Jueves 23 de agosto de 2001

 

Una "guerra sucia" sacude a la derecha chilena

 

La policía secreta de Pinochet sigue operando.

  Santiago.- Ex agentes de los servicios de seguridad durante la dictadura de Pinochet siguen operando en Chile. El último rastro pareciera estar detrás de una "guerra sucia" de denuncias y chantajes en la discusión de las candidaturas entre las fuerzas de la derecha.
El gobierno chileno denunció ayer que la disuelta policía secreta del régimen militar (CNI) está detrás de las maniobras que forzaron la renuncia de un dirigente derechista a la lucha por una banca en el Senado, a la que aspira el ex jefe de la Marina Jorge Arancibia.
"La CNI (Central Nacional de Informaciones) sigue operando en Chile", afirmó el ministro del Interior chileno, José Miguel Insulza, al referirse a los "seguimientos" que desconocidos hicieron en los últimos días a Sebastián Piñera, presidente del partido Renovación Nacional (RN), de la derecha moderada.
Piñera renunció sorpresivamente a comienzos de la semana pasada a su candidatura al Senado por Valparaíso para los comicios parlamentarios de diciembre, lo que despejó el camino al Congreso a Arancibia, de la pinochetista Unión Demócrata Independiente (UDI).
En el momento de su renuncia, Piñera había asegurado que su decisión de dejar la candidatura era debido a una mala perfomance en las encuestas. Sin embargo, se ha ido descubriendo una compleja trama de presiones de sectores económicos, políticos y militares del pinochetismo, que incluyeron el chantaje y la amenaza directa al dirigente para que desistiera de participar.
En un principio se habló de factores económicos(el empresariado se había negado a otorgarle fondos) y políticos (dirigentes de su propio partido le quitaron respaldo).
Pero el ministro Insulza admitió ayer a la prensa que Piñera también fue objeto "de operaciones de inteligencia con fines políticos", aunque declinó entrar en detalles, "por razones de seguridad"
Sin embargo, el diario electrónico "El Mostrador" reveló que en los últimos días hubo movimientos "sospechosos" de automóviles extraños frente a su domicilio y amenazas telefónicas.
Al parecer, la ultraderecha estaría preocupada porque un eventual éxito electoral de Piñera lo catapultaría como competidor del "candidato natural" del sector, Joaquín Lavín.
No es la primera experiencia en este sentido que sufre Piñera . En 1993, su pre-candidatura presidencial se derrumbó al hacerse públicas charlas telefónicas privadas suyas en donde revelaba su estrategia de campaña y hablaba despectivamente de sus rivales. Según se supo después, estas llamadas fueron interceptadas y grabadas por un organismo de espionaje militar y entregadas a su competidora, la actual senadora de la UDI Evelyn Matthei. La parlamentaria es hija de Fernando Matthei, ex comandante de la Aviación y miembro de la Junta Militar durante la dictadura de Augusto Pinochet .
La revista Qué Pasa revelaría que el ex senador perdió súbitamente el interés en investigar el caso luego que uno de sus hijos, que entonces tenía diez años, fuera secuestrado. (...) El niño fue abordado por unos "tíos" desconocidos, a la salida del colegio, quienes lo retuvieron un tiempo - menos de una hora-, lo llevaron hasta una caseta telefónica y lo hicieron comunicarse por teléfono con su papá. Los "tíos" -que jamás han sido identificados- amenazaron a Piñera con represalias si insistía en investigar el llamado "Piñeragate".

Revelaciones en archivos

Pero los ex agentes también dejan huellas en otras acciones. "Esta gente sigue operando, aunque no tiene la facultad ni la atribución para hacerlo", dijo Insulza, que añadió que incluso el organismo supuestamente disuelto tiene una página en Internet en la que se publican completas las declaraciones de detenidos durante el régimen militar. "Lo que ellos dijeron a la CNI ayer se publica en Internet", dijo Insulza, al referirse al sitio "despiertachile.netfirms.com".
En la citada página aparecen, en su más reciente actualización, reproducciones de las fichas confeccionadas durante su detención a los actuales diputados socialistas Carlos Montes y Sergio Aguiló. Montes se declaró extrañado de que se difundan los archivos de la CNI "porque cada vez que se ha pedido a las Fuerzas Armadas información sobre las violaciones a los derechos humanos, la respuesta fue la misma: que no hay información porque todos los archivos de la DINA y la CNI fueron destruidos". (Télam SNI/El Mostrador)

Perdón por el uniforme

El ex jefe de la Armada chilena Jorge Arancibia, candidato al Senado por la ultraderechista Unión Demócrata Independiente, pidió ayer perdón públicamente por aparecer vestido en un panfleto electoral con el uniforme de la institución.
La aparición de la propaganda generó una ola de críticas, desde el gobierno a la propia Armada, cuyo comandante en jefe, Miguel Angel Vergara, dijo que "una cosa son las Fuerzas Armadas y otra la política". También el ministro de Defensa, Mario Fernández, señaló "que no es bueno para la cultura cívica del país que el uniforme de las Fuerzas Armadas aparezca en una propaganda electoral".
Arancibia reconoció ayer las críticas y confirmó la eliminación de la polémica imagen de su campaña. "Si fue malo, como parece, no sólo me arrepiento sino que la retiro, y si a alguien he ofendido le pido excusas", declaró a la prensa local.
El senador socialista Carlos Ominami hizo un llamado para que se convoque a un "tribunal militar de honor" y que sean las propias instituciones armadas las que evalúen las actuaciones de Arancibia Sostuvo que que el almirante retirado debe responder además "si es efectivo que en su candidatura estuvo involucrado su hermano Fernando Arancibia Reyes, general en retiro del Ejército, ex subdirector de la CNI ". (EFE/El Mostrador)

     
     
Tapa || Economía | Políticas | Regionales | Sociedad | Deportes | Cultura || Todos los títulos | Breves ||
Ediciones anteriores | Editorial | Artículos | Cartas de lectores || El tiempo | Clasificados | Turismo | Mapa del sitio
Escríbanos || Patagonia Jurásica | Cocina | Guía del ocio | Informática | El Económico | Educación