Domingo 25 de agosto de 2001

 

Piden una suba de la coparticipación

 

A contrapelo del "déficit cero", los diputados exigen.

  NEUQUEN (AN).- Los diputados provinciales patagónicos se pintaron la cara y decidieron exigir una suba en la cuota de coparticipación federal en una próxima discusión sobre la distribución primaria de impuestos nacionales, al tiempo que reclamaron un paraguas que proteja los subsidios al gas y las exenciones impositivas a los combustibles líquidos. En el aspecto económico, calificaron de "usurarios" los intereses de la deuda externa argentina, que debe ser reprogramada "como parte de un derecho ineludible" que, de no ejercerse "implica hipotecar nuestro futuro".
De esa manera, los legisladores regionales construyeron un obstáculo a futuro para el gobierno nacional, que necesita del consenso parlamentario para consagrar los acuerdos alcanzados por el viceministro de Economía, Daniel Marx, con las autoridades del Fondo Monetario Internacional (FMI).
El texto destacó en su primera mención el apoyo y defensa de las universidades nacionales "para que prosiguen fortaleciendo sus autonomías siendo de ingreso libre y gratuito". La declaración se dio en coincidencia con las negociaciones que el rector de la UNC, Jorge Rabassa, realizaba ayer en Buenos Aires.
El vicegobernador neuquino Jorge Sapag, que abrió y cerró las deliberaciones, continuó con la táctica de separar al gobierno provincial de las decisiones de Nación. Dijo que la profundización de la crisis nacional derivada de la situación económica y social "limita los derechos individuales" y reclamó un incremento en la participación de la Patagonia en el presupuesto nacional.
También mencionó la crisis de liderazgo que "afecta la credibilidad de la dirigencia" y reivindicó a los partidos políticos como herramientas necesarias para la construcción de la democracia que "debe ser inclusiva y no exclusiva".
El documento elaborado por los diputados, representantes de los seis estados provinciales que integran la región -La Pampa, Río Negro, Chubut, Santa Cruz, Tierra del Fuego y Neuquén- apoyó expresamente la vigencia de los "cuerpos colegiados" en las instituciones con lo cual estableció una posición respecto de la reforma política que impulsa la administración central.
En este punto, consideraron que "el autoritarismo siempre quiere suprimir" a esos organismos para "imponer sus proyectos que en general son excluyentes".
Salvo la ratificación de la necesidad de "ser una nación integrada", ninguna de las propuestas fue favorable al gobierno del presidente Fernando de la Rúa: los patagónicos incluso rechazaron la posibilidad de que en el territorio se instalen defensas o bases militares -el "escudo antimisilístico"- según el plan de los Estados Unidos mientras se cierran asentamientos argentinos en la Antártida.
También apoyaron las conclusiones del pre-informe de la comisión legislativa de la Cámara de Diputados de la Nación que investiga el lavado de dinero porque denunció esa "usura internacional" y sus distintos orígenes -evasión, corrupción, narcotráfico-.
Los diputados expresaron que las nuevas escalas económicas y políticas requieren una nueva forma de negociación que implican la institucionalización y reordenamiento en los distintos foros de manera de "ampliar la base de sustentación de nuestras democracias".
Sapag recibió un espaldarazo de parte del diputado nacional Pedro Salvatori (MPN) -uno de los artífices de la alianza de partidos provinciales para formar el interbloque federal en el Congreso-, que instó a "la rebelión patagónica" en su disertación desarrollo regional en el seminario.
Además, disertaron el ministro de Gobierno, Jorge Gorosito - "Desarrollo y fortaleza política"- y el vicejefe de gabinete, Marcelo Fernández Dotzel -"Estrategias de desarrollo en la Patagonia"-; los empresarios Julio Viola y Edgardo Phielipp, y Oscar Massei -sobre políticas ambientales- y, sobre regionalismo y desarrollo, el diputado de La Pampa, Luis Galcerán (PJ).
El documento, titulado "Declaración de Neuquén", fue discutido en las primeras horas de la tarde en el edificio del Centro PyME, donde luego se realizó el seminario sobre "Políticas y economías de desarrollo para la Patagonia".

Massei alertó contra el "4 + 1"

En el seminario desarrollado durante la primera sesión del Parlamento Patagónico, el ex secretario de Medio Ambiente, Oscar Massei, alertó contra las consecuencias negativas del "4+1", es decir, la unión que el Mercosur haría con Estados Unidos como paso previo a su integración al ALCA. Massei -candidato a senador por la Alianza neuquina-, dijo que el riesgo consiste en que se realice una "explotación irracional de los recursos naturales" en el cono sur.
Como ejemplo, advirtió que en 1912 se contabilizaban en Argentina 115 millones de hectáreas de bosques nativos y luego hubo un proceso de depredación -de quebracho y caldén fundamentalmente- que concluyó con una superficie actual de 30 millones de hectáreas.
En el seminario también habló el empresario Edgardo Phielipp, titular del Centro PyME, que se refirió a la situación de la pequeña y mediana empresa en Neuquén. Pidió destrabar "un proyecto de ley en el Congreso" que sancionaría la marca Patagonia para la producción regional y permitiría generar fuentes de empleo genuinas.
El tono crítico del parlamento se debió a que la mayoría de los asistentes -a excepción de Río Negro, donde primó el oficialismo aliancista- integra la oposición: son justicialistas -de las líneas del pampeano Rubén Marín o del santacruceño Néstor Kirchner- o del Frepaso y del ARI. En cualquiera de ambos casos -e incluso en el de radicales de La Pampa, vinculados con Alfonsín o Terragno- son críticos de la política nacional.

     
     
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