Una multitud espera ingresar a San Cayetano
El designado obispo de Bariloche instó al pueblo a "mantenerse de pie" ante la crisis.
Maletti también instó al pueblo a "mantenerse de pie y no quebrarse ante las dificultades" socio-económicas que lo aquejan, a dos días de celebrarse el día de San Cayetano.
Mientras, como es habitual cada año, centenares de personas formaban ayer una extensa fila desde la puerta de la Basílica de San Cayetano, con carpas, sillas o directamente sentados en la vereda.
Aunque se detectan personas de los dos sexos y todas las edades, prevalecen las mujeres mayores, quienes distienden la espera con rondas de mate y charlas con otros creyentes.
Una mujer, proveniente de José C. Paz, confió que "hay mucha más gente que el año pasado" y que en algunos casos "se duerme sobre las sillas" aunque "también se turnan para ocupar los lugares".
En una entrevista concedida a DyN, el flamante obispo de San Carlos de Bariloche -cargo que asumirá el próximo 22 de setiembre- descartó que la fiesta del patrono del pan y del trabajo pueda "politizarse" al coincidir con el gran piquete convocado, para ese día y el siguiente, por distintas organizaciones sindicales y de desocupados.
Al explicar cuál será el sentido particular de esta peregrinación de súplica y acción de gracias al santuario del barrio porteño de Liniers, el prelado precisó: "Este año, tan difícil o más que los anteriores, el matiz es pedir a nuestro pueblo que se mantenga de pie, que no se doblegue, que no se quiebre ante las dificultades".
"La preocupación grande -subrayó- siempre es la multitud de gente a la que no le llegan las necesidades básicas para satisfacer sus más mínimas realidades de dignidad. Allí está realmente el problema y por eso vamos a rezar todos el 7 de agosto".
Consultado sobre si el "gran piquete" de 48 horas del martes y miércoles podría condicionar el normal desarrollo de este acto religioso, el nuevo obispo aseveró que así sucedería si "se impide la libre circulación", aunque confió en que los organizadores de la protesta entenderán que "la gente no es puro espíritu y que si quiere trasladarse físicamente debe poder hacerlo" (DyN)
Reemplazará a Rubén Frassia
El papa Juan Pablo II designó a mediados de julio a Fernando Carlos Maletti como nuevo obispo de Bariloche, en reemplazo de monseñor Rubén Frassia, quien el pasado 25 de noviembre fue trasladado a la diócesis de Avellaneda-Lanús.
Maletti nació el 17 de marzo de 1949 en Buenos Aires, cursó sus estudios secundarios en el Seminario Menor Metropolitano Sagrado Corazón de Jesús de la arquidiócesis de Buenos Aires, y los de Filosofía y Teología en el Seminario Mayor "Inmaculada Concepción", de Villa Devoto. Recibió la ordenación sacerdotal el 24 de noviembre de 1973 y desde entonces ejerció ese ministerio en varios lugares como vicario y como párroco. Desde 1991 es párroco de la parroquia-santuario de San Cayetano.
Es vicepresidente de Cáritas Buenos Aires y el 28 de febrero de 1992 el Santo Padre lo incorporó a la Familia Pontificia con el título de Prelado de Honor de Su Santidad, por eso recibía el tratamiento de "monseñor". (AR)
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