Miércoles 15 de agosto de 2001 | ||
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Los ejercicios militares se hacen sólo en maquetas |
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Por el ajuste, la guarnición de Zapala no llevará los cañones ni el personal al campo. La actividad en el cuartel se reduce a los horarios en que hay luz natural. |
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ZAPALA (AZ/AN).- En la Guarnición Militar Zapala está prácticamente prohibido encender la luz, y la calefacción es un lujo. Por eso las actividades comienzan tarde, a contrapelo de la tradición militar que manda tocar diana antes de que salga el sol. No sólo esa costumbre se perdió: también la de desplegar ejercicios tácticos en el campo; ahora los oficiales mueven tanques y cañones en una maqueta. "Resolvimos dejar sin efecto la totalidad de los ejercicios de tiro y desplazamiento previstos hasta diciembre", dijo ayer el teniente coronel Alejandro Díaz Bessone, jefe del Grupo de Artillería. El motivo es el drástico recorte presupuestario, el mismo por el cual tiene las persianas de su oficina abiertas para iluminarse con luz natural. Como se informó ayer, el recorte presupuestario anunciado para las guarniciones militares de todo el país ya hace sentir sus efectos en la región. En esta ciudad el Ejército impulsó medidas drásticas para disminuir los gastos: licenciarán temporalmente a un sector de los cuadros; reducirán a su mínima expresión el mantenimiento del parque vehicular; las jornadas de trabajo se redujeron a la mitad y empiezan a las 9, cuando está garantizada la iluminación natural y el frío empieza a ceder sin necesidad de calefactores. El jefe de la Sexta Brigada, general Adolfo Cabrera, recorrió ayer las unidades de la zona y dialogó con los efectivos para interiorizarlos de la situación. Los instó a "redoblar esfuerzos pese a las dificultades". La "inactividad parcial", como el propio jefe del Ejército, general Ricardo Brinzoni, definió al recorte del 75 por ciento en las partidas de gastos, obligó a todas las unidades del interior a replantear sus actividades. Por el ajuste cayeron, por ejemplo, los ejercicios de tiro programados en el campo. Díaz Bessone explicó a "Río Negro" que las maniobras de táctica militar se desarrollarán en maquetas a escala para evitar el traslado de efectivos y armamento. "Antes esta modalidad era sólo un complemento para los oficiales, mientras que ahora es la única alternativa", señaló. Si bien el adiestramiento que los artilleros recibieron durante años de entrenamiento no se pierde en forma instantánea, una prolongación del cese de actividades traería mayores problemas. "La sofisticación del armamento requiere una perma- nente capacitación", indicó Díaz Bessone. El parque automotor también sentirá el achique. La escasez de repuestos determinó que los traslados se midan, de aquí en más, con cuentagotas. El general Cabrera visitó las unidades el lunes y ayer, y se reunió con los jefes de cada sección para explicar los alcances del ajuste. Mantuvo encuentros con los cuadros para impulsarlos a "mantener los esfuerzos pese a las dificultades". En esta ciudad el panorama es preocupante para el comercio, que ve disminuir todavía más sus ventas. Los negocios se nutren, en un porcentaje nada despreciable, del dinero que gastan las unidades de Zapala, Primeros Pinos, Mariano Moreno y Las Lajas. En los cuarteles hay unos 1.000 hombres cuyos salarios se vieron afectados por el recorte; el 35 por ciento cobra alrededor de 400 pesos y ya tenía muy restringida su capacidad de consumo. Desde la Cámara de Comercio se evidenció un creciente malestar y el intendente Raúl Podestá advirtió acerca de las "nefastas consecuencias que este tipo de medidas recesivas". |
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