¿Purga para quienes se fueron a ARI?
El radicalismo neuquino se reúne hoy. Su presidente, Carlos Vidal, quieren estrenar el cargo sometiendo a un tribunal de conducta a los concejales del partido que, seducidos por Elisa Carrió, transfirieron lealtades marchándose a Argentinos por una República de Iguales. "Pechi" Quiroga no quiere que se sancione.
Según le dijo a "Río Negro", la idea es conformar el Tribunal de Conducta del partido para que resuelva si merecen ser sancionados.
Los concejales Juan José Dutto y Beatriz Kretiman formaron junto a la frentista Leticia Maidana y la democristiana Angélica Alonso el bloque del ARI, la fuerza que orienta a nivel nacional la diputada Elisa Carrió.
No es la primera vez que el oficialismo radical intenta sancionar a los concejales rebeldes.
El intendente Horacio Quiroga no acuerda con ello, pero para Vidal es la opinión de "un afiliado igual que yo".
Vidal es el principal operador de la intendencia en el Deliberante. Siempre se ha quejado por las actitudes de los cuatro que hoy integran el ARI, inclusive cuando pertenecían al bloque de la Alianza.
El Comité Provincial del radicalismo, con los nuevos integrantes surgidos de las internas de junio, se reunirá por primera vez hoy en Zapala.
Una semana más tarde, en la misma ciudad, quedará constituida la Convención del partido, que seguramente será presidida por Rodolfo Quezada.
Los convencionales tendrán la misión de conformar el Tribunal de Conducta, que es el órgano encargado de juzgar el comportamiento de sus afiliados.
En 1999 este tribunal decidió expulsar a los tres diputados radicales que permitieron la convalidación legislativa del ajuste salarial en el Estado. Marcelo Piombo, Jorge Aravena y Carlos Basso fueron separados del partido, pero antes de terminar el período le dieron al entonces gobernador electo Jorge Sobisch los votos para neutralizar la designación de Roberto Natali como fiscal de Estado, y a cambio fueron nombrados en la planta política de la provincia.
"Mi idea es que tenemos que pedir el juzgamiento de la conducta de estos amigos", dijo Vidal en referencia a Dutto y Kreitman.
"En la reunión de mañana (por hoy) no vamos a proponer que sean sancionados", aclaró luego.
"Que sea el Tribunal de Conducta -continuó- el que analice su existen causales de sanciones".
Vidal desempolvó la idea de juzgar a los rebeldes luego de que los cuatro concejales del ARI votaran el jueves en contra de la toma de un crédito por parte del municipio de 16,4 millones de pesos del Banco Interamericano de Desarrollo destinado a obra pública e institucional.
"Eso fue un agravamiento de la situación", opinó el concejal que permanece fiel a Quiroga.
Pero no es Vidal el único interesado en juzgar a los disidentes. El nuevo presidente del comité capitalino Alberto Maglieta, que integra el gabinete municipal, también está analizando desde el punto de vista partidario, las conducta seguidas por Dutto y Kreitman.
La separación de estos dos concejales dejó en inferioridad de número a la bancada de la Alianza.
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