Cayó el presunto homicida en El Bolsón

Estaba en un "aguantadero" del barrio San José. Hubo otros tres detenidos que habrían participado del asalto al repartidor

EL BOLSON (AEB)- Tras ingresar a una vivienda del barrio San José de El Bolsón, integrantes del grupo Bora detuvieron a cuatro personas, entre ellas el principal sospechoso de haber asesinado al sargento René Federico Meyrelles, quien estando de franco intentó impedir que asaltaran a un repartidor en Bariloche.
El sospechoso de haber dado muerte al policía, fue identificado como Fabián Iberra, quien estaba herido y al momento de su detención estaba siendo atendido por una "curandera".
Se investiga la participación de los otros tres detenidos en el caso, aunque se especula que al menos habrían integrado el grupo que intentó asaltar al repartidor.
Los uniformados de la Policía rionegrina -de El Bolsón y Bariloche- y de la vecina provincia de Chubut, habían rastrillado el barrio San José junto al grupo Bora. Tras establecer el domicilio donde aparentemente se encontraban los prófugos, realizaron una decena de disparos intimidatorios e hicieron estallar bombas de estruendo, para desorientar a las personas buscadas. "Fue una maniobra táctica", se mencionó.
Además de Iberra, fueron detenidas dos mujeres y otro hombre con un frondoso prontuario policial y que se había fugado hace poco de la alcaidía de Roca.
"Solo falta que aparezca el arma homicida y el caso estará completamente resuelto", fue el escueto comentario de un efectivo policial que participó del allanamiento.
Luego de los disparos efectuados por el grupo especial y el apresamiento de Iberra y sus acompañantes, pudo verse a varios policías, compañeros del sargento asesinado, abrazándose y con lágrimas en los ojos. "Era un gran compañero, por eso estamos emocionados", indicó un integrante de las brigadas.
Desde temprano, el grupo Bora, junto a personal de distintas Brigadas de Investigaciones y la Brigada Rural, habían cercado el barrio San José, ubicado en el acceso norte de la localidad.
Fuertemente armados, recorrieron distintos sectores y realizaron seis allanamientos con la detención de varias personas y el secuestro de ropa ensangrentada que pertenecía a Iberra.
Con la confirmación que el fugitivo se encontraba en el barrio, los esfuerzos policiales se centraron en una vivienda que fue señalada por uno de los primeros detenidos como el refugio del sospechoso.
Según fuentes extraoficiales, la persona que trasladó a Iberra y las dos mujeres a la región, ayer cambió su declaración, señalando el barrio San José como destino de los fugitivos.
Cerca de las 18.45, integrantes del grupo Bora ingresaron por asalto en una vivienda en la que estaban los presuntos homicidas.
Luego de las detenciones, todos fueron trasladados a la unidad policial a disposición del juez Gaimaró Pozzi. También estaban las dos mujeres que habrían escapado con Iberra, sobre quienes no se aportaron datos filiatorios, aunque se estima que su apellido no sería Parra, como señalaron en un primer momento, sino que se trataría de Liempe o Millaqueo.
Iberra habría recibido tres disparos, aparentemente recibidos en el enfrentamiento con el sargento asesinado. El comisario Tejada aclaró que "lo está revisando el médico porque tiene una herida cicatrizada y un plomo en el cuerpo".

Dos delincuentes "previsibles"

SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- Los sospechosos de haber asaltado al repartidor de la empresa "Mapri" y asesinado al policía René Meyrelles podrían ser señalados como delincuentes previsibles, pero los legisladores todavía no crearon una figura para impedir la escalada delictiva de individuos peligrosos.
Nelson Robaina es un marplatense que ya registra una condena por robo calificado y está procesado por otros delitos similares. Pero se trata del interno que fue descubierto por el juez César Lanfranchi durante una inspección a la alcaidía, acurrucado sobre una cucheta en una celda inhóspita, sin luz ni calefacción y cubierto "por una manta harapienta", según el magistrado.
Una decisión de la justicia lo favoreció hace pocas semanas con la internación en la institución "Asumir" -para drogadependientes-, pero se fugó poco después porque el lugar no cuenta con custodia policial.
Fabián Iberra siguió los pasos de su hermano Pedro e incursionó en el delito siendo muy joven, y aunque los tratamientos tutelares que recibió no lo reformaron, los magistrados que lo enjuiciaron no encontraron conveniente imponerle condena, y dispusieron que continuara cumpliendo su tratamiento en libertad.
Había sido declarado responsable por un robo con armas cometido el 2 de febrero de 2000, cuando tenía 17 años, pero el último 2 de mayo, cuando los jueces de la Cámara Segunda tenían que imponerle la pena, resolvieron eximirlo del castigo, conforme a las prerrogativas de la ley 22.278. De esa manera los jueces permitieron que volviera al mismo hogar donde se había ocultado.

Foto: Iberra al ser ingresado a un patrullero. Tras ser revisado por un médico policial, iba a quedar alojado en la alcaidía de Bariloche.