Viernes 24 de agosto de 2001 | ||
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Más de mil jóvenes curiosearon universidades |
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Oferta pública y privada patagónica reunida hasta hoy en Cipolletti. |
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CIPOLLETTI (AC) - "Yo tenía decidido quedarme en la zona, pero ahora quiero ver las posibilidades de Córdoba y Buenos Aires. No sé. Tal vez siga Medicina. No estoy segura todavía", dijo Lucía Martina, una bella e inquieta estudiante, mientras recorría con varias compañeras los stands de la II Exposición de Universidades Patagónicas (públicas y privadas) que comenzó ayer y se extenderá hasta hoy por la tarde en el Instituto Julio Krause, organizada precisamente por la Fundación Krause. Más de mil chicos y chicas, y muchos padres y profesores, convergieron ayer durante toda la jornada al instituto, buscando datos, materiales, folletería, direcciones de e-mail e intercambiando opiniones con los representantes de las casas de altos estudios y de los institutos terciarios que sostienen la importante convocatoria. El acto inaugural se hizo en el aula magna, ante unos 600 alumnos, al igual que profesores de la ciudad y la zona, con la ministra rionegrina Ana Mázzaro, el intendente (en uso de licencia) Julio Arriaga y la presidenta de la fundación, Marta Krause. Tanto Mázzaro como Arriaga ponderaron la iniciativa de la Fundación Krause y coincidieron en la importancia de eventos de estas características para afianzar la vocación de estudio de los jóvenes. Marta Krause enfatizó que "todavía existen en nuestro convulsionado medio intereses que no se agotan en lo material, iniciativas culturales que dan a la vida y al mundo un sentido que entusiasma. La educación superior ha dado sobradas pruebas de su capacidad para transformar y propiciar el cambio y el progreso en la sociedad". Y agregó que "en este desafío nadie tiene que sentirse excluido. Hay que reconstruir el país para que sea, como alguna vez lo fue, uno de los más prósperos y prestigiosos del mundo, al que todos querían llegar y del que casi nadie quería irse". En la muestra, chicos con uniformes de colegios se entremezclaban con los que llegaban de tono informal. Había uno, de Roca según dijo, con mochila al hombro, pantalones sueltos y poderosas "pantaneras" que pensaba registrar todo lo que tuviera que ver con temas contables, economía, administración de empresas. "De chico quería ser abogado. Pero desde segundo año me tiraron los números. Termino y quiero hacer la experiencia de estudiar afuera", comentó, sin muchas ganas de comentarios que lo distrajeran de su investigación sobre carreras y universidades. ¿Sabés si aquí dan becas?, preguntó Juan Raúl, cipoleño, de un nocturno, aclaró. Se enteró que la ocasión no daba para un trámite así y continuó buscando "algo sobre antropología". Lito, Juan Manuel, Carlos y Esteban entraban con la obsesión de hallar datos acerca de salidas superiores en informática, computación y afines. "Voy a ser analista de sistemas y después haré un posgrado, en lo posible en Estados Unidos", se agrandó Esteban. La muestra El público -chicos, profesores, delegaciones de colegios- tomaron el itinerario de los stands desde las 9.30 hasta las 18.30. En el contexto de las actividades programadas el licenciado Fernando Onetto, en el aula magna, desarrolló el tema "Los jóvenes de hoy ante el futuro y el concepto de misión personal". En tanto, "Los jóvenes y la universidad. ¿Qué estudiar?. Una decisión compleja", fue el panel del día, con Juan Martín (Universidad de Cuyo), Ana Teste (Universidad Austral, Buenos Aires), entre otros, que respondieron las inquietudes estudiantiles, de profesores y padres. A las 9 de hoy la muestra se abrirá de nuevo, siempre hasta las 18.30, y a posteriori tendrá lugar la clausura. Desde las 11 el profesor Guillermo Obiols disertará respecto de "Aprender a ser: la existencia ante la crisis de la escuela y la sociedad". Están en el instituto de ruta 22 y calle Krause representaciones del Instituto Balseiro, de las universidades nacionales de Córdoba, Cuyo, La Pampa, Entre Ríos, Del Sur, Argentina de la Empresa, la Universidad Favaloro, la Austral, la del Museo Social Argentino, el Instituto Provincial de Educación Terciara y la Escuela de Bellas Artes de Neuquén, entre muchas otras entidades. La primera edición, la del 2000, recibió el apoyo de unos 3.000 estudiantes, en su mayoría cercanos al nivel de egreso secundario. Por lo que se vio ayer, este año la afluencia de futuros profesionales puede ser mayor aún, en un dato que desde el Krause ya se anticipó como "positivo y esperanzador". |
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