Miércoles 15 de agosto de 2001

 

Niegan la privatización del PAMI y la Anses

 

El gobierno salió a desmentir las medidas que presuntamente exigiría EE.UU. para un acuerdo con el FMI. Sin embargo, aceptó que habrá "reestructuraciones" para ahorrar fondos.

  Buenos Aires (Infosic/DyN). El gobierno no privatizará el PAMI, la Anses, ni el Banco Nación, y tampoco promoverá despidos en el sistema de seguridad social, anunció ayer el vocero Juan Pablo Baylac al término de la reunión de Gabinete.
El vocero explicó que esas medidas están expresamente prohibidas en la ley de poderes especiales que el Congreso le otorgó al jefe del Estado.
"El gobierno no tiene previsto de ninguna manera privatizar estos organismos; lo que el Gobierno sí tiene decidido es reconvertirlos para que sean más eficientes y para que los recursos de Anses, de PAMI y de los distintos organismos del Estado vayan a parar a sus beneficiarios", indicó.
La afirmación de Baylac contrastó con las declaraciones del interventor de ese organismo, Douglas Llyal, quien por la mañana adelantó que se eliminarán unos 200 contratos en el ANSES en el marco de la reestructuración. Versiones periodísticas también señalaban que la reforma de la obra social de los jubilados y pensionados dejaría afuera a unos 3000 empleados.
Las versiones sobre la posible privatización de estos organismos y del Banco Nación partieron desde Estados Unidos, donde se negocia el préstamo del FMI. Los técnicos del organismo habrían exigido a la Argentina "más ajustes, reformas y proyecciones" que aseguren el déficit cero. Acerca del PAMI, Baylac destacó la necesidad de reestructurarlo al señalar que en la actualidad "tiene un costo de administración que llega al 15% de su presupuesto, cuando por ley no debe ser mayor al 8%".
Sobre la Anses, Baylac sostuvo que los recortes de gastos "ineficientes" irán en beneficio "del Tesoro nacional", aunque aclaró que la reconversión del organismo "tardará un poco más por el volumen de recursos que maneja y por la necesaria "verificación de posibles fraudes".
"De Anses no se habló de eventuales despidos sino de reestructuración de un organismo que tiene muchas ineficacias, donde han sido detectados muchos fraudes y se necesita hacer un registro de qué es lo que ocurre con los recursos", explicó.
También se buscará una "simplificación de la estructura tributaria" de la AFIP y la implementación de "incentivos" y de un sistema más amplio de "bancarización" para mejorar la recaudación y evitar la evasión, añadió.
El presidente Fernando de la Rúa encabezó la reunión, de la que participaron el jefe de Gabinete, Chrystian Colombo, y los ministros de Economía, Domingo Cavallo; del Interior, Ramón Mestre; de Justicia, Jorge de la Rúa; de Educación, Andrés Delich; de Infraestructura, Carlos Bastos; de Trabajo, Patricia Bullrich, y de Salud, Héctor Lombardo.

Bullrich planea ahorrar un 25% con reformas

BUENOS AIRES (DyN) - La ministra de Trabajo, Patricia Bullrich, anunció que el martes próximo presentará una propuesta "integral de cambio de modelo de la Anses".
"Estamos trabajando para presentar el martes próximo en el gabinete una propuesta integral de cambio de modelo de la Anses", dijo la ministra en la 49 convención anual de la Cámara Argentina de la Construcción que se realizó en el hotel Sheraton de esta capital.
Explicó que el proyecto de restructuración del organismo implicará un ahorro "del 25% del gasto actual", que estimó rondará los "cuarenta millones al año". "El ministerio va a hacer una reforma modelo en el Anses, que implica un cambio muy de fondo en todos los problemas estructurales como el fraude, las fallas en los sistemas de control, y los problemas de litigiosidad", abundó la funcionaria.En ese sentido explicó que se ha "achicado la estructura gerencial y estamos identificando todas las personas su respectivo cargo, puesto y las horas que trabaja, y todas aquellas que no tengan una función específica no van a estar más", agregó.

La protesta piquetera arrancó con menos fuerza

Con menor asistencia que en las protestas anteriores y la adhesión de docentes, médicos y trabajadores nucleados en la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), se cumplió ayer la primera de las tres jornadas consecutivas de piquetes en todo el país, en reclamo de planes trabajar, la liberación de dirigentes detenidos y en rechazo del ajuste salarial.
Mientras se desarrollaban los piquetes con absoluta normalidad, desde el gobierno, el subsecretario de comunicación, Juan Baylac, volvió a relativizar las movilizaciones al sostener que la modalidad que se utiliza "se va degradando".
Si bien hubo algunos cortes de rutas en distintas ciudades del interior bonaerense, en las provincias de Tucumán, Jujuy, Córdoba, y en ciudades como Resistencia, Rosario, Mar del Plata y Bahía Blanca, el epicentro de los piquetes volvió a ser el partido bonaerense de La Matanza, donde desde las 10 de la mañana, cientos de piqueteros instalaron sus carpas a la vera de la ruta 3, en Isidro Casanova, y realizaron el acto central en rechazo al ajuste.
A ese acto se sumaron docentes bonaerenses y empleados de hospitales públicos, que aún no cobraron sus salarios y cumplieron una nueva jornada de paro.
En las provincias, el número de cortes de rutas y calles mermó con relación a las ediciones anteriores de la protesta, pero se hizo fuerte en los Estados que arrastran problemas de otros sectores sociales, principalmente docentes, empleados estatales y productores.
Si bien hubo cortes de calles y pequeñas movilizaciones en casi la totalidad de las capitales provinciales, la protesta piquetera se destacó en Salta, Chaco, Jujuy, Córdoba y Neuquén.

Preocupa el ajuste en el Ejército

El jefe del Ejército, teniente general Ricardo Brinzoni, manifestó su preocupación por el ajuste económico en el sector y admitió que para los miembros de esa fuerza es "penoso y muy difícil de sobrellevar".
Subrayó que el Ejército recibe entre un 30 y un 40% de lo que necesita para funcionar y pidió a los uniformados "hacer un sacrificio más".
En declaraciones a la revista "Soldados", Brinzoni dijo que en las Fuerzas Armadas y que hay que asumir que "vivimos en un país pobre".
A raíz del "déficit cero" dispuesto por el gobierno nacional, Brinzoni resolvió recortar hasta un 75% los gastos en el Ejército hasta fin de año, lo que implica "inactividad parcial" con licencias masivas y reducción de la semana laboral en los cuarteles a cuatro días de seis horas cada uno.
"Los altos mandos hemos analizado esta circunstancia, sabemos que para todas las jerarquías es muy penoso, que para las familias es muy difícil de sobrellevar", dijo Brinzoni.
Explicó que "estamos recibiendo un 30 ó un 40% de lo que necesitamos para funcionar y por eso se han tomado medidas de carácter general que llevan a una limitación parcial de actividades en todas las unidades del Ejército, excepto en las áreas de Institutos Militares y de la salud".
"Como la Patria está primero, el Ejército va a continuar aportando su esfuerzo solidario, hoy que el país lo necesita", concluyó. (DYN)

     
     
Tapa || Economía | Políticas | Regionales | Sociedad | Deportes | Cultura || Todos los títulos | Breves ||
Ediciones anteriores | Editorial | Artículos | Cartas de lectores || El tiempo | Clasificados | Turismo | Mapa del sitio
Escríbanos || Patagonia Jurásica | Cocina | Guía del ocio | Informática | El Económico | Educación