Martes 14 de agosto de 2001

 

No habrá repavimentación de rutas provinciales

 

Las prioritarias eran la 65 -desde Roca a Cipolletti-, la 6 -desde la rotonda al puente de Paso Córdoba- y la 70 -desde Cinco Saltos al lago Pellegrini. Pedranti confirmó que no hay recursos.

  ROCA (AR).- Si usted es uno de los que habitualmente viaja por las rutas provinciales del Alto Valle, ármese de paciencia antes de seguir leyendo. El titular de Viarse, Miguel Pedranti, confirmó ayer que el ajuste económico también tocó a la empresa y por varios meses más el estado de los caminos seguirá siendo deplorable.
El proyecto para repavimentar las rutas 65 -desde Roca a Cipolletti-, 6 -desde la rotonda al puente de Paso Córdoba- y 70 -desde Cinco Saltos al lago Pellegrini, tuvo que ser postergado por la falta de recursos.
En consecuencia, la única solución para los casi intransitables tramos de estas vías provinciales será el bacheo que realizan las máquinas de la empresa vial por estos días. Como se sabe, esto y nada es prácticamente lo mismo porque este tipo de reparación se hizo ya numerosas veces y el resultado es siempre el mismo: un par de lluvias y en pocas semanas los "cráteres" reaparecen en escena, provocando la ira de los conductores.
Vehículos transitando por la banquina para esquivar los pozos, bruscas frenadas para aminorar el impacto de un bache imprevisto y riesgosos "volantazos" forman parte de la imagen que muestra hoy cualquiera de las rutas provinciales en el Alto Valle.
La situación empeora si la visibilidad es escasa o nula, dejando a los conductores librados sólo a su suerte.
Si a esto se suma que en la ruta 65, la más transitada de las vías en cuestión, las banquinas son prácticamente inexistentes, el panorama oscurece aún más y las posibilidades de sufrir un accidente se multiplican.
"Es una trampa mortal. Si esquivás el pozo hacia la derecha terminás adentro de un desagüe o en una chacra y si volanteás para la izquierda rezá para que no venga nadie de frente. La otra alternativa es pasar sobre el pozo, pero algunos son tan grandes que corrés el riesgo de reventar un llanta y matarte igual", analizó indignado un viajante que todos los días usa la 65, más conocida como la "ruta chica" para llegar a los comercios que atiende.
Por su parte, Pedranti indicó que se está haciendo un mantenimiento rutinario porque "no tenemos otra alternativa".
"En esos lugares hay que repavimentar y por eso nos instalamos en Allen, porque eran prioridades. Lo que pasó es que hubo dificultades en la puesta a punto de la planta. De cualquier manera, el ajuste complicó la situación. El programa estaba previsto para terminarlo antes del 31 de diciembre, pero lamentablemente no podrá ser así", agregó.
En consecuencia, el titular de Viarse indicó que se decidió con la Gerencia de obras y estudios de proyectos cambiar sólo el asfalto de los tramos más deteriorados de la 65 y la 6. "Dentro de unas semanas se analizará cuánto dinero disponibles tenemos y a partir de eso definiremos qué tramo se repavimentará", sostuvo Pedranti.
El funcionario agregó que la obra se completará en forma paulatina, agregando desde fines de agosto el pavimento caliente de cinco centímetros de espesor en sectores de tres o cuatro kilómetros hasta finalizar el programa previsto. "La intención era hacer todo de una sola vez, pero la crisis imposibilitó nuestro deseo", comentó el titular de la empresa vial rionegrina. De acuerdo con lo informado, la inversión necesaria para las obras en las tres rutas es cercana a 1,5 millón de pesos.
Desde Viarse se anunció también que darán nuevo impulso a la venta del pavimento producido en la planta de Allen hacia otros puntos del país.
Como se recuerda, meses atrás hubo reuniones entre los responsables de la firma vial y el municipio neuquino para llegar a un acuerdo en este sentido.
La alternativa para llegar desde una ciudad a otra es la ruta 22, aunque los riesgos no disminuyen. Los peligros por los pozos de los caminos provinciales se cambian por los generados en la superpoblación de la vía nacional, cuyo proyecto de ampliación también esta postergado

La autopista por la 22, frenada por ahora

El proyecto para transformar la ruta 22 en una autopista de cuatro carriles desde Villa Regina hasta Cipolletti está virtualmente frenado.
"Está para concretarlo en algún momento, pero hoy las prioridades son otras", advirtió desde Viedma el titular de Viarse, Miguel Pedranti.
"La ruta 23, sobre el tramo que une Arroyo Verde y Sierra Grande, estará abierta al tránsito en los primeros días de septiembre y el compromiso para la repavimentación de la 3 y la 251 ya está firmado con Vialidad Nacional, por lo que se estarían comenzando a trabajar en la primera de ellas también el mes que viene", adelantó.
Pedranti coincidió en la necesidad urgente de arreglar la ruta 22, mejorar su seguridad y dividir los tránsitos de corta y larga distancia que hoy se mezclan. "Se necesita algo distinto para que baje el nivel de accidentes y haya más rapidez para unir un punto y otro", puntualizó antes de recordar que el único proyecto existente es el de la autopista sobre el actual trazado y no hay previsiones sobre la construcción de un camino sobre la barda norte.
También apuntó que el proyecto es manejado exclusivamente por el gobernador Pablo Verani y las autoridades de Vialidad Nacional y el Ministerio de Infraestructura de la Nación.
Como la ruta provincial 65 sería el camino alternativo para la autopista sobre la 22, hubo quienes hicieron conjeturas sobre el abandono de la "ruta chica" para sobrecargar el tránsito en la vía nacional e imponer así el proyecto de ampliación. Consultado por esto, Pedranti aseguró que "el reasfaltado de la 65 no tiene nada que ver con la decisión política de mejorar la ruta 22. Se trata de un camino provincial y es nuestra responsabilidad mejorarlo". (AR)

Bachean sólo un tramo de la 65

Después de varios días de lluvia incesante, en los que no se pudo trabajar, las máquinas de Viarse salieron a la ruta 65 el viernes pasado para comenzar con el bacheo de los tramos más deteriorados.
Los trabajos se extendieron desde la entrada al barrio El Maruchito, en inmediaciones de Guerrico, hasta unos metros antes de la curva en la que se encuentra el haras Cabo Alarcón.
"Sabemos que no es lo mejor, pero algo es algo. Peor sería si los pozos siguieran como siempre y se hicieran cada vez más grandes", justificó uno de los empleados mientras rellenaba un bache.
Según indicaron los propios operarios, esta vez la tarea fue un tanto más complicada esta vez, ya que la intensidad de las precipitaciones agrandó los baches y la preparación del pavimento necesitó de mayor limpieza. Además, las bajas temperaturas también jugaron en contra del material, que debe aplicarse en caliente.
A pesar de que este diario consultó por el gasto que demanda el bacheo previsto para la ruta 65 y el tramo de la 6 camino a Paso Córdoba, que son la prioridad, no se informaron montos. Ahora habrá que "rezar", para que los arreglos queden bien hechos y duren. (AR)

   
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