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Köhler pidió adelantar entrega de 1.200 millones para Argentina
Ayuda millonaria para que Brasil amortigüe los efectos
El organismo de crédito internacional anunció además que aprobó anoche el desembolso de un tramo de 1.510 millones de dólares de un préstamo destinado a Turquía, tras la evaluación positiva de sus expertos sobre las reformas económicas de Ankara.
En Washington, el nuevo gobierno republicano del presidente George W. Bush no favorece los rescates multimillonarios de economías en peligro de descalabro financiero. No obstante, el riesgo de un contagio de la crisis argentina hacia la mayor economía latinoamericana motivó al FMI a ofrecer un crédito contingente a Brasil, que en 1998 recibió un paquete de rescate de 41.000 millones de dólares.
El valor de la moneda brasileña, el real, ha tocado su mínimos históricos en las últimas semanas a causa de los temores de un incumplimiento de la deuda en Argentina.
Koehler dijo que recomendará un nuevo préstamo preventivo de 15.000 millones de dólares para respaldar a Brasil y agregó que el FMI podría aprobar el nuevo crédito en septiembre.
En un segundo comunicado, Koehler dijo que el préstamo fue solicitado por Brasil y que 4.600 millones de dólares estarían disponibles cuando el directorio vote el próximo mes.
"A la luz de los antecedentes de Brasil de mantenerse en línea con las metas, y el fortalecimiento de las medidas que planea implementar bajo el programa, estoy preparado para recomendar este nuevo programa al directorio ejecutivo del FMI", dijo Koehler.
En las últimas semanas habían rumores de que Brasil estaba en negociaciones con el Fondo Monetario para un nuevo paquete que reemplazaría al actual programa de facilidad ampliada, que vence en diciembre.
Pero el anuncio del nuevo préstamo preventivo, que se extendería hasta diciembre de 2002, fue sorpresivo ya que tanto las autoridades brasileñas como los miembros del FMI habían negado que estaban negociando un nuevo préstamo.
Expectativa en Latinoamérica
Varios líderes latinoamericanos están tratando de ayudar a Argentina a conseguir el respaldo financiero internacional, debido al temor de que una moratoria de deuda de ese país tenga un gran impacto en toda la región, dijo ayer el presidente chileno, Ricardo Lagos.
Lagos conversó con su par De la Rúa, a quien le brindó su respaldo ante la delicada situación política y económica que enfrenta.
Días antes el presidente chileno había mantenido contactos con sus pares de México, Brasil y Uruguay, quienes también se mantienen atentos al rumbo que tome Argentina.
"Si en Argentina (se) produce una situación de moratoria u otra, eso va a generar una dificultad muy grande en los mercados emergentes y eso es lo que estamos tratando de evitar a través de estas conversaciones con los otros mandatarios", dijo Lagos.
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