Martes 7 de agosto de 2001 | ||
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Una familia sustituta podría hacerse cargo del chico golpeado |
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CIPOLLETTI (AC).- El destino final del chiquito de 8 años que sufrió severos malos tratos en el seno del hogar que compartía con su padre y su madrastra sería el de una familia sustituta. La nueva alternativa partió de la Defensoría de Menores en función de una serie de actuaciones llevadas a cabo desde hace tiempo, pero que se potenciaron a partir del 17 del mes pasado, fecha en que la directora de la escuela 283, Mabel Rigoni, llevó al niño al hospital para su inmediata atención, y denunció el caso, al igual que lo había hecho la directora de la anterior escuela a la que concurría el pibe, Graciela Bugallo. La decisión está en manos del titular del Juzgado en lo Civil y Comercial 7, Alejandro Cabral y Vedia. Consultado ayer este magistrado no quiso adelantar nada al respecto, pero confirmó que tiene una propuesta en estudio y que va a resolver la cuestión a más tardar la semana entrante. El chiquito llegó el martes 17 a la escuela con síntomas de abandono y de golpes, incluso con heridas infectadas. Aferrado a las piernas de la docente, espantada por el cuadro que tenía ante sus ojos, el nene le rogaba que no lo devuelva a su casa. "Tengo mucho miedo, me pega, por favor no quiero volver a casa", era el ruego del purrete. Hubo en este caso acusaciones encontradas: el padre negó cualquier responsabilidad, la madrastra acusó al padre -ya no es su pareja porque se separaron después que se desató el escándalo- y la madre biológica, en Allen, sindicó al padre y a la madrastra como los golpeadores. El alto grado de certeza de que presuntamente pudieron haber responsabilidades compartidas en el calvario que soportó el chiquito estaría inclinando la balanza hacia una familia sustituta. Esa familia en realidad quiere recuperar el nene, porque ya lo había contenido, hasta hace poco más de dos años. Entonces, el padre hizo valer sus derechos y lo retuvo. Además, la familia también está dispuesta a acoger a la hermanita del chico, de 12 años, que actualmente vive con el padre. Una fuente cercana a la Defensoría de Menores confirmó que se le había elevado a Cabral y Vedia la propuesta de que el nene vuelva a esa familia sustituta. Mientras, las acciones judiciales en este intrincado asunto corren por cuerdas separadas. Cabral y Vedia debe resolver en qué lugar y con qué grupo familiar vivirá el nene -que sigue internado en el hospital, ya recuperado, con su padre como única visita- mientras que la jueza Margarita Carrasco, en el fuero Penal, lleva adelante la causa para detectar quién o quiénes lo golpearon y lo sometieron al flagrante abandono, para avanzar en los procesamientos pertinentes. |
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