones Rojos; Sector de bajadas de lanchas; Bardas; Zona para actividades productivas; Referencias históricas; Club Náutico; Zona para el circuito de enduro, motocross, areneros y cuatriciclones y caminos y circulaciones.
En cada una de ellas los ecologistas y el municipio acordaron el grado de impacto que tendría sobre el medio ambiente cualquier actividad que se lleve adelante como por ejemplo el parapentismo, trekking o cabalgatas. Por citar un ejemplo la zona de los Cañadones Rojos tendrá un uso restringido, lo que implica que no se permitirá el ingreso de vehículos a ese lugar, incluso con motos y bicicletas. Sin embargo, algunas de las actividades toleradas y propuestas serán las caminatas de interpretación ecológica con señalizaciones en el área, junto a personal capacitado que guiará a los interesados en conocer la zona.
De todas maneras, a fin de año el proyecto comenzaría con el control en la zona por las guardias ambientales que estarán facultadas para labrar infracciones en caso de que se produzcan daños en el medio ambiente –como arrojar basura– .
Pero uno de los puntos más destacados es el que prevé las zonas destinadas para emprender proyectos productivos.
En este tipo de lugar, el plan de manejo únicamente propone actividades como el cultivo y la ganadería. Además, se contemplarán sólo aquellos proyectos productivos primarios, teniendo la prioridad aquellos que sean destinados a potenciar el agroturismo.

Darían cabida a los residentes

La comunidad mapuche Leufuche, los crianceros y residentes que viven en el área protegida de Paso Córdoba también podrán formar parte del proyecto. La idea es integrar a esas comunidades para que ellas mismas participen de la oferta ecoturística que podrá ser brindada a los futuros turistas que visiten el lugar.
Las integración implica el reconocimiento de las actividades culturales como también la cría tradicional extensiva de ganado que desde hace más de cincuenta años vienen desarrollando los crianceros en el área ribereña.
Ellos, más que nadie han procurado un uso ecológico de la zona que coinciden con las que el municipio propone como normas generales. Un ejemplo de ello es la prohibición de "atrapar, molestar o afectar la vida y el desenvolvimiento normal de todo lo competente a la fauna autóctona. (AR)

   
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