Lunes 20 de agosto de 2001

 

Les piden calma a los comerciantes de Cipolletti

 

El eventual condicionamiento del municipio a entregar las habilitaciones comerciales al cumplimiento en el pago de las tasas generó reclamos. Hay 1.500 comerciantes en problemas.

  CIPOLLETTI (AC)- Sigue al rojo la polémica por la ordenanza que está a punto de sancionar el Concejo Deliberante, elevada por el Ejecutivo municipal, que relaciona las habilitaciones de comercios con el cumplimiento del pago de las tasas en ese rubro.
La habilitación deberá renovarse año a año, dice el proyecto, y hay doce meses de plazo a par-tir de la sanción para adaptarse a un plan de cancelación de deu- das. Si no se hace este trámite, caducará la habilitación y se dará de baja al local.
Por mes, el municipio recauda casi 120.000 pesos por esa tasa. Tomando como base que los morosos adeudan más de 2.500.000 pesos, surge el dato de que ese monto significa más de 22 ejercicios municipales en cuanto al tributo de Seguridad e Higiene para el Comercio se refiere.
"Se pretende que los contribuyentes que deben se acerquen, expresen su situación económica y utilicen la gran cantidad de variantes, en planes de pago, para su regularización, Nadie apunta a un cierre de locales", puntualizó, en un intento de transmitir calma para los comerciantes, el secretario de Hacienda, Isaías Kremer.
"Nosotros no somos refractarios al pago. Pero la actual situación económica condiciona a mucha gente. Sabemos que hay unos 1.500 comerciantes con problemas en ese tributo. Y no se los puede "apretar" con presiones recaudatorias exclusivas y excluyentes", se dijo desde la Cámara de Industria y Comercio, por medio de un calificado vocero.
En tanto, sobre el paréntesis que se impuso hasta mañana la comisión de Hacienda, pedido por la CIC, para producir un despacho, se supo que "es casi imposible" que surjan variantes al proyecto original.
"Si de 2.800 comerciantes, 1.900 están pagando al contado o en planes, una mínima parte con atrasos casi insignificantes, no se puede pretender que por los morosos se modifique un proyecto que ha sido trabajado contemplando los intereses del sector, porque hay facilidades múltiples", destacó un funcionario de rango menor al que ostenta Kremer pero con acceso directo a la intendencia.
Kremer reconoció la existencia de problemas económicos pero reflexionó en el sentido de que ellos afectan tanto a los que están al día con sus tributos -grandes, medianos y pequeños comerciantes- como a los que no lo están, sustentando así la vigencia del proyecto que, de no mediar una circunstancia extraordinaria, podría convertirse en ordenanza en la sesión ordinaria del jueves venidero.
La estadística -de acuerdo con fuentes extraoficiales, pero próximas al área de Hacienda- referencia que el padrón comercial se compone de 2.825 contribuyentes. 847 están absolutamente al día; 476 deben sólo hasta tres cuotas; 207 adeudan hasta seis cuotas; 329 están endeudados en hasta doce cuotas, y 975 se hallan datificados como morosos concretos.
Se indicó desde la comuna que poco más del 60 % está pagando, lo que torna "por lo menos, no razonable" la postura del resto, se expresó.
"Nosotros no queremos aumentar la tasa de comercio, porque sería injusto para la mayoría que paga, y al fin para todos. Pretendemos entonces que los que no están pagando, lo hagan. Tendrán 12 meses, desde la sanción de la ordenanza, para acogerse a planes de pago. Incluso los hay por Acción Social cuando las situaciones son límites. Si la ordenanza sale y se promulga en estos días, tendrían hasta fines de agosto del 2002 para este trámite. Es accesible", manifestó Kremer.
De todas formas, la CIC hace sus cuentas por los 1.500 comerciantes que deben desde tres a doce o más cuotas.
"Esa es la realidad. La recesión, la baja en las ventas, no deberían ser disparadores para una mayor presión sino todo lo contrario. Nosotros no estamos en contra del pago, por supuesto, pero no son épocas para que se pongan en "duros", sino de buscar mayores plazos, lapsos intermedios en "blanco" y aún alguna especie de moratoria para casos puntuales", dijeron voceros de los comerciantes.
En la misma franja de la CIC se halla el Centro de Empleados de Comercio. Entre mañana y el martes habrá una reunión de directiva para expedirse en contra de "presiones tributarias", porque "si ya tenemos mucha gente en la calle, eso aumentará la desocupación".

   
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