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Martes 7 de agosto de 2001 | |
No justifican más erogación |
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Para el intendente cipoleño no se debe seguir permitiendo la radicación de pobladores sobre las costas. |
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| CIPOLLETTI (AC) - El presidente de la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas, Horacio Collado, dijo ayer coincidir "en líneas generales con las apreciaciones del doctor Rajneri", en relación a la nota publicada el domingo, donde el director de "Río Negro" señalaba que las lluvias y nevadas no auguran un buen pronóstico para las saturadas represas y los caudales. En función de esa situación consideraba preferible "erogar más agua ahora y no lamentar graves perjuicios económicos después". Sin embargo, Collado advirtió que la AIC es el órgano ejecutivo por excelencia, que trabaja en forma conjunta con las provincias y que tiene peso a la hora de las decisiones sobre el manejo del agua. "Lo más rápido que se pueda aliviar la situación de los mayores caudales es lo más conveniente para el sector productor, y para todos", dijo en el sentido de que la erogación de los actuales caudales -altos- por Arroyito y El Chañar "implica un esfuerzo para el sector productivo, pero sin damnificarlo, porque, aparte, no hay otras alternativas para la operación de los embalses". No obstante precisó que "erogar mayor cantidad de agua que la que estamos erogando implica dañar a las chacras, porque hay algunas que se están destruyendo. Y hay rotura de acequias, obras de arte, bocatomas, que involucra una infraestructura que implica mucho dinero para el estado". Para Collado no hay mucha afectación en sectores urbanos, porque los que han sufrido las consecuencias "son pocos y están acotados". Y llegar a un escalón avanzado de áreas urbanas "no es la hipótesis ni la situación que se maneja". En ese contexto Collado dijo que se mantendrá la tendencia en baja, que hoy el río Limay conducirá 1.500 metros cúbicos por segundo, y 600 el Neuquén, por lo que el Negro no superará los 2.100 metros. Y día a día irá bajando entre 40 a 50 metros cúbicos por segundo. Para Collado no se justifican mayores erogaciones ahora que las que ya se dieron porque cada vez hay más disponibilidad en los embalses. Por medio de su secretario de Gobierno, Alberto Weretilneck, el intendente Arriaga hizo saber que lo sucedido este año "nos debe enseñar a todos -la AIC, provincias y municipios- cuáles son los riesgos que implica no tomar las medidas que hay que tomar y con la suficiente antelación". Por otro lado Arriaga acordó que en las actuales circunstancias se debe erogar "toda el agua que se pueda, aún sabiendo los perjuicios que esto causa a los pobladores ribereños y productores, porque es el mal menor". Esto, porque de otra forma el deshielo podría encontrar las represas llenas y una erogación masiva en esa época sí sería alarmante. Para Arriaga, lo sucedido marca también la inconveniencia de seguir permitiendo radicaciones de pobladores sobre las costas, aunque reconoció que con los que están nada se puede hacer, en especial en Cipolletti, y en los barrios La Costa Norte y Sur, y Labraña, donde viven más de 3.000 personas. |
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