Sábado 7 de julio de 2001 | ||
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Salvaje asalto a un comerciante |
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Fue en Choele Choel. A la víctima la maniataron y golpearon ferozmente |
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CHOELE CHOEL (AVM).- Un vecino de la localidad vivió el jueves por la noche una verdadera pesadilla. Luego de cerrar su comercio de venta de frutas y verduras ubicado en la calle Avellaneda, el hombre se dirigió a su casa que está en el barrio Maldonado, una populosa barriada separada del ejido urbano de Choele Choel por la ruta nacional 250. Pero allí lo esperaban tres delincuentes que lo golpearon salvajemente para sacarle dinero. Al entrar a su casa, el comerciante se vio sorprendido por tres malhechores que inmediatamente lo redujeron. Pero lo peor estaba por venir. Los delincuentes comenzaron a golpearlo salvajemente, mientras le preguntaban dónde tenía el dinero, y lo amenazaban de muerte con un arma de fuego que le apuntaban a la cabeza. Aparentemente los ladrones conocerían los movimientos de Mario Figueroa, ya que el hombre de origen boliviano vive en una pieza, que esta ubicada al fondo de una propiedad. Adelante hay una casa que ocupa el dueño del lugar, que habría mencionado no haber visto nada. El hecho se registró en el barrio Maldonado, en la calle Belgrano al 85, pasadas las 23. Según informó la policía, Mario Figueroa fue robado por tres personas que tenían sus rostros cubiertos. "Lo estaban esperando adentro, aparentemente conocerían que este señor vivía en ese lugar". "Lo agredieron con golpes de puño y lo amenazaron, y le robaron cerca de 900 pesos. Luego lo amordazaron y maniataron y fue auxiliado por un vecino", mencionaron las fuentes. "Estamos trabajando en el caso. Por el modus operandi estamos viendo si se vinculan con hechos anteriores, y creemos que tenemos algunas pistas que nos pueden dar datos que nos lleven al esclarecimiento", agregaron. El caso esta ya en manos del juez en lo penal, Guillermo Moyano y fue caratulado como "robo calificado". "Llama la atención por la violencia y las amenazas" mencionaron las fuentes policiales. Estaban en la pieza Por su parte, Figueroa relató que "cuando salí del negocio eran como las 11 de la noche. Yo me voy a mi casa. Abrí el portón, metí la camioneta, y cuando entré a mi pieza estaban los delincuentes". Figueroa tiene un ojo cerrado por los golpes y manchas violetas en la cara, lo que testimonia la violencia que utilizaron los asaltantes. "Estaban con la cara tapada con pasamontañas. Me amenazaron, me apuntaron. Traté de no hablar nada porque me iban a matar", mencionó Figueroa. Agregó "que al irse los delincuentes, me ataron pies y manos. Tuve que hacer mucha fuerza me pude desatar un poco. Y después tuve que salir a los saltos hasta donde estaba el dueño. Traté de salir, tuve que cortar todo, estaba casi moribundo porque me golpearon mucho". Figueroa sostuvo -ademas- que "eran tres, pero había dos adentro y la otra persona quedó de campana afuera". |
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