Lunes 20 de agosto de 2001

 

De "colosal estructura" a virtual "elefante blanco"
 

El edificio del ex BPRN, en pleno centro de Roca, está vacío.
  ROCA (AR).- Quienes hace casi 25 años asistieron a la inauguración de la "colosal estructura" destinada a ser eterna sede del Banco Provincia de Río Negro, difícilmente hayan imaginado que en estos días el banco ya no exista, el edificio permanezca cerrado y nadie sepa muy bien cuál va a ser su destino.
Los últimos que atendieron en el local construido en 1978 con "las más modernas y funcionales técnicas arquitectónicas" prefirieron la sede propia antes que tener que afrontar los más de 4.500 pesos por mes que cuestan sólo los servicios de gas y luz, sin incluir el agua ni los gastos de mantenimiento del lugar.
Sólo de lunes a viernes y en un horario que se extendía hasta pasado el mediodía, el banco consumía electricidad por un costo superior a 3.600 pesos por mes. A eso se sumaban los más de 900 pesos que significaban los 8.000 metros cúbicos de consumo de gas, también en un período de treinta días.
En su momento el edificio fue diseñado con el objetivo de que sólo sea una institución bancaria la que ocupe por siempre las instalaciones, que fueron realizadas "con todas las comodidades que la moderna técnica y el Banco Central exigen", tal cual señaló al presentar la obra el ingeniero responsable de la idea.
Sin embargo, en la actualidad es precisamente ese detalle el que se vuelve en contra del "monumental edificio", que no encuentra empresas interesadas en alquilar un salón que al estar dividido en varios pisos, sin acceso para discapacitados, y con altísimos costos de mantenimiento hacen casi imposible la comodidad para el desplazamiento de los potenciales clientes y alejan cada vez más las posibilidades de alquiler para la provincia.
De los tres niveles con los que fue inaugurado el edificio, que cubre una superficie cercana a los 3.000 metros cuadrados, al inferior se destinaron los tesoros, archivos y cajas de seguridad. Ese precisamente sería el objetivo que persiguen los directivos del Banco Patagonia que, luego de soportar todo tipo de críticas de sus clientes por la falta de espacio en la sede nueva, están pensando en alquilar ese sector de la estructura.
Los otros dos niveles estaban destinados al despacho público, oficinas de directivos y secretarías.
Cuando el ex-banco provincial fue inaugurado, en diciembre de 1978, el clima existente para nada hacía pensar en la realidad actual. En el discurso inaugural, el entonces ministro de Economía provincial Pablo de Estrada celebró que la apertura llegue en "este momento particular de la vida de la institución en que su crecimiento comercial toca cifras no recordadas históricamente, en que crecieron los depósitos y los préstamos y estamos ubicados en el séptimo lugar entre los bancos provinciales".
Casi 23 años después, el sabor es más que nada de derrota. El que fuera "orgullo de los rionegrinos" acumula tierra, quedó deshabitado y luego de que el Banco Patagonia se mudara hace pocas semanas, el gobierno provincial intenta convertirlo en sede de cuanta oficina pública reclame espacio.
De acuerdo con lo informado, por estos días se está definiendo si la justicia provincial o Acción Social son los organismos que finalmente van a hacer uso del gigante que con los años se convirtió en emblema de otros tiempos.
   
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