Jueves 2 de agosto de 2001

 

Juzgan a los autores de robo frustrado desde Miami

 

El fiscal pidió más de tres años para dos jóvenes que robaron en una casa. Dos mujeres hablaban por un "manos libres" a EE. UU. Desde Miami se avisó a Bariloche y luego a la policía.

  SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- El fiscal Carlos López pidió tres años y cuatro meses de prisión para los autores de un frustrado asalto a mano armada a una vivienda, que se inició mientras una de las víctimas conversaba telefónicamente con familiares que residen en Miami.
La casual circunstancia permitió actuar en forma inmediata a los policías de la comisaría de Melipal, que lograron detener a los delincuentes antes que abandonaran la casa y recuperar el dinero y las joyas que trataban de robar.
Los asaltantes fueron identificados como Javier Pérez, de 19 años, y Luis Alberto Cabrerizo, de 26, ambos con condenas aplicadas por otros hechos durante el año pasado.
En poder de Cabrerizo hallaron algunos cigarrillos de marihuana, y en el allanamiento posterior a su vivienda secuestraron un Fiat Duna con las numeraciones adulteradas, que no fue utilizado para cometer el robo.
Al iniciarse el debate, tanto Pérez como Cabrerizo manifestaron su arrepentimiento a los jueces, y señalaron que no hubieran cometido el hecho de no hallarse "empastillados", drogados y bajo los efectos del alcohol.
El hecho comenzó a desarrollarse minutos antes de las 22 del último 19 de abril en una vivienda del barrio Parque Pehuén, ubicado en el kilómetro 5,700 de la avenida Bustillo, perteneciente a la familia Mac Williams. Una falleba mal trabada posibilitó que los procesados irrumpieran en la casa luego de dar un empellón a la ventana, y en un instante estuvieron ante las dos únicas ocupantes de la casa, Elizabeth y Gladys Valencia, de 54 y 50 años, mientras la primera conversaba por teléfono con su nuera, que reside en Miami.
Gladys relató a los jueces los pormenores del episodio, recordando que cuando advirtieron la presencia de los intrusos no colgaron el teléfono porque hablaban con el sistema de "manos libres". Eso permitió que la nuera de Elizabeth escuchara desde Miami las amenazas, se comunicara con un vecino barilochense de las víctimas y éste en forma inmediata avisara a la Policía.
El fiscal López sostuvo la acusación por robo con armas en grado de tentativa, sin hacer mención a la utilización de una de las víctimas como escudo, y pidió el mínimo de la pena para ese delito.
El abogado Rodolfo Rodrigo dijo que se trataba de un robo programado, centró su defensa en la presunta intoxicación de sus pupilos con drogas y alcohol, y pidió al tribunal que los considerara inimputables y los absolviera.
Respecto de los antecedentes penales de ambos, argumentó que Pérez había sido condenado a un año de prisión en suspenso por tratar de robar 50 pesos, y Cabrerizo a un mes de ejecución condicional por un daño que se produjo durante una pelea.
La sentencia será leída por la Cámara Primera el 13 de agosto.
   
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