Todo el oro del mundo en el vóley playa

Oro mundial para el deporte argentino.
Es en vóley playa (beach vóley) y sus artífices son los integrantes de la pareja formada por Mariano Baracetti y Martín Alejo Conde, quienes ayer se adjudicaron el campeonato del mundo desarrollado en la ciudad austríaca de Klagenfurt.
La conquista no pudo haber tenido mejor sabor, por cuanto los derrotados fue nada menos que el dúo de Brasil, un país que en los últimos tiempos había marcado una hegemonía en Los Angeles "97 y Marsella "99, sedes de los dos torneos mundiales anteriores.
Baracetti y Conde se impusieron a Ricardo Costa y José Geraldo Loiola por dos sets a uno (25-23, 12-21 y 20-18) en poco más de una hora.
En las semifinales, que también se jugaron ayer, Baracetti-Conde vencieron a los estadounidenses McCaw/Heidger por 2-0 (21-16 y 21-16) y los brasileños Costa-Loiola superaron a los noruegos Kjembperud-Hoidale por 2-1 (31-29, 19-21 y 12-15).
Con esta victoria, Baracetti y Conde se hicieron acreedores de un premio de 30.000 dólares.
Por su parte, los argentinos Esteban Martínez y José Salema finalizaron en el decimoséptimo puesto y se llevaron un premio de 1.500 dólares.
El brasileño Loiola llegó a Austria con la misión de defender el título que ganó en 1999, en Marsella, junto a su compatriota Emanuel. Pero Baracetti-Conde, preclasificados en cuarto lugar, se mostraron muy sólidos durante todo el torneo y ratificaron su buen momento en la final.
En poco más de una hora y ante cerca de 10.000 espectadores, la dupla argentina le arrancó la corona mundial al equipo brasileño.
Con el marcador empatado a un set, la pareja brasileña dispuso de cinco match point pero la defensa argentina evitó la caída. Los argentinos no desaprovecharon su tercera opción para ganar el título por 20-18 por primera vez en la historia.
Ya en semifinales Baracetti y Conde lograron un muy buen triunfo por 2-0 frente a los estadounidenses MacCaw-Heidger, la pareja revelación del mundial, que venía de eliminar a los campeones olímpicos, sus compatriotas Dain Blanton-Eric Fonoimoana, por 2-0 (21-15 y 21-18).
La dupla argentina, que recién se conformó a comienzos de esta temporada, llevaba este año dos triunfos en el Tour Mundial de beach voley, en las etapas de Ligato (Italia) y Marsella (Francia). (Télam-SNI).

Fueron imbatibles

Mariano Baracetti reconoció que la suerte acompañó al equipo en la configuración del cuadro aunque para ganar el título "tuvimos que derrotar a todos nuestros rivales".
"Es cierto que hemos tenido un poco de fortuna con el sorteo pero después hemos superado a cada uno de nuestros rivales, incluido el conjunto brasileño, que es de los mejores del mundo y que no pudieron con nosotros", aseguró el componente del conjunto argentino.
Baracetti destacó la capacidad del dúo argentino para sobreponerse tras el segundo set, que Brasil logró con facilidad.
"Jugaron muy bien el segundo juego, sobre todo después del esfuerzo efectuado tras el primero. Sin embargo, no pudieron con nosotros en el definitivo", comentó el argentino. (EFE)

Con la mira puesta en Atenas 2004

Mariano Baracetti y Martín Conde se asociaron este año tras una experiencia fallida por separado en los Juegos Olímpicos de Sydney 2000, con un objetivo claro: treparse al podio en Atenas 2004, una meta que ayer encontró un hito intermedio con la consagración en el Mundial de Austria.
Las dificultades que supone el aprendizaje de una nueva pareja y la dura competencia entre la elite del beach voley auguraban un comienzo áspero.
No resultó así. Baracetti y Conde sintonizaron de entrada y lo demostraron con éxitos en el Tour Mundial, donde se alzaron con las etapas de Lignano (Italia) y Marsella (Francia). La conquista del Mundial en pleno proceso de reconocimiento señala el camino promisorio de la pareja.
El "Monito" Baracetti (porteño, de 27 años, 1.94 metros) jugó entre 1996 y el 2000 con José Luis Salema. Esta pareja, sólo festejó un título en el Tour (Mar del Plata 200) y terminó decimonovena en Sydney.
Conde (marplatense, 29 años, 1.88 metros) pasó siete temporadas con Esteban Martínez, una gloria del vóleibol argentino "indoor", integrante del equipo que conquistó el bronce olímpico en Seúl 1988. No les fue nada mal. Lideraron en ranking mundial en 1996 y ganaron tres finales del Tour. Los juegos de Sydney marcaron un momento de frustración: una lesión condicionó a Martínez y finalizaron en un noveno puesto que no cubrió sus expectativas.
El sabor amargo de Sydney empujó a las dos duplas a la reflexión y al cambio. La obsesión de Conde era tomarse revancha en Atenas 2004, pero Martínez, al borde de los 40 años, sabía que el calendario no le permitiría llegar a una nueva cita olímpica.
Esta situación se combinó con un descanso obligado de Salema por lesión. Entonces se "cocinó" el cambio de parejas: Conde se asoció con Baracetti y Salema se convirtió en el último compañero en la dilatada carrera del "Mono" Martínez.
La dupla "joven" arrancó con el pié derecho, se convirtió en la primera pareja argentina y comenzó a sorprender con sus triunfos (Télam).

foto: Conde inicia una acción ofensiva, levantando el balón para que Baracetti sea el encargado del remate.