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Jueves 30 de agosto de 2001 | |
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Las acusan de asesinato y de ser "viudas negras" |
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Las imputadas son tres prostitutas y la víctima fatal un travesti. Además, habrían adormecido y despojado a un hombre |
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| NEUQUEN (AN)- Un juicio de características poco comunes comenzó a debatirse ayer en forma oral y pública. Hay tres mujeres imputadas de un rosario de delitos, algunos muy graves: a dos de ellas se las acusa de asesinar a puñaladas a un travesti; a la tercera de adormecer a un hombre y, en complicidad con una de las sospechadas del homicidio, desvalijarle la casa. En la audiencia de ayer declararon cinco testigos, para hoy están citados otros cuatro y luego serán los alegatos de la fiscalía y de los defensores. Las imputadas son Adriana Estela Vera, Nilda Anabela Caro y Dora Graciela Rosales. La víctima fatal, en tanto, fue Héctor Mariangel Vázquez, alias "Lucrecia". Tenía 33 años, vivía en el barrio Don Bosco y era ampliamente conocido en el ambiente de la prostitución. El homicidio ocurrió alrededor de las 3 de la mañana del miércoles 6 de diciembre del año pasado, en la esquina de Gatica y J.J. Lastra, una de las tradicionales "paradas" de quienes ejercen la prostitución callejera en esta capital. "Lucrecia" estaba allí en compañía de los hermanos José y Roberto Vilches cuando llegaron las imputadas Vera y Caro en un taxi. Al parecer se produjo una discusión por la "parada" que empezó a los gritos, siguió con golpes y terminó con las puñaladas. Vázquez recibió un puntazo que le alcanzó el corazón y José Vilches fue herido en el abdomen. Mientras las mujeres huían, "Lucrecia", con el pecho ensangrentado, cruzó caminando la multitrocha, pasó la calle Planas y cayó a pocos metros de Gatica y Alcorta. Murió poco después de ser trasladado al Hospital Regional. En cuanto al robo, fue cometido con la modalidad de la "viuda negra" y se le atribuye a Vera y Rosales. Ocurrió pocos días antes del homicidio, el 29 de noviembre del año pasado. De acuerdo con la acusación fiscal, la víctima fue Miguel Angel Tobares quien habría llevado a las dos mujeres a su vivienda. Allí habrían tomado alcohol y las imputadas "le hicieron perder el conocimiento mediante la utilización de alguna sustancia química o narcótica". El inventario de lo que le robaron es amplio y variado: una computadora, una impresora, un scanner, un celular, un equipo de música, dos tarjetas de crédito, prendas de vestir, una caja de herramientas, una amoladora, treinta CD de videojuegos, diez CD de música, dos juegos de toallones verde y rosado, tres juegos de sábanas, un nebulizador, un carrito de bebé, dos pares de ojotas, un par de sandalias color fucsia, una tabla de planchar y un juego de cubiertos. Las acusaciones contra las imputadas siguen. A Vera la detuvieron el 17 de marzo de 2000 durante un operativo de rutina de identificación de personas, en calle Lastra al 900. En ese momento los policías descubrieron que tenía en su poder un revólver calibre 22 marca Pasper. Vera estaba acompañada de otras cinco personas en un Ford Fiesta. Todas fueron trasladadas a la dirección Judicial para su identificación, cuando apareció Caro a protestar. De acuerdo con el fiscal, insultó al personal policial y agredió a trompadas y patadas a un cabo que intentó reducirla. Por toda esta cadena de hechos, Vera está acusada de homicidio simple, robo simple y portación de arma de uso civil sin autorización; Caro de homicidio simple y resistencia a la autoridad, y Rosales de robo simple. |
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