Martes 14 de agosto de 2001

 

Se fugaron dos condenados de una comisaría allense

 

Dos internos de la alcaidía que habían sido llevados a la comisaría Sexta de Allen por la superpoblación carcelaria, escaparon ayer a la madrugada. Los detenidos limaron los cerrojos de una puerta que comunica con un patio interno y tras lograr su cometido escaparon. De la fuga se tuvo conocimiento varias horas después de ocurrida, cuando se llevó a cabo el cambio de guardias. Inmediatamente se montó un operativo, pero anoche seguían prófugos.

  ALLEN (AA).- Dos delincuentes que fueron derivados desde la alcaidía de Roca hacia la comisaría Sexta de esta ciudad, donde permanecían alojados desde los últimos meses, se fugaron durante la madrugada de hoy. Limaron los cerrojos de una puerta que comunica al patio de la unidad, y presuntamente con apoyo desde el exterior, lograron escapar sin ser descubiertos.
Los uniformados recién se percataron del hecho varias horas después durante el cambio de guardias, y si bien se montó un operativo en todas las ciudades cercanas, hasta ayer no hubo resultados positivos en la búsqueda.
Los prófugos fueron identificados como Hernán Arévalo y José Pérez, quienes se encontraban alojados en la dependencia allense desde hace poco menos de dos meses, tendrían condenas firmes, según se informó, y procesamientos en trámite. Ambos son oriundos de Cipolletti.
Trascendió que Arévalo tendría causas pendientes con la justicia por delitos de lesiones y amenazas. En tanto que Pérez habría sido condenado por reiterados robos calificados.
Se presume que éstos escaparon alrededor de las 4 de la madrugada de ayer, aunque recién se detectó la fuga horas después durante el cambio de guardia policial.
Si bien los delincuentes permanecían en distintos calabozos, en los cuales por razones de espacio se suele dejar las puertas abiertas, ambos tenían un pasillo como comunicación. Y hacia un costado de los mismos se encuentra la puerta que da hacia el patio, por la cual huyeron los malvivientes. Esta se encuentra cerrada en forma permanente.
Sin levantar ningún tipo de sospechas éstos limaron pacientemente el cerrojo interior para poder deshacerse del candado y, aparentemente con ayuda de terceros, lograron desbloquear la cerradura también del lado externo.
Para lo cual, con cierto ingenio, debieron utilizar aceite a fin de "aflojar" la traba, se comentó.
Posteriormente, y refugiados en la oscuridad de la noche, treparon el paredón del patio policial y escaparon. Incluso con el uso del aceite, hasta dejaron marcadas las huellas tras la huida en el piso del patio de la unidad.
El barrio más próximo que se encuentra allí es el plan de 60 Viviendas, por lo que se estima que pudieron tomar rumbo hacia ese sector de casas.
Desde tempranas horas de la mañana se montaron operativos y rastrillajes en los alrededores de los distintos barrios de Allen, y se requirió refuerzos a Cipolletti y Fernández Oro.
También el tránsito vehicular fue controlado en las rutas por personal de Caminera, donde se verificaron los colectivos y salidas de taxis. Sin embargo la policía no pudo dar con los sujetos.
Este no es el primer caso de fuga de presos, que son trasladados a las comisarías por falta de espacio en la alcaidía. Por lo cual, ayer nuevamente salió a la luz el hecho de que la unidad -como la mayoría del Alto Valle- no está en condiciones de albergar detenidos en forma permanente y carece de un mayor personal policial capacitado.
Las causas se tramitaron ante el juzgado NÂș 8 de Roca.
   
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