En Bariloche, la Alianza sigue tecleando bajo
Se debate entre las heridas abiertas entre sus socios y la escasa gravitación que tienen sus candidatos para octubre
El oficialismo barilochense tendrá un doble esfuerzo para reposicionarse: curar las heridas abiertas en entre sus socios y dentro del disgregado radicalismo local y construir la imágen -inexistente en para el ciudadano común- de los candidatos impulsados desde la conducción provincial.
Tanto el presidente del radicalismo rionegrino, Luis Falcó, como su compañera de fórmula para el Senado, Amanda Isidori, carencen de una proyección firme en esta ciudad.
Además el recambio parlamentario acentúan el dolor de algunos sectores del radicalismo que advierten la perdida absoluta de representación nacional con el alejamiento de su único senador, Edgardo Gagliardi.
La escasa gravitación de las estructuras locales en el escenario de la Alianza rionegrina se refleja claramente en el hecho de que Julio Accavallo -el único candidato de Bariloche, aspirante a la diputación nacional- llegó a la lista oficial impulsado desde Cipolletti por el intendente Julio Arriaga.
Jalonada por drásticos enfrentamientos internos que comenzaron poco después de haber asumido el poder -y llegaron al punto de que un sector del oficialismo acompañará y alentará la destitución del cuestionado intendente Atilio Feudal- la Alianza de Bariloche atraviesa hoy un período de relativa calma.
Pero el alivio generado por la declaración de emergencia y la asociación del Ejecutivo comunal con los concejales de la oposición concluye en agosto devolviendo a Feudal su anterior protagonismo.
En este marco son varios los sectores que suponen que la asistencia provincial -más que escasa hasta la fecha- con suerte llegará en forma tardía y ven con preocupación el alejamiento de los punteros barriales que todavía no han definido su fidelidad partidaria para la próxima elección.
El esfuerzo del titular de la Alianza y el comité local, Hugo Castañón, por mostrar un bloque político unido y fortalecido contrasta con la percepción de un amplio sector del radicalismo que admite la disgregación partidaria como un hecho irrefutable.
Desbordante de optimismo el legislador aseguró a “Río Negro” que “la Alianza se abroqueló y van a trabajar todos juntos en este proceso electoral”. En tal sentido adelantó que este fin de semana se llevará a cabo un encuentro con todos los sectores de la coalición al que también fue convocado el intendente.
En cambio Rodolfo López Alfonsín -impulsor del Movimiento de Afirmación Radical- admitió la debilidad partidaria al reconocer que “agotadas las instancias de acercamiento (local) se esperaba una actitud (mediación) del comité central provincial y hasta ahora no la hubo”.
El referente de la escición más reciente del comité local, afín a la línea de Federico Storani y conteste de la rebelde “Lilita” Carrió, indicó que “no vamos a sacarle el cuerpo a la campaña, pero va a ser difícil sumarse”.
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