Sábado 25 de agosto de 2001

 

Más de 700 personas abrazaron la facultad de Roca

 

Se movilizaron por la ciudad y visitaron dos sucursales bancarias.

  ROCA (AR).- Tomados de la mano, con el pecho y los ojos de frente a la universidad "y de espaldas a los que la quieren destruir". Bajo esa consigna, más de 700 personas realizaron ayer un abrazo simbólico al edificio de la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la Universidad Nacional del Comahue en Roca.
En una jornada en la que primaron las expresiones de solidaridad entre todos los sectores afectados por el ajuste del gasto público impulsado por los gobiernos nacional y provincial, las calles de esta ciudad se vieron pobladas de manifestantes durante la mañana. Llegados desde varias ciudades del Alto Valle, estudiantes, docentes, no docentes, jubilados, y otros estatales se concentraron en avenida Roca y Tucumán para iniciar una ruidosa marcha que los llevó frente a las sucursales de los bancos Patagonia y Nación.
Mientras que en el primero protestaron y lanzaron duras críticas hacia su directorio, en las oficinas de Tucumán y Sarmiento realizaron un minuto de silencio y exigieron que "no lo dejen morir".
La columna siguió su paso por Tucumán hasta Mendoza y allí giraron al norte con destino a la facultad. A medida que avanzaron hacia la casa de estudios se sumaron más personas, que fueron escoltados por decenas de automóviles. Así se trasladó el grueso de los trabajadores de Anses, DGI, INTA, PAMI y Ministerio de Trabajo de la Nación, que organizaron una "caravana por la dignidad".
Antes de llegar a la facultad hubo tiempo para comunicarle al gobernador Pablo Verani que "no le tenga miedo a los trabajadores, porque sólo están reclamando por sus derechos". Ocurrió en Mendoza y Villegas, a casi 100 metros de la casa del mandatario, que estuvo custodiada por 70 efectivos de la Policía de Río Negro.
Pasadas las 12.30 comenzó el acto en el patio de la facultad. Primero habló el presidente del centro de estudiantes, Matías Pordomingo.
Luego subieron al escenario el profesor Dardo Sardá, la jubilada Rosa Cerda, Jaime Arce de Anses, cerrando el decano Sergio Barotto.
"No sabemos qué sueldos vamos a cobrar. Hoy me preguntaron qué va a a pasar con las becas y las residencias y sólo puede transmitir incertidumbre. Yo estoy en la universidad desde 1983 es la primera vez que sucede un hecho institucional y político de esta magnitud", sostuvo el decano, que a pesar de la gran concurrencia se mostró preocupado porque la facultad tiene casi 5.000 alumnos y 200 docentes y esa representación no estuvo ayer en el acto.
Antes de cerrar advirtió que "el que hoy en la Argentina, habiendo usufructuado los beneficios de la educación pública, se ponga la camiseta del arancel es un traidor". Tras las palabras de Barotto llegó el abrazo y una choripaneada de solidaridad.

Iglesias cristianas marcharán contra el ajuste en Neuquén

NEUQUEN (AN).- Las iglesias cristianas de Neuquén se congregarán el domingo a las 16 en una inédita marcha conjunta por "la vida, la justicia y la dignidad" que tendrá como epicentro el centro de esta ciudad. Allí las distintas congregaciones cristianas se manifestarán en "contra de los ajustes, de la exclusión y de la miseria" que afectan a buena parte de los argentinos.
La celebración ecuménica será seguida por una marcha de antorchas en defensa de la universidad pública y de la cultura. Al cabo de la caminata habrá un festival artístico.
Los curas y pastores elaboraron un documento que se leerá durante la manifestación que reclama por los más necesitados y le pide a los gobernantes que "gobiernen para la gente y no para los mercados", explicó el padre Juan San Sebastián, párroco del barrio Ciudad Industrial Jaime de Nevares.
La concentración está prevista para las 16 en el monumento a San Martín. Desde allí los fieles de cada una de las iglesias -católica, bautista, evangélica metodista- marcharán pacíficamente por avenida Argentina hasta el monumento a la Madre, para desde allí regresar por la misma arteria al punto de partida.
"Frente al tobogán en que se encuentra la gente nosotros reclamamos y también le damos un mensaje de esperanza que tiene que ver con la solidaridad de todos y cada uno", expresó San Sebastián.
Si bien Neuquén tiene toda una tradición de manifestaciones ecuménicas, hasta el momento nunca hubo una marcha en contra de los ajustes y apuntada directamente a los gobernantes.
El encuentro fue promovido por la iglesia católica que encontró eco inmediato en las diferentes comunidades cristianas de Neuquén.
"La desesperación de la gente se refleja en cada una de las iglesias, y hay mucha gente que desde hace tiempo nos venía pidiendo que no sigamos callándonos y que hablemos de lo que está pasando. Hay muchas cosas que se dicen hacia dentro de las comunidades cristianas y que ahora queremos hacer públicas", se explayó Carlos, uno de los colaboradores de San Sebastián.
El acto principal se hará en la explanada de la avenida Argentina donde habrá un acto religioso en el que estarán curas y pastores. Luego, dirigentes de las iglesias leerán el documento que refiere "a la crisis que castiga al pueblo".
El cierre del encuentro ecuménico estará a cargo de los grupos musicales de las distintas comunidades que protagonizarán un festival donde el mensaje principal será abrir las puertas a la solidaridad cristina.
La manifestación cristiana será seguida a las 19 por una marcha de antorchas y una presentación artística en defensa de la universidad pública.

Cansados de esperar, ocuparon los quirófanos

NEUQUEN (AN) - Hartos de esperar que la constructora que realizó remodelaciones entregara las obras, el directorio en pleno del hospital Castro Rendón, con su director José Russo a la cabeza, ocupó los quirófanos y le dio un giro inesperado a un conflicto que desde hace varios meses enfrenta a la empresa que realizó los trabajos y el gobierno provincial. Con un cerrajero como ariete, los directivos del establecimiento se abrieron paso para dar por terminada una historia de enredos que lleva ya varios capítulos, destrabaron las puertas y cambiaron las cerraduras.
"No vamos seguir esperando más, no hay argumentos válidos para seguir aceptando dilaciones que nos impiden disponer de los quirófanos. Como autoridades del hospital, tomamos las instalaciones y vamos a impedir que la empresa ingrese al lugar", le informó Russo a lo miembros de la Junta Interna del nosocomio.
Los empleados espontáneamente respaldaron la sorpresiva medida, aunque cuestionaron a los funcionarios provinciales, empezando por el gobernador y funcionarios del área de Salud, que "no cumplieron con sus promesas", dijeron.
Russo dijo que hace seis meses que el hospital se ve privado de prestar los servicios de quirófano por sucesivos incumplimientos de la constructora Zoppi, responsable de los trabajos. "Si hay un reclamo -de la empresa-, por los temas que sea, los tendrá que resolver con Obras Públicas, ese será otro tema, pero no podemos seguir destinando 70.000 pesos por mes derivando pacientes a clínicas privadas", dijo Russo.
Desde que los quirófanos fueron inhabilitados, en marzo del año pasado, se lleva gastado más 1.500.000 en derivaciones. Las remodelaciones fueron por alrededor de 1.300.000 pesos, pero los trabajos no se hicieron de acuerdo a las exigencias de los pliegos y debieron efectuarse refacciones. Allí se generaron planteos de gastos adicionales por parte de la constructora que, hasta donde se sabe, el gobierno se resiste a reconocer.

   
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