Domingo 26 de agosto de 2001

 

Discutieron y uno terminó con dos balas en la cabeza
 

Una disputa entre dos personas concluyó abruptamente en un comercio de Roca, cuando un joven cayó abatido por dos disparos, que impactaron en su nuca y un pómulo. El arma desapareció y los testigos dieron versiones poco claras.

  ROCA (AR).- Lo que comenzó como una simple discusión se transformó en riña y concluyó con una brutal agresión en un comercio del norte roquense. Al cierre de esta edición, un joven permanecía grave en el hospital luego de recibir dos balazos en la cabeza.
Con numerosas versiones escuchadas a lo largo de la jornada, la Policía intentó determinar ayer la sucesión exacta de hechos ocurridos en el mini shopping "De María", ubicado en San Juan 3.465 del barrio Nuevo.
De acuerdo a las primeras conclusiones a las que arribaron anoche en la comisaría 21, cuando habían pasado unos pocos minutos después de las 6 comenzó una pelea entre dos personas que habían pasado la noche en el local.
Según confirmó el subcomisario Santiago Rolleri, el consumo de alcohol desde las primeras horas de la madrugada influyó en el desenlace del episodio, que por el momento no registraba detenidos, aunque sí varios sospechosos.
Trascendió que la división de Criminalística realizó pericias para determinar la participación de los sospechosos y en alguno de ellos el dermonitrotest habría arrojado resultados positivos.
La reconstrucción de los hechos hablaría de un inicial cruce de palabras entre dos personas, que serían conocidas entre sí, pasando luego a una pelea, que derivó en la aparición del arma y los posteriores disparos.
Hasta ayer no se había confirmado si en la reyerta participaron más personas.
Las autoridades policiales tomaron declaraciones testimoniales durante la mañana y la tarde, con el fin de establecer responsabilidades y el paradero del arma desde donde se disparó a la víctima.
Sin embargo, los uniformados se encontraron con lo mismo que ocurre en la mayoría de los casos como este, en el que reina el hermetismo de los testigos y las posibilidades de avanzar en la investigación se tornan escasas.
"En el momento del hecho había mucha más gente en el local de la que tenemos registrada como testigos o sospechosos. El arma utilizada desapareció y las declaraciones que tomamos son contradictorias", señaló ayer el jefe policial.
Según lo expresado ayer por una fuente policial, esta característica fue una constante en los últimos hechos registrados en el norte roquense, en los que a pesar de enfrentar a dos personas, bandas o grupos, a la hora de testificar prevalecen los códigos y "nadie sabe nada".
Lo que se sí pudo confirmarse fue la identidad de la víctima. Se trata de Gustavo Carimán, de 24 años, que minutos después de recibir los balazos fue trasladado hacia el hospital "Francisco López Lima", donde recibió atención de urgencia. Anoche permanecía en la sala de terapia intensiva del nosocomio.
Carimán sufrió el ingreso de los proyectiles en uno de sus pómulos y en la nuca.
Según las estimaciones de los encargados de la investigación, el arma utilizada para agredirlo sería de bajo calibre.
   
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