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Jueves 30 de agosto de 2001 | |
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La AIC quiere revisar el plan de manejo del agua |
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El organismo planteará al subsecretario de Energía de la Nación la necesidad de compatibilizar intereses entre empresas generadoras, productores y habitantes aguas abajo de las represas. |
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| CIPOLLETTI (AC) - El comité ejecutivo de la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas (AIC) se reunirá la semana que viene con el subsecretario de Energía de la Nación, Alejandro Gallino, para plantearle la necesidad de revisar la norma de manejo del agua en los ríos Limay y Neuquén de tal manera que quede contemplado el impacto de las crecidas y las sequías extraordinarias, sobre la base de la experiencia de este año. El presidente del organismo, Horacio Collado -representante de Río Negro- anticipó a este diario que le dirán a Gallino que es necesario hacer compatibles los intereses de las empresas que generan hidroelectricidad y los de los productores y habitantes asentados aguas abajo de las presas. Elías Sapag (h), representante neuquino en la AIC, dijo que de haberse aplicado las normas durante los picos de crecidas de este año, las consecuencias habrían sido mucho más graves. Puso como ejemplo que por el río Limay llegaron a pasar 1.750 metros cúbicos por segundo con enormes consecuencias para los pobladores y las tierras ribereñas, pero que la norma habría permitido una erogación aún mayor. "La idea es modificar la norma de manejo de agua para hechos excepcionales, y no hablo solamente de crecidas, sino también de períodos de sequías", dijo el neuquino. Sapag recordó que el Estado federal es el dueño de las concesiones que se otorgaron a empresas privadas en la primera mitad de la década del 90. Por ello -señaló- debe ser la secretaría energética nacional la que pacte un cambio en las reglas de juego con las operadoras de las centrales. "Es necesario incluir el pronóstico de derrames al programa de despacho eléctrico", explicó Collado, desde Viedma, para apoyar su teoría sobre la compatibilidad. Para el rionegrino no es necesario echar mano al contrato de concesión. Distinta opinión tiene Sapag, que impulsa una revisión de esos instrumentos, aprobados cuando las presas de Hidronor pasaron a manos privadas. Collado no lo planteó como tema de discusión con la subsecretaría de Energía nacional, pero el neuquino sí: dijo que impulsarán una modificación del régimen de sanciones que la Autoridad de Cuencas le impone a las operadoras de las centrales hidroeléctricas. Además, éste se mostró partidario de crear "un eficiente mecanismo de mitigación del daño". La de este año fue la primera crecida grande en la cuenca desde la privatización. Se trató de hechos que la AIC considera excepcionales porque es complicado pronosticar la cantidad de lluvia que puede caer sobre la cuenca. Distinto ocurrirá en la época de deshielos (en la primavera) cuando es mucho más sencillo prever las consecuencias sobre los caudales de los ríos. La reunión con Gallino está programada para el martes, en la ciudad de Buenos Aires. |
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