Jueves 23 de agosto de 2001

 

Memphis La Blusera convoca a "angelitos culones"

 

Memphis La Blusera se presentará el 31 de este mes nuevamente en Neuquén, esta vez para presentar su último disco "Angelitos culones" que sigue fiel al blues y al boogie.

  NEUQUEN (AN).- La voz metálica de Adrián Otero y sus músicos, que integran Memphis La Blusera volverá a hacerse sentir el próximo 31 de agosto en la megadisco ubicada en Primeros Pobladores 2000 de esta ciudad.
La banda integrada por Otero en voz, Daniel Beiserman en bajo, Atilio Villanueva en saxo, Emilio Alfano en guitarra, Fabián Prado en teclados, Eduardo Anetta en batería y Alberto García en guitarra trae bajo el brazo "Angelitos culones", su última producción.
Tan bluseros como intensos, los músicos cuentan con una amplia discografía en su haber. Entre sus trabajos se encuentran "Alma bajo la lluvia" (1982), "Medias negras" (1988), "Tonto rompecabezas" (1988), "Memphis la blusera" (1991), "Nunca tuve tanto blues" (1994), "Memphis en vivo" (1994), "Cosa de hombres" (1995), "Hoy es hoy" (1998), "El acústico" (1999) y su última placa.
Con una temática que homenajea al amor, las mujeres, los desencuentros y las soledades, los músicos se iniciaron en las lides del blues y el rock en 1978. Su primera presentación fue en el teatro Unione de Benevolenza. Recién después de ensayar durante muchos meses hasta estar conformes con el sonido alcanzado se animaron a organizar el show.
Según se cuenta en el sitio rock.com.ar, en 1981 fueron teloneros de Pajarito Zaguri en Obras y en 1982 se presentaron en el Festival B.A Rock. Allí recibieron buenos comentarios de la prensa y naranjazos del público. Del primer álbum "Alma bajo la lluvia" (1982) se destaca el "Blues de las 6 y 30", un clásico de la banda.
En el tercer disco, "Tonto de rompecabezas" (1988) abandonan la cuestión social y callejera de los anteriores y las letras abordan más el amor, dejando de lado el lunfardo que persiste únicamente en "Sopa de letras".
La temática barrial retorna una vez más en el siguiente álbum (1991).
Pero sin dudas, 1995 fue el mejor año de la banda, desde su fundación. Además de ganar el disco de oro para "Nunca tuve tanto blues" (1994) y "Cosa de hombres" (1995), hicieron cinco shows repletos en el estadio Obras y otro recital al aire libre ante 20.000 personas.
Mientras, el séptimo disco "Cosa de hombres" se presentó en Obras y en el interior del país. Para entonces, habían logrado un récord difícil de igualar: más de 1.300 presentaciones en 17 años de carrera.
Con su flamante placa han recorrido escenarios y ciudades del interior del país y el recital de Neuquén prometer ser una nueva oportunidad para mostrar al público blusero sus últimos temas y hacer un repaso de sus viejas canciones.
   
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